Es noticia
Bush se concentra en un mensaje optimista de cara a las elecciones frente a los reveses
  1. Mundo

Bush se concentra en un mensaje optimista de cara a las elecciones frente a los reveses

El presidente de EEUU, George W. Bush, que se concentra ahora en los aspectos más positivos de su política para hacer frente a reveses como la

Foto: Bush se concentra en un mensaje optimista de cara a las elecciones frente a los reveses
Bush se concentra en un mensaje optimista de cara a las elecciones frente a los reveses

El presidente de EEUU, George W. Bush, que se concentra ahora en los aspectos más positivos de su política para hacer frente a reveses como la situación de Irak, viajó este martes a Florida para apoyar a los candidatos republicanos en las elecciones. Así como hace cuatro años, en los primeros comicios legislativos de su mandato y en pleno apogeo de su popularidad, Bush desempeñó un papel crucial en la campaña de los candidatos republicanos, en esta ocasión su papel está siendo mucho más discreto.

Hasta ahora, su intervención en la campaña se ha limitado prácticamente a participar en actos de recaudación de fondos, alejado del público. En parte, esto se debe a la posición más débil que ocupa en la actualidad, donde la marcha de la guerra en Irak, escándalos de corrupción y otros factores han disminuido su popularidad.

La Casa Blanca ha optado por reservarse en esta campaña y concentrarse en los últimos diez días, cuando planea una ráfaga de intervenciones presidenciales en algunos de los distritos más disputados. Bush participó este martes en una recepción a favor del candidato republicano a la Cámara de Representantes Vern Buchanan en Sarasota (Florida) y el jueves planea comparecer en un acto a favor de otros aspirantes en Iowa y Michigan.

El mensaje que Bush quiere transmitir es de optimismo, frente a las encuestas que apuntan a una victoria de la oposición demócrata. El presidente quiere impedir que cunda el desánimo entre unos republicanos afectados no sólo por la guerra en Irak sino también por escándalos como el protagonizado por el congresista Mark Foley, quien dimitió después de que se descubriera que había enviado mensajes de contenido sexual a becarios del Congreso.

El domingo, el presidente se vio obligado a corregir incluso a su padre, el ex presidente George Bush, quien había declarado que odia pensar cómo sería la vida de su hijo si los demócratas se hacen con el control del Congreso en las elecciones del 7 de noviembre. "No debería de hacer esas especulaciones (...). Debería de haberme llamado antes y yo le habría dicho que no van (a ganar)", dijo un sonriente Bush en una entrevista con la cadena ABC.

El presidente quiere centrar su mensaje, por ejemplo, en la buena marcha de la economía. El lunes, en una mesa redonda en Washington, dibujó una economía que, según las expectativas, crecerá este año en torno al 3,4 por ciento con una inflación de cerca de un 3 por ciento, bajo desempleo y beneficios empresariales récord. Aun así, esa buena marcha no parece traducirse en votos para los republicanos, según indican las encuestas.

Sondeo de 'The Washington Post'

Un sondeo que publica este martes el periódico The Washington Post afirma que los votantes que se declaran independientes "se inclinan fuertemente por los demócratas en lo que concierne a Irak y otros de los principales asuntos" que se debaten en estos comicios. En la actualidad, los republicanos controlan tanto el Senado como la Cámara de Representantes.

Pero los demócratas podrían hacerse con el mando en la Cámara de Representantes si arrebatan a sus rivales al menos quince escaños en ese foro de 435 asientos, y que se renueva completamente en estos comicios. En el Senado, donde se renueva un tercio de los cien escaños de la cámara, los demócratas necesitan ganar a los republicanos seis asientos.

Bush asegura que los republicanos mantendrán su mayoría, pese a lo que vaticinan las encuestas. En la entrevista con la ABC, recordó que en las presidenciales de 2004 los sondeos a pie de urna apuntaban a una victoria de su rival, John Kerry. Entonces, agregó, "por lo que decían las encuestas, yo era ya cosa del pasado", pero acabó imponiéndose con comodidad.

El presidente de EEUU, George W. Bush, que se concentra ahora en los aspectos más positivos de su política para hacer frente a reveses como la situación de Irak, viajó este martes a Florida para apoyar a los candidatos republicanos en las elecciones. Así como hace cuatro años, en los primeros comicios legislativos de su mandato y en pleno apogeo de su popularidad, Bush desempeñó un papel crucial en la campaña de los candidatos republicanos, en esta ocasión su papel está siendo mucho más discreto.