Las familias riojanas, aragonesas, vascas y navarras, las más volcadas en los fondos

El mapa de los fondos de inversión en España, configurado a partir de los datos recabados por el Observatorio Inverco, ratifica que 2013 fue un buen para estos productos. Creció el patrimonio, el número de partícipes, el peso de estos vehículos con respecto a la economía en general y su emergente protagonismo frente a los depósitos.

Eso sí, las diferencias por regiones continúan siendo muy acusadas. Aunque la media nacional refleja que3 de cada 10 familias invierten en fondos, en cuatro de ellas, La Rioja, Aragón, País Vasco y Navarra, esa proporción oscila entre 6 y 7 de familias de cada 10. Por el contrario, en Comunidades Autónomas tan representativas como Valencia o Andalucía el porcentaje es inferior al 20%.

Centrando el punto de mira en el patrimonio, tres regiones acaparan el protagonismo. Madrid (45.637,3 millones de euros), Cataluña (23.468,8 millones) y País Vasco (17.935,3 millones) concentran el 57% del volumen en efectivo total de los fondos, que a finales de 2013 ascendía 153.779,7 millones.

En cuanto al patrimonio medio por partícipe, la media nacional se sitúa en los 30.136euros, un 10% por encima del cierre de 2012. Ahora bien, únicamente tres Comunidades superan ese nivel: Madrid, con 48.276 euros; País Vasco, 30.836 euros; y Cantabria, 30.509 euros. Por el contrario, en Castilla-La Mancha, Asturias, Extremadura, Islas Baleares, Ceuta y Aragón el promedio es inferior a los 25.000 euros.

Durante el pasado ejercicio, el patrimonio total creció en España en más de 30.000 millones de euros, una evolución que propició que su peso con respecto al Producto Interior Bruto (PIB) español creciera del 11,6% de 2012 al 15% de 2013. Al mismo tiempo, y en un año en el que el Banco de España puso al rendimiento de los depósitos, esa evolución del patrimonio permitió que el peso relativo de los fondos aumentara con respecto al de sus tradicionales competidores. Si a finales de 2012 el patrimonio de los fondos equivalía al 11,4% del total del dinero existente en depósitos, cuando acabó el pasado ejercicio esa proporción creció hasta el 13,9%.