Es noticia
Los imitadores rusos que engañaron a Almeida afirman haber hablado con Sánchez
  1. Mundo
Muerde el anzuelo, pero no mucho

Los imitadores rusos que engañaron a Almeida afirman haber hablado con Sánchez

Los "bromistas" se hicieron pasar por "un político africano" que solicitaba discutir con el presidente del Gobierno español sobre el acuerdo del grano ucraniano

Foto: El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una imagen de archivo. (Getty/Pool/Filip Singer)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una imagen de archivo. (Getty/Pool/Filip Singer)

Para el Kremlin todo es un arma, incluso el humor. Por eso lleva años explotando el trabajo de Vovan y Lexus, dos imitadores que los medios rusos definen como “bromistas”, y que se dedican a llamar a políticos internacionales, por lo general occidentales, haciéndose pasar por figuras relevantes de otros países. El objetivo es tratar de conseguir que estos políticos caigan en contradicciones y conseguir audios jugosos que después amplificará el ecosistema propagandístico ruso para mostrar su “hipocresía”. Y el último en caer en la trampa, según afirman, ha sido el presidente Pedro Sánchez. Afirmación que, hasta el momento, la Moncloa no ha confirmado.

Los propios Vovan y Lexus han publicado el audio, o parte de él, en su cuenta de Telegram. Pero, por lo que puede deducirse de esos extractos, esta vez los “bromistas” no parecen haber rascado demasiado. En esencia, Sánchez habría mantenido la misma postura que su Gobierno lleva meses defendiendo, mostrándose firmemente en apoyo de Ucrania y sin contradecirse a sí mismo.

Foto: El Presidente ucraniano Volodymyr Zelensky asiste a la 3ª Cumbre de la Comunidad Política Europea. (Europea Press / Kay Nietfeld)

Este periódico intentó contactar con la Moncloa para confirmar la llamada, pero todavía ha recibido respuesta. Según lo que ha trascendido, los falsarios se hicieron pasar por “un político africano” que solicitaba discutir con Sánchez sobre el acuerdo del grano craniano. Este pacto para exportar cereales de ese país a través del mar Negro fue alcanzado meses después del inicio de la invasión rusa a gran escala con la mediación de Turquía y la ONU para mitigar el impacto de la guerra en los mercados alimentarios. Un acuerdo que Rusia se negó a prorrogar de forma unilateral el pasado mes de julio.

En el audio es difícil extraer algo, puesto que por encima de la pista original de la llamada en inglés aparece un doblaje en ruso que imposibilita escuchar muchas palabras. Pero, según lo que han publicado medios rusos, Sánchez habría manifestado su preocupación por la falta de continuidad del acuerdo, pero también se habría mostrado “comprometido con la lucha” ante la invasión de Ucrania. Al mismo tiempo, se habría posicionado en contra de que se readmita a Rusia dentro del sistema de pagos internacionales SWIFT, del que fue desconectado como parte de las sanciones por la invasión de Ucrania, y que es una de las demandas clave de Moscú para prorrogar el pacto. "Nuestra posición es que la reconexión a SWIFT no recibirá la aprobación de la UE", habría dicho Sánchez, según publica el medio Pravda en español. El líder socialista también aseguró que España está a favor de la paz en Ucrania, pero que esta debe alcanzarse en los términos que señale ese país.

Foto: El coronel Ibroh Amadou Bacharou saluda en una manifestación contra el ejército francés en Níger. (EFE/EPA/Issifou Djibo)

En otro momento, los imitadores habrían intentado provocar al presidente español preguntándole por el continente africano. "Sánchez dijo que su apoyo a África era una ‘oposición al imperialismo’, pero se opuso a que los militares europeos abandonaran el continente. Además, declaró la necesidad de ‘restablecer el orden’ en Níger, ya que es inaceptable dejar a Rusia como ‘un jugador líder en la región", afirma Pravda. Unas declaraciones que pueden parecer escandalosas a ojos de la ciudadanía rusa, pero que difícilmente harán que nadie se rasgue las vestiduras en una Unión Europea, donde a rasgos generales todos sus líderes mantienen esa misma postura.

El modus operandi de este tipo de “bromas” es siempre el mismo: se cree que los servicios de inteligencia rusos consiguen los números de las víctimas, estudian su perfil y desarrollan una estrategia sobre cómo llegar hasta ellas y abordarlas. Después, Vovan y Lexus, cuyas dotes de imitación son sin duda excepcionales, encarnan a alguien que dicha víctima pueda considerar un interlocutor amistoso. Tras los preliminares, empiezan las preguntas trampa.

Foto: El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. ( EFE/Pedro Puente Hoyos)

La lista de víctimas es kilométrica, desde el entonces ministro de defensa británico Ben Wallace hasta el expresidente estadounidense George Bush, pasando por el príncipe Harry, el presidente polaco Andrjez Duda, el francés Emmanuel Macron, el líder opositor venezolano Juan Guaidó o los escritores Stephen King y J. K. Rowling. También la exministra de defensa española María Dolores de Cospedal y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, han caído en estas artimañas. En el caso de Almeida, la llamada fue absolutamente delirante: los humoristas se hicieron pasar por el alcalde de Kiev, Vitaly Klitchko, e hicieron creer al desconcertado madrileño que un grupo de ucranianos se disponía a viajar a Madrid durante la cumbre de la OTAN y a hacer una performance sin ropa en la que lanzarían excrementos.

Para el Kremlin todo es un arma, incluso el humor. Por eso lleva años explotando el trabajo de Vovan y Lexus, dos imitadores que los medios rusos definen como “bromistas”, y que se dedican a llamar a políticos internacionales, por lo general occidentales, haciéndose pasar por figuras relevantes de otros países. El objetivo es tratar de conseguir que estos políticos caigan en contradicciones y conseguir audios jugosos que después amplificará el ecosistema propagandístico ruso para mostrar su “hipocresía”. Y el último en caer en la trampa, según afirman, ha sido el presidente Pedro Sánchez. Afirmación que, hasta el momento, la Moncloa no ha confirmado.

Pedro Sánchez Vladimir Putin