Es noticia
El Grupo Wagner asegura que han tomado el Ayuntamiento de Bajmut: "Legalmente, es nuestra"
  1. Mundo
el frente más complicado

El Grupo Wagner asegura que han tomado el Ayuntamiento de Bajmut: "Legalmente, es nuestra"

Aunque Ucrania no ha confirmado la información, sí reconoce que las fuerzas rusas "intentan hacerse con el control total" de la ciudad. Zelenski admitió que la situación era "especialmente tensa"

Foto: Tropas ucranianas disparan un obús cerca de Bajmut en una imagen de archivo. (Reuters/Marko Djurica)
Tropas ucranianas disparan un obús cerca de Bajmut en una imagen de archivo. (Reuters/Marko Djurica)

Durante meses, la lucha por el control de la ciudad ucraniana de Bajmut ha sido calle a calle, metro a metro. La noche del domingo, el líder del Grupo Wagner, las fuerzas mercenarias rusas que están liderando el asalto a la ciudad, Yevgeni Prigozhin, anunció que los rusos controlan ya el centro de la ciudad y aseguró que sellaba ese control mediante el simbólico alzamiento de dos banderas, la rusa y la del Grupo Wagner, en el edificio de la Administración local de la ciudad. Poco después, el Ejército ucraniano aseguraba que todavía mantenía posiciones en el oeste de la ciudad. En el escenario de la batalla de Bajmut, donde cada edificio es una nueva trinchera y cada avance ruso es celebrado por Moscú como la última gran victoria política, ambas realidades coexisten perfectamente.

"2 de abril, 23 horas en punto. Legalmente, hemos tomado Bajmut. Los comandantes de las unidades que tomaron la Administración y el barrio central izarán ahora esas banderas [la rusa y la del grupo paramilitar]", afirmó Prigozhin en un vídeo distribuido en sus canales de Telegram, supuestamente grabado en el interior del edificio de la Administración local. "Esta es la compañía privada militar Wagner, estos son los hombres que conquistaron Bajmut", añade el líder mercenario, en un mensaje que puede leerse tanto para el público externo como interno y ejemplifica una vez más cómo la batalla de Bajmut no es solo contra Ucrania, sino clave en esa lucha de poder interna entre el Grupo Wagner y el estamento militar del Kremlin. Hacerse, "legalmente", con Bajmut es un punto más en el haber de Prigozhin.

Foto: Soldados ucranianos llegan a Chasiv Yar después de luchar en Bajmut. (Amador Guallar)

Un golpe de efecto que viene también apenas unas horas después de la muerte en una explosión en una cafetería de San Petersburgo de Vladlen Tartaski, un conocido bloguero militar ruso y cercano aliado del líder mercenario, que había visitado el frente con los de Wagner en varias ocasiones. "Izamos la bandera rusa con la inscripción 'Buen recuerdo para Vladlen Tatarski'", añadía Prigozhin en el vídeo. Tartaski fue asesinado en un atentado bomba en una cafetería vinculada al propio Grupo Wagner, y la presunta autora del atentado —identificada por Rusia como una joven con posiciones antiguerra en Ucrania— está en busca y captura.

Con todo, según Prigozhin, la resistencia ucraniana todavía permanecería en los barrios occidentales de la localidad. En su último reporte la mañana del lunes, el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas ucranianas no hizo más referencia al avance del Grupo Wagner en el centro de la ciudad, aunque apuntó que las fuerzas rusas “intentan hacerse con el control total” de Bajmut, una referencia poco habitual en las notas oficiales de Kiev a la posibilidad de que Rusia conquiste por completo esta ciudad.

“En la dirección de Bajmut, el enemigo no deja de atacar [la ciudad de] Bajmut, intentando hacerse con el control total” del municipio, se lee en la nota del Estado Mayor, publicada poco después de las seis de mañana del lunes (4.00 GMT) en su cuenta de Facebook.

Foto: Vladen Tatarsky. (Reuters)

La intensidad de los combates en Bajmut cambia de forma muy dinámica y depende, sobre todo, del suministro de munición, según ha asegurado previamente una fuente del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), al tiempo que reconocía la dificultad de la situación. Durante los últimos meses, el estamento militar y político ucraniano ha debatido sobre la necesidad o no de mantener la posición en Bajmut, una ciudad cuya importancia es más política que estratégica militar. Con escasa munición y convertida en una guerra de desgaste y de trincheras, las fuerzas ucranianas han acusado dramáticas bajas en su intento de agotar el avance ruso.

Efectivamente, las fuerzas rusas no han logrado otros avances territoriales en otros frentes, pese a sus ataques en Vulhedar (sur del Donbás) o su ofensiva en Avdiivka. Sin embargo, el coste para Ucrania ha sido masivo, a las puertas de la primavera y con el posible inicio de la contraofensiva.

En su discurso de anoche, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski dio las gracias como hace todos los días a sus tropas que defienden Bajmut, sobre cuya situación dijo que era “especialmente tensa” el domingo. Previamente, una fuente del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) afirmó que la intensidad de los combates en Bajmut cambia constantemente y depende, sobre todo, del suministro de munición que recibe cada uno de los dos bandos.

Durante meses, la lucha por el control de la ciudad ucraniana de Bajmut ha sido calle a calle, metro a metro. La noche del domingo, el líder del Grupo Wagner, las fuerzas mercenarias rusas que están liderando el asalto a la ciudad, Yevgeni Prigozhin, anunció que los rusos controlan ya el centro de la ciudad y aseguró que sellaba ese control mediante el simbólico alzamiento de dos banderas, la rusa y la del Grupo Wagner, en el edificio de la Administración local de la ciudad. Poco después, el Ejército ucraniano aseguraba que todavía mantenía posiciones en el oeste de la ciudad. En el escenario de la batalla de Bajmut, donde cada edificio es una nueva trinchera y cada avance ruso es celebrado por Moscú como la última gran victoria política, ambas realidades coexisten perfectamente.

Conflicto de Ucrania
El redactor recomienda