40 años y bajo ahorro: ¿cómo pagar la universidad de los hijos y la jubilación?
Una de las opciones es configurar carteras de inversión con diferentes objetivos que permitan generar mayor rentabilidad sobre el ahorro
La llegada de un hijo es un gran motivo de alegría. Sin embargo, en numerosas ocasiones también se convierte en una gran preocupación para los padres. Poder garantizarles un buen nivel de vida, apoyarles económicamente en sus estudios o en sus proyectos laborales requiere de una gran disciplina y esfuerzo financiero que no todos logran conseguir.
Actualmente, el precio medio de la universidad pública en España se sitúa en los 1.021,8 euros anuales (17,03 euros el crédito), según los últimos datos del Ministerio de Ciencia e Innovación. Estas cifras se elevan significativamente si se opta por una universidad privada, donde el precio medio de los centros más populares puede alcanzar los 10.000 euros al año, y se incrementan todavía más si se decide estudiar en el extranjero (más de 35.000 dólares en el caso de EEUU).
Asumir gastos como estos si se tienen varios hijos puede llegar a ser todo un reto, sobre todo si al mismo tiempo debe utilizarse una estrategia que permita garantizar el nivel de vida durante la jubilación. Sin embargo, el factor clave no reside en el volumen de ingresos de la unidad familiar, más bien en la capacidad de ahorro y la gestión del gasto.
Gestión del gasto de manera eficaz
La capacidad de ahorro y la gestión del gasto son uno de los problemas más comunes a los que se enfrentan la mayoría de familias. Uno de los ejemplos es el de Juan Pablo, un ahorrador de 39 años que participó en Asesor Top 2020, un concurso que busca a los mejores asesores financieros del país. Juan Pablo tenía como objetivo poner orden a sus finanzas y planificar su estabilidad y la de sus hijas de cara al futuro. Él y su mujer contaban con un buen volumen de ingresos, sin embargo, consideraban que destinaban al consumo más que al ahorro.
Por ello, para poder planificar la universidad de los hijos y la jubilación Julián Aniel-Quiroga Area, asesor financiero en Atl Capital y uno de los ganadores del concurso organizado por Finect, apuntaba al ahorro. “Es primordial incrementar la capacidad de ahorro para cumplir los objetivos a largo plazo”.
En concreto, para el caso de Juan Pablo, padre de dos hijas pequeñas, Aniel-Quiroga explica que lo recomendable es ahorrar unos 430 mensuales hasta 2035, cuando la hija mayor comience sus estudios, y unos 200 euros al mes después de dicho periodo para seguir garantizando la educación de su segunda hija y su propia jubilación.
Sin embargo, con el ahorro no basta para llegar al objetivo, por lo que es necesario complementarlo con la inversión en diferentes activos. Para poder hacerlo, este asesor financiero recomienda invertir ese dinero “en una tipología de activos que permitan generar rentabilidad sobre el ahorro”. Algunos de los sectores que recomienda son salud, biotecnología, ciberseguridad o consumo, lo que permitirá “una mayor diversificación e incrementar el potencial de revalorización de la cartera”.
¿Cuánto puedo ganar invirtiendo a largo plazo?
Dos carteras con diferentes objetivos
Con el objetivo de garantizar tanto el pago de universidades como la jubilación, José Fernández Bellerín, agente de Andbank España propone para perfiles como el de Juan Pablo dos carteras de fondos de inversión con baja volatilidad, cada una orientada a un objetivo. Una de ellas, la de las hijas, debería contener diferentes fondos de renta fija, mixtos y retorno absoluto. Por otra parte, contaría con otra cartera centrada en jubilación, similar a la de sus hijas pero con una cuarta parte invertida en renta variable temática para obtener una rentabilidad extra.
Y es que en edades como las de Juan Pablo, si se cuenta con una situación financiera estable, es el momento para planificar el futuro aprovechando la rentabilidad que se puede obtener de los mercados financieros a través de la renta variable. “Juan Pablo está en posición de arriesgar, ya que sus circunstancias financieras lo permiten, por ello, un fondo de renta variable internacional diversificado geográficamente puede ser una buena opción”, apunta Jorge Vives Alfonsea, consejero financiero de Abante Asesores.
La llegada de un hijo es un gran motivo de alegría. Sin embargo, en numerosas ocasiones también se convierte en una gran preocupación para los padres. Poder garantizarles un buen nivel de vida, apoyarles económicamente en sus estudios o en sus proyectos laborales requiere de una gran disciplina y esfuerzo financiero que no todos logran conseguir.