De Alemania a Eslovenia: la UE cierra filas en torno a Rajoy y rechaza mediar

Mariano Rajoy llegó este jueves a Bruselas silencioso, pero arropado por las palabras de varios de sus colegas europeos, como Angela Merkel, Emmanuel Macron o el primer ministro esloveno, Miro Cerar. Después de que haya expirado el segundo plazo dado por el Gobierno español a la Generalitat y con la vista puesta en las decisiones que tome el Gobierno el sábado, la UE ha cerrado filas en torno a España.

La cuestión catalana no está en la agenda, y no se espera que se plantee en la primera jornada de la cumbre europea que se celebra este jueves y este viernes en Bruselas, aunque otra cosa son los márgenes, donde siempre se abordan todas las cuestiones que están de actualidad. Pero aunque se aborde, pero la postura está clara: se trata de una cuestión interna que debe resolverse en España, en el marco de la Constitución.

“Las instituciones y los estados miembros tienen claro que no hay margen o espacio para ningún tipo de de mediación o de iniciativa internacional”, ha afirmado el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk. Aunque se sigue de cerca la “preocupante situación en España” y cada líder tiene sus propias “emociones, opiniones y análisis”, en lo que respecta a la cuestión catalana “no hay espacio para una intervención de la UE en esta cuestión”, ha dicho el anfitrión del encuentro.

La Moncloa no quiere elevar al más alto nivel europeo la cuestión catalana, todo lo contrario de lo que busca la Generalitat. Y Rajoy se ha abstenido de hacer ningún comentario durante la primera jornada de la cumbre, en la que ha mantenido un encuentro bilateral con su homólogo francés, Emmanuel Macron.

Apartado con Macron y apoyo de Merkel

Macron ha vuelto a ser una de las voces más contundentes en defensa de la Constitución española. El presidente galo ha mostrado su apoyo al Gobierno español ante el pulso catalán y ha asegurado que de la reunión que hasta este viernes celebran los líderes europeos va a salir “un mensaje de unidad” con España.

“Esta cumbre estará marcada por un mensaje de unidad, de unidad en torno a los estados miembros de cara a las crisis que puedan experimentar, de unidad en torno a España”, ha afirmado Macron.

Durante el encuentro bilateral que han mantenido Macron y Rajoy, de unos 20 minutos, ambos líderes se han centrado en otros temas que preocupan a los dos, como la situación de los conocidos como 'trabajadores desplazados', la inmigración o el futuro de la Unión Europea, gran tema de esta cumbre, en la que también se hablará del Brexit.

La canciller alemana, Angela Merkel, también ha expresado el apoyo de Berlín “a la posición del Gobierno español” y ha reiterado su respaldo al orden constitucional. “Esperamos que se encuentren soluciones sobre la base de la Constitución española”, ha dicho Merkel.

"Hay una ley y una Constitución que respetar”, ha recalcado el primer ministro de Luxemburgo, Xabier Bettel, quien se ha mostrado también partidario de “encontrar una solución política, diplomática”, que pase por el diálogo. Bettel considera que la cuestión catalana es “un asunto español que debe ser gestionado por España”. Esto supone un rechazo implícito a la idea de que medie una tercera parte, tal y como demanda la Generalitat.

Eslovenia no ve la 'vía eslovena'

Especialmente simbólico ha sido el apoyo que ha brindado el primer ministro esloveno, Miro Cerar, al orden constitucional español. Pese a que los independentistas catalanes han adoptado la 'vía eslovena' como una fuente de inspiración para el 'procés', Cerar ha afirmado que la situación de Cataluña no puede compararse con la salida de su país de la antigua Yugoslavia.

"España, incluida Cataluña, es un Estado democrático, y cuando hay una cuestión sobre la autodeterminación debe resolverse en línea con el orden constitucional de España y, lo más importante, se tiene que hacer pacíficamente, sin violencia, democráticamente y con diálogo", ha afirmado Cerar.

El rifirrafe con Bélgica

Rajoy, que se sienta al lado de su homólogo belga, Charles Michel, en la mesa de reuniones del Consejo Europeo, ha tenido la oportunidad de aclarar directamente con él su postura sobre la cuestión catalana. Michel fue el primer líder europeo en condenar la actuación de las fuerzas de seguridad el propio 1-O y ha afirmado que la catalana “no es una crisis jurídica, sino una crisis política” para la que hace falta diálogo.

Michel se mantuvo este jueves firme en su postura. “Condeno todas las formas de violencia, apelo al diálogo y a la rebaja de las tensiones”. Pero también ha afirmado que se ha sobredimensionado el rifirrafe diplomático que han mantenido ambos países a cuenta de Cataluña, después de que transcendiera que había llegado un 'email' de protesta de Moncloa a la capital belga.