Trump niega la cobra a Merkel: "Tuve un gran encuentro con la canciller alemana"

Amanece en Washington y la cuenta personal de Donald Trump en Twitter vuelve a servir al presidente para responder a los medios. Un día después de negar la mano a la canciller alemana Angela Merkel en la Casa Blanca, el presidente estadounidense niega una relación tensa con su homóloga. "Tuve un GRAN encuentro con la canciller alemana Angela Merkel", resaltó el mandatario, que reprochó a las "fake news" ('noticias falsas') haber manipulado la escena en la que los periodistas piden el choque de manos entre ambos líderes mientras Trump evitaba mirar a Merkel.

El republicano aprovechó para recordar que Alemania debe "grandes cantidades de dinero" a la OTAN y a Estados Unidos que "deben ser pagadas" por la "poderosa y muy cara" defensa que ofrece al país europeo. Las palabras de Trump, que acostumbran llegar vía Twitter, se producen horas después de la primera reunión entre ambos líderes. En la conferencia de prensa que ofreció junto a la canciller el viernes, Trump reiteró su "fuerte apoyo a la OTAN", pero subrayó que es necesario que todos los países miembros "paguen su parte justa".

"Muchas naciones deben vastas cantidades de dinero (a la OTAN) y es muy injusto para Estados Unidos. Estas naciones deben pagar lo que deben", insistió. Merkel, por su parte, admitió durante esa conferencia de prensa la "importancia" de la Alianza Atlántica y aseguró que Alemania reconoce la necesidad de "aumentar su gasto" en la defensa común. "Trabajaremos en ello", concluyó.

Tras una reunión entre dos mandatarios antagónicos, en las que se trataron asuntos como el comercio bilateral entre ambos países, el futuro de la propia OTAN y la postura de la nueva Administración estadounidense con la Unión Europea. El resultado, al menos ante los medios de comunicación congregados en la Casa Blanca, terminó siendo un bochorno diplomático.

Pese al "gran encuentro" mantenido con la canciller, la cuenta @realDonaldTrump no llegó a compartir ninguna imagen de la reunión, como sí hizo un día antes tras recibir al Comité de Estudio Republicano (RSC). Si bien el presidente ignoró a Merkel en la tensa sesión de fotos con los periodistas tras la conversación sostenida en la Casa Blanca, sí le estrechó la mano en las puertas del Despacho Oval cuando la canciller llegó al salón minutos antes.