La funcionalidad del iPad

19 h. en España. Las redes sociales enmudecen. Steve Jobs vuelve al escenario respetando su particular indumentaria: camiseta negra, vaqueros y el botellín de agua que siempre le acompaña. Sigue arrastrando un aspecto débil pero mantiene un brillo en los ojos que silencian a un público entregado que abarrota el Moscone Center de San Francisco. Jobs comienza su alocución reseñando los logros de la compañía el último año, que no son pocos. Pero la estrella de la noche no se hace esperar, y en vez de anunciar el “One more thing” que precede a los grandes anuncios, Jobs acaba con la ansiedad de los presentes anunciando el iPad. Se trata del esperado tablet, del que ya sabíamos casi todo menos el nombre, y que a simple vista podríamos confundir con un iPhone sobredimensionado.

Con todo, Apple ha sido víctima de un exceso de hype o rumores en torno al nuevo dispositivo. El listón estaba demasiado alto y las expectativas creadas hicieron que muchos inversores dieran una fría acogida al nuevo equipo de Apple, que perdió un 1'5% en bolsa tras el anuncio del gadget, aunque luego se recuperó a medida que se iban conociendo los detalles. Esta frialdad también ha sido la nota dominante entre su público, que considera el iPad una versión vitaminada del iPhone, y no cabe duda que el mercado esperaba algo más innovador. Tampoco ha gustado a propios y extraños que el dispositivo siga sin contar con multitarea, o la incapacidad de ejecutar dos aplicaciones de forma simultánea. Apple continúa confiando esta función a las notificaciones push, aunque este extremo no ha quedado claro en la presentación. La ausencia de la multitarea limita mucho el uso, en especial si quiere plantearse como herramienta de trabajo, algo que los de Cupertino no han negado al presentar una versión específica para la suite ofimática iWork.

En lo que respecta a sus características técnicas, se trata de una tableta de 9,7 pulgadas, que con almacenamiento en flash en tres capacidades (16, 32 y 64GB), pantalla LED multitáctil, WiFi, acelerómetro, brújula y a escoger entre dos versiones: una sin 3G y otra con conectividad móvil. Para la primera, Apple anuncia una disponibilidad a nivel mundial de dos meses, y habrá que esperar noventa días para la versión, sin duda más interesante, con conectividad móvil inalámbrica. Con todo, sepa que el precio también llevará el marchamo de la casa: entre los 500 y los 900 dólares, y mucho nos tememos que su conversión a euros será literal. El iPad contará también con una nutrida gama de accesorios, incluyendo un teclado que lo convertirán en un inesperado portátil.

¿Merece la pena el iPad? Es posible que esta sea la pregunta que esté rondando la cabeza de muchos, y la respuesta no es sencilla. Funcionalmente, el iPad no aporta, en términos generales, nada nuevo que no cuenten otros dispositivos en el mercado. Ahora bien, hay que considerar que Apple pone a disposición de los usuarios las más de cien mil aplicaciones para el iPhone que corren a la perfección en este dispositivo, más las específicas que desarrollen los programadores. Apple ha vuelto a presentar la plataforma, y deja que el producto y su uso gire en torno al software y los desarrollos. No es un lanzamiento equiparable al del iPod o iPhone, pero tampoco parece que nos equivoquemos si anunciamos que hay iPad para rato.

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