La sequía está dejando uno de los escenarios más problemáticos de las últimas décadas. Cada vez llueve menos, el clima es más cálido y el terreno más árido en la península ibérica.
Según los registros, la situación de los embalses es la más complicada en casi tres décadas. Son los peores datos desde 1995, cuando los pantanos estaban a un 30% de su capacidad total, según el Boletín Hidrológico del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco).