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¿Quién mató a Bobby Kennedy? Cinco dudas razonables 50 años después de su asesinato
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SE CUMPLE MEDIO SIGLO DE SU MUERTE

¿Quién mató a Bobby Kennedy? Cinco dudas razonables 50 años después de su asesinato

Este miércoles se cumple medio siglo del asesinato de Robet Kenney, una muerte que, a día de hoy, continúa generando severas dudas de cómo se produjo en realidad

Foto: Robert Kennedy (D), junto a su hermano John. F. Keneddy en 1960. (Gtres)
Robert Kennedy (D), junto a su hermano John. F. Keneddy en 1960. (Gtres)

Un caluroso 6 de junio de 1968, se iba a escribir un nuevo capítulo de la historia maldita de los Kennedy. Escasas horas antes, las primarias del partido demócrata habían determinado que Robert fuera su candidato a la presidencia de los Estados Unidos, con la intención de poder llegar al poder como hizo su hermano John, quien había sido brutalmente asesinado cinco años antes. Lo que Bobby no podía imaginar es que él iba a correr su mismo trágico destino.

Cuatro horas después de haber sido elegido candidato al gobierno norteamericano, Bobby Kennedy quiso celebrar su victoria en las primarias junto a sus seguidores. Para ello, decidió acudir al Hotel Ambassador de Los Angeles, donde tenía previsto realizar un discurso y un encuentro con sus votantes. Sin embargo, un pequeño cambio de planes de última hora provocó que, tras sus palabras, decidiera atender a los medios de comunicación, una decisión mortal.

Foto: El representante demócrata por Massachisetts y presidente del Grupo de Trabajo para la Igualdad Transgénero. (EFE)

Mientras acudía a su encuentro con los periodistas, un hombre se abalanzó contra él y descerrajó hasta tres tiros en el cuerpo de Bobby Kennedy, uno de ellos en su cabeza y que, a la postre, terminaría siendo mortal, provocando su muerte varias horas después en el Central Receiving Hospital. Los guardaespaldas que acompañaban al candidato a la presidencia se abalanzaron contra el tirador, un palestino llamado Sirhan Sirhan. Pero, ¿realmente fue el su asesino?

Este miércoles se cumplen cincuenta años de la muerte de Robert Kennedy y el caso sigue contando con algunas zonas sombrías que no terminan de tener una explicación, al menos, sencilla. Tanto que Robert Keneddy Jr., uno de sus once hijos, ha pedido recientemente a la justicia norteamericana que reabra el caso al entender que hay algunos puntos que siguen requiriendo una explicación. Incluso tras entrevistarse son Sirhan Sirhan, cree que existen dudas razonables.

Trayectoria difícil de explicar

Tras ofrecer el discurso público de su victoria, Kennedy tenía intención de tener un encuentro multitudinario con sus seguidores. Pero, antes de ello, la presión de los medios dio lugar a que se improvisara un encuentro con la prensa. Para evitar que la muchedumbre le detuviera, el pequeño grupo de seguridad que le escoltaba decidió que atravesara la cocina del hotel... pero allí, Sirhan Sirhan, le esperaba con un revólver con el que disparó tras abalanzarse contra él.

La escolta consiguió reducirle, pero tres disparos habían alcanzado al presidente: dos de ellos entraron por su axila derecha -uno salió por el pecho y el otro se alojó en la parte posterior del cuello- mientras que, el tercero entró por la parte trasera de su cabeza, muy cerca de la oreja izquierda. Se sabe que Sirhan Sirhan hirió a varias personas cercanas a Kennedy, una comitiva a la que atacó de frente. Pero, entonces, ¿cómo hirió al presidente por la espalda?

placeholder Sirhan Sirhan, en el momento de ser detenido en el Hotel Ambassador. (Corbis)
Sirhan Sirhan, en el momento de ser detenido en el Hotel Ambassador. (Corbis)

Las balas no concuerdan

Si el tirador salió al encuentro del pequeño grupo en el que se encontraba Robert Kennedy, al menos surgen dudas de cómo sus disparos pudieron llegar a la parte posterior del cuerpo del candidato demócrata. Además, por si fuera poco, Sirhan Sirham fue detenido a varios metros de la pequeña comitiva, mientras que el informe forense confirma que el disparo mortal se produjo a pocos centímetros de su cuerpo. Pero no es la única duda al respecto.

