El hombre más viejo de España; uno entre 1.000 millones

Solo uno de cada 1.000 millones de seres humanos varones consigue lo que ha logrado este hombre: llegar a los 112 años. Y ese acontecimiento espectacular sucede el martes 13 de diciembre, en España, en una pequeña localidad de Extremadura, Bienvenida, en la provincia de Badajoz, un pueblo de algo más de 2.000 habitantes que está consagrado a la Virgen de los Milagros, su patrona. Verán que las combinaciones son fáciles y variadas, un cumpleaños centenario en martes 13 , la Virgen de los Milagros y Francisco Núñez Olivera, que nació el mismo año que Cary Grant, dos coetáneos que solo han compartido en esta vida la galantería, el porte señorial que a Francisco le ha valido el apodo de ‘Marchena’, por el parecido que tenía con el cantaor sevillano.

[Una mujer de 105 años cuenta el secreto de la longevidad]

Pero lo habitual es aquello que nos hace iguales a todos en este mundo, que es la muerte, lo normal es Cary Grant, que se murió hace 30 años, cuando ya había cumplido los 82. Lo extraordinario, y hasta lo inexplicable, es este español de Badajoz que ha superado ya el listón impresionante de la estadística, que cifra en uno entre 1.000 millones los hombres que logran superar esa barrera de edad.

Se trata de un acontecimiento excepcional, claro, porque dentro de la rareza de que una persona pueda superar los 110 años, lo realmente singular es que se trate de un hombre, de un varón. Sobre todo en España, que es el segundo país del mundo con más esperanza de vida, tan solo por detrás de Japón, según certificó en 2015 la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su estudio sobre longevidad. De las 14.000 personas que superan los 100 años en España, el porcentaje se va estrechando de forma acelerada y al paso de los 105 años la lista se reduce prácticamente a mujeres. Y partir de los 110 años, la estadística se puede representar ya con los dedos de la mano. En el caso español, solo nueve personas superan los 110 años, y en esa lista, Marchena es el único que figura como varón.

España es el segundo país del mundo con más esperanza de vida, tan sólo por detrás de Japón

Ayer, cuando, anticipándose a las celebraciones del martes 13, su familia se reunió con él para que soplara las velas de la tarta, su hija María Antonia, de 81 años, se acercó a él y le acarició el hombro. “Marchena —le dijo—, que hace 112 años, y eso es lo que estamos celebrando”, y Francisco, con su gorra y su traje gris, primero encoge el gesto, como si él mismo se sorprendiera de tantos años cumplidos, y luego deja un lamento y frunce los labios con un puchero: “Madre mía de mi alma”, exclama en un quejido tierno, entrañable, conmovedor.

En todo el mundo, en la actualidad, solo hay dos varones con más edad que Francisco Núñez, un israelí, Yisrael Kristal, que nació el 15 de septiembre de 1903, y un japonés, Masamitsu Yoshida, nacido el 30 de mayo de 1904. Tras ellos, Marchena, con esa cara de serenidad, de paz, con la que posa en la foto junto a una tarta con velas de tres cifras. El autor de esa imagen es un fotógrafo norteamericano, Charles Ragsdale, afincado en Sevilla, dedicado desde principios de este año a un interesante proyecto: retratar a las generaciones de una misma familia separadas por más de 100 años, una veintena de mujeres y hombres que superan los 105 años retratados junto a sus tataranietos que no llegan a los 10.

En ese trabajo profesional se incluye, además de Marchena, a la mujer más longeva de la historia de España, andaluza de Puente Genil y afincada en Cataluña, Ana María Vela Rubio, nacida el 29 de octubre de 1901. En esa exposición, que pronto comenzará a recorrer de forma itinerante distintas salas de toda España, Charles Ragsdale pretende reflejar la magia y el escalofrío que recorren el cuerpo cuando se dan la mano dos personas separadas por más de un siglo de diferencia. “El ser humano —dice el fotógrafo estadounidense— puede llegar a vivir poco más de 100 años, pero sobrevivimos como especie desde hace miles de años. En esas imágenes, es como si pudiéramos ver el milagro de la existencia, el traspaso del fuego de la vida de unos a otros”.

Solo hay dos varones con más edad que Francisco Núñez en todo el mundo, un israelí y un japonés

Uno de los documentos que acreditan la fecha de nacimiento de Francisco Núñez Olivera es la cartilla militar con la que, en 1926, prestó servicio como soldado en Marruecos en la revuelta del Rif de Abd el-Krim. “Las incursiones eran frecuentes y se fue ganando terreno poco a poco. Allí llegó Francisco Núñez y pudo vivir, con la inocencia de sus 21 años (como tantos otros jóvenes españoles), la incertidumbre de la espera de un ataque, la crueldad de los enfrentamientos y la manera en que combatían los oriundos de la zona... Su compañía estuvo destacada en Tasarines, donde sufrieron un ataque enemigo en la defensa de la posición de Ocbada”, se dice en una de las publicaciones del Ejército de Tierra, que lo rescata como el veterano de guerra más longevo de España.

Cuando llegó la Guerra Civil, Marchena ya era un veterano de guerra. “Creo que para envejecer, lo mismo que para convertirse en hombre cuando se es un chiquillo, se necesita tener muy buena voluntad. Yo soy un poco distraído y me había olvidado de envejecer. Eso es todo”, dejó dicho Cary Grant, el eterno galán, presumiendo de sus muchos años. No llegó a conocer de la existencia de otro galán, nacido el mismo año en Extremadura, que todavía puede seguir diciéndolo a sus 112 años.