Los incendios en 2012 ya han arrasado más de 130.000 hectáreas, el triple que el año pasado

España ha sufrido 10.488 incendios forestales desde el 1 de enero hasta el 29 de julio de este año, con 130.830 hectáreas de superficie forestal quemada, lo que supone que el área arrasada se ha triplicado en relación al mismo periodo del año anterior en el que ardieron 38.854 hectáreas.

Del total de los fuegos, 3.735 fueron incendios (más de una hectárea quemada) y el resto conatos (menos de una hectárea arrasada), según informa el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en su página web. En 2011, durante el mismo periodo, se produjeron 8.553 fuegos, de los que 3.009 fueron incendios y el resto conatos.

De los calificados como grandes incendios, más de 500 hectáreas, se han registrado un total de 20 en lo que va de año, frente a los 5 del año anterior. Las regiones del noroeste -donde se incluyen Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco y las provincias de León y Zamora- son las que más han sufrido con el 49,57 % de los fuegos.

Le siguen las comunidades interiores, todas las no costeras, excepto León y Zamora, con un 33,79%; las del Mediterráneo -todas las costeras con el mar Mediterráneo, incluyendo sus provincias interiores- con un 16%, y Canarias con un 0.64%. En este cálculo no van incluidos los incendios desatados este fin de semana en el archipiélago canario, ni los de Cáceres y Baleares.

Extremar la precaución

Las imprudencias están detrás de alrededor del 50% de los incendios forestales declarados en 2012, una cifra "quizá" más elevada que en anteriores ejercicios, según explicó el viernes agosto el subsecretario del Ministerio del Interior, Luis Aguilera, quien calificó la actual campaña de incendios de "especialmente virulenta" y llamó a la ciudadanía a extremar la precaución. También han contribuido un régimen de lluvias menor al normal y las altas temperaturas de este año. 

En lo que va del 29 de julio hasta este domingo 5 de agosto, se han producido varios grandes incendios, como el que afectó al Alto Tajo, con unas 1.500 hectáreas afectadas, el de Ossera, en la comarca leridana del Alt Urgell, con 17 hectáreas, y los más recientes de La Palma y La Gomera y el de la Sierra de Gata, con varios cientos de hectáreas quemadas.