"Pues no, no empezó bien la semana del PP con el gatillazo en las elecciones de Castilla y León, pero resulta que este contratiempo, autonómico y político, ha convertido al PP en rehén de Vox, de Santiago Abascal".
 
"Representa una anécdota respecto a la guerra abierta y violenta que se han declarado Isabel Díaz Ayuso y Pablo Casado. Se restriegan entre sí las infamias, las campañas, las conspiraciones y han precipitado, ambos, una crisis política que estalló sin medias tintas cuando la propia presidenta de la comunidad de Madrid acusó a la cúpula nacional del PP de haber urdido un complot bastante chapucero para investigar, se supone, los negocios de su hermano e intentar chantajear a la propia Ayuso".