Los forenses que acudieron a la zona del suceso llegaron a contar hasta trece impactos de bala -incluso un cuarto disparo sobre Kennedy que no llegó a darle, pero sí atravesó su abrigo-. Se sabe que el tirador portaba un revólver calibre 22 Iver-Johnson Cadet, con el que encajan todos los casquillos recogidos en el lugar del suceso, pero... ¿cómo pudo realizar trece disparos si el tambor de ese arma es de solo ocho balas? Ua nueva teoría nacía.

¿Un segundo tirador?

Estas pruebas llevaron a pensar a algunos investigadores la posibilidad de que, en la escena del crimen, hubiera existido un segundo tirador que, de hecho, es el que realmente podría haber acabado con la vida de Kennedy. Sin embargo, las investigaciones realizadas en el momento no fueron capaces de esclarecer lo sucedido, ni en las imágenes obtenidas del tiroteo se pudo ver a nadie disparando más allá de Sirhan Sirhan. ¿Podría haber alguien más implicado?

Las teorías más conspiranoicas hablan de dos personas en concreto que podrían haber tenido que ver en el asesinato. Una de ellas, Eugene Cesar, un hombre que no pertenecía a la escolta de Kennedy, pero que fue contratado por el hotel para la seguridad del acto, del que se sabe que desenfundó su arma durante el tiroteo, también un calibre 22; la otra, una misteriosa mujer con vestido de lunares a la que, mientras huía del edificio, varios testigos la escucharon decir: "Hemos disparado a Kennedy".

Sospechas de la CIA

Como ocurrió en el caso de su hermano, John F. Kennedy, algunas teorías apuntan a que la CIA podría haber estado involucrada en el caso de la muerte de Bobby. La razón sería exactamente la misma: las políticas tomadas con respecto a Bahía de Cochinos que habrían servido para granjearse enemigos dentro de su propio país en un momento de alta tensión. Y, en ambos caso, un mismo hombre estuvo en ambos escenarios del crimen: David Morales.

Se trataba del jefe del JMWAVE, nombre de la operación y, también, de la estación de la CIA con la que buscaban derrocar a Fidel Castro. Según una investigación de la 'BBC', las fotografías previas al incidente confirman su presencia en el hotel, así como de otros dos agentes del cuerpo como Gordon Campbell y George Joannides. El exabogado de Morales, Robert Walton, confirmó a la cadena que su cliente estuvo tanto en Dallas como en Los Angeles el mismo día de ambos tiroteos.

Una memoria frágil

Shiran Shiran reconoció durante el juicio haber sido autor del asesinato de Robert Kennedy, pero no porque recordara haberlo hecho, sino por las pruebas que las autoridades le presentaron. De origen palestino, su razón para haber atacado al candidato demócrata tendría que ver con aceptar las políticas para armar a Israel pero, la realidad, es que este hombre asegura que él sigue sin ser consciente de haberle disparado, aunque sí a otros presentes en el grupo.

A sus 74 años continúa en la cárcel y Robert Kennedy Jr., abogado de profesión, se ha entrevistado con él en varias ocasiones, de cuyas conversaciones ha salido la convicción de pedir a las autoridades que reabran el caso, al entender que no existen pruebas contundentes para dar por cerrado el asesinato. Cincuenta años después de su muerte, quién mató a Bobby Kennedy sigue generando ciertas dudas razonables, aunque posiblemente nunca se sepa si existe una verdad extraoficial.

Un caluroso 6 de junio de 1968, se iba a escribir un nuevo capítulo de la historia maldita de los Kennedy. Escasas horas antes, las primarias del partido demócrata habían determinado que Robert fuera su candidato a la presidencia de los Estados Unidos, con la intención de poder llegar al poder como hizo su hermano John, quien había sido brutalmente asesinado cinco años antes. Lo que Bobby no podía imaginar es que él iba a correr su mismo trágico destino.

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