Buffett controló el 5% de Endesa antes de la irrupción de Enel

En la OPA de Endesa ha estado metido todo el mundo, literalmente. Hasta el mayor inversor y segunda persona más rica del planeta, Warren Buffett, merodeó en la ‘movida’ que salpicó a la mayor eléctrica española con una participación de hasta el 5%. Y, como casi todos los accionistas, ha saldado su aventura con grandes ganancias, aunque podrían haber sido mayores si hubiera aguantado hasta el final.

Según fuentes del mercado conocedoras de la operación, Buffett entró en Endesa en 2005 a precios de entre 14 y 16 euros, antes de la OPA de Gas Natural. Algo que tiene toda la lógica del mundo: si la gasista vio claro que Endesa era una ‘perita en dulce’ porque cotizaba muy barata respecto a sus fundamentales, cómo no iba a verlo el rey de la filosofía ‘value’, que se basa en invertir en este tipo de compañías infravaloradas.

Esta participación del 5% se encontraba dentro del 10% depositado en Chase Nominees que aparecía en los registros de la CNMV. Cuando llegó la OPA de Gas Natural, la intención inicial de Berskhire Hathaway, el fondo de Buffett, era vender en el entorno de 21 euros porque no entendían la operación, en especial el follón político que se montó a su alrededor.

Sin embargo, los asesores españoles del gestor norteamericano le aconsejan aguantar ante la férrea defensa montada por Manuel Pizarro. Según estas fuentes, la propia compañía le instó a mantenerse en el capital. El fondo no sólo se mantuvo sino que incrementó su posición en otro 1%, aproximadamente.

Como es de sobra conocido, el ‘caballero blanco’ de Pizarro fue la alemana E.On, que lanzó su OPA a 27,5 euros en un primer momento (febrero de 2006). De nuevo, los asesores nacionales de Buffett le instaron a mantener la posición, porque pensaban que la batalla iba a continuar y que eso se traduciría en una subida de los precios de las ofertas. Y de nuevo también, acertaron: la irrupción de Acciona provocó que E.On elevase su OPA hasta 35 euros en septiembre.

Buffett se planta

Ahí ya se plantó Buffett. Las fuentes consultadas explican que la plusvalía era mucho mayor de la esperada inicialmente y que, en un análisis de valor puro como el que practica Buffett, Endesa había dejado de ser una inversión atractiva a esos precios. Por eso, Berskhire Hathaway deshizo su posición gradualmente en los meses posteriores, en niveles entre 34 y 36, e incluso alguna parte por encima, cuando E.On mejoró de nuevo su precio hasta 38,75 en la puja a sobre cerrado.

Por consiguiente, no esperó a la irrupción de Enel y a los acontecimientos que ello desató: la mejora del precio de E.On a 40 euros, la dimisión de Conthe, el acuerdo entre los tres implicados y la OPA final a 41,3 euros. Si hubiera aguantado, habría podido ganar más. Pero Buffett también es de los que siguen el viejo dicho de que el último duro se lo lleve otro. El 6% de Endesa a 35 euros supone unos 2.200 millones de euros y la plusvalía estimada con los datos disponibles podría superar holgadamente los 1.000 millones.

Las citadas fuentes aseguran, en todo caso, que estas ventas se hicieron en mercado y que el fondo no acudió a los raids fuera de mercado realizados primero por Acciona y luego por Enel, en los que se hicieron con sendos paquetes del 24,9% de la eléctrica española.

Buffett ha anunciado hace unos días que está preparando una gran operación valorada entre 40.000 y 60.000 millones de dólares, porque se ha cansado de comprar “ratones” y ahora busca un “elefante”. Además, ha añadido que quiere expandir su presencia fuera de EEUU. Habrá que estar pendientes.