Es noticia
Mejorar el acceso al saneamiento del agua en África para frenar violencia y migraciones
  1. Medioambiente
  2. Agua
1.600 millones de personas sin acceso al agua

Mejorar el acceso al saneamiento del agua en África para frenar violencia y migraciones

Quien tiene el control del agua, tiene el poder. Aunque para nosotros esto no tenga mucho sentido, en determinadas áreas de África es su día a día. Diversos proyectos internacionales pretenden poner fin a esta situación

Foto: El acceso al agua potable y de saneamiento en África es causa de migraciones y de violencia. EFE
El acceso al agua potable y de saneamiento en África es causa de migraciones y de violencia. EFE

El Centro de Monitorización de Desplazamiento Interno de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) estimó que más de 17,2 millones de personas en todo el mundo se vieron obligadas a abandonar su hogar a consecuencia de los desastres naturales en 2018. Un extracto filtrado del borrador del próximo informe del Grupo Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU (IPCC, por sus siglas en inglés), que se publicará en 2022, calcula que con un incremento de 1,5 grados centígrados (ºC) en la temperatura global del planeta, más de 350 millones de habitantes sufrirán escasez de agua, una cifra que llega a los 400 millones de euros con un escenario de calentamiento de 2ºC y esto, según datos del Banco Mundial, puede llegar a causar, al menos, 143 millones de migrantes por falta de saneamiento, sequías o inundaciones en los próximos años.

Esta misma semana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF en el informe del Programa Conjunto de Monitorización ‘Progresos en materia de agua para el consumo, el saneamiento y la higiene en los hogares 2000-2020’ alertan de que, de acuerdo con la actual tendencia, de aquí a 2030 más de 1.600 millones de personas en todo el mundo no tendrán acceso a agua potable salubre en su hogar, 2.800 millones de humanos no dispondrá de saneamiento adecuado y 1.900 millones de habitantes no contarán con “instalaciones básicas” para lavarse las manos. Para evitar que estas estimaciones se tornen en realidad, el informe avisa de que será necesario multiplicar por diez el índice actual de progreso de los países menos adelantados.

Otro problema es la violencia y la falta de seguridad, pues quien controla el agua mantiene el poder sobre la población

El problema es ambiental, social, económico y, por ende, político, ya que ocho de cada diez personas de las que no disponen de acceso a servicios básicos de abastecimiento vive en pueblos. Este hecho puede intensificar el fenómeno de abandono rural que no solo ocurre en España, sino en buena parte del planeta. Según el informe de la ONU y UNICEF, esta situación se agrava en el África Subsahariana que ostenta el índice de progreso más lento a nivel mundial y donde poco más de la mitad de su población (el 54%) usaba agua potable salubre. El problema tiene una arista más, la violencia y la falta de seguridad, pues quien controla el agua mantiene el poder sobre la población. La cooperación internacional en esta materia es esencial.

En este sentido, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Gobierno de Alemania han puesto en marcha un proyecto para mejorar la escasez crónica de agua en Níger, que conllevará una mejora de la salud de su población y una prevención de la radicalización y la violencia. Se trata del ‘Trust Fund Projects’, que está abierto a donaciones de países de los Veintisiete estados miembro de la UE, pero también a otros gobiernos, filántropos y ONG.

placeholder El control del agua es causa de la elevada presencia de violencia en algunas áreas. Reuters
El control del agua es causa de la elevada presencia de violencia en algunas áreas. Reuters

El analista del BEI Yusuf Yassin ha explicado que mejorar la demanda de agua en el oeste de Níger es un asunto “peligroso”, donde las milicias han permanecido activas durante los últimos años y la violencia es común a lo largo de la frontera con Mali y Burkina Faso, que son algunos de los países más pobres del continente africano. De hecho, refleja que las visitas de inspección de los expertos en agua a la zona siempre deben realizarse bajo la protección del ejército.

Pero en el país, la necesidad de mejorar el suministro es crucial porque la disponibilidad de agua potable está por debajo incluso de los estándares globales, con gran disparidad entre las zonas rurales y las urbanas. El país está en los últimos puestos del Índice de Desarrollo Humano de la ONU, con la mayor parte de su territorio afectado por la sequía y la desertificación.

En la región de Tillabéri, cerca de la frontera occidental de Níger, el 92 por ciento de su población vive en áreas rurales y convive con la crónica falta de suministro de agua potable, especialmente en la temporada seca, cuando las temperaturas suben de los 40ºC. El fondo del BEI y Alemania han puesto en marcha un proyecto junto al gobierno del país africano para dar solución a estos problemas y ha impulsado una inversión récord, no solo en Níger, sino en otros 18 países del África Subsahariana.

placeholder Asegurar el acceso de todo el mundo al agua potable y de saneamiento es una de las prioridades de la UE. Reuters
Asegurar el acceso de todo el mundo al agua potable y de saneamiento es una de las prioridades de la UE. Reuters

La responsable de la oficina de supervisión de proyectos del BEI en Níger Cristina Mejía ha señalado que garantizar agua potable a las sociedades y las economías puede hacerlas más resilientes y seguras. Por ejemplo, señala que en la ciudad de Téra, al noroeste de la capital y cerca de la frontera de Burkina Faso, solo el 40% de sus 30.000 habitantes tienen conexión con el alcantarillado público. Mejía prevé que “el desarrollo económico y social en la región de Tillabéri contribuirá a prevenir la radicalización y es un área de alta prioridad para el gobierno de Níger y para la Unión Europea”.

Por ello, destaca que las prioridades del proyecto son, en primer lugar, la rehabilitación de las reservas de agua en los alrededores de las ciudades y, en segundo lugar, el tratamiento y la canalización del río Níger a lo largo de 100 kilómetros hacia el este, lo que permitiría suministrar agua a los pueblos entre Téra y el río Níger. Además, el BEI ha anunciado que también está analizando la posibilidad de explorar el uso de energía solar para este proyecto y reducir así los costes operacionales.

El Fondo del BEI ‘Water Sector Fund’, financiado por el Gobierno alemán, está realizando un estudio para identificar las soluciones técnicas más sostenibles. El director de la División de Agua del Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania, Karin Roelofs, ha asegurado que proporcionar agua potable a países como Níger es “prioritario para su equipo”. “Invertir en infraestructuras locales es necesario para garantizar las demandas de agua de ciudades secundarias como Téra’, ha añadido el responsable alemán, quien subraya que trabajar con el BEI a través del Water Sector Fund permite vincular estos planes con las capacidades técnicas y financieras del banco europeo.

Foto: Los gorilas de la reserva de Virunga. Imagen: Cedida
TE PUEDE INTERESAR
Matar a un guardabosques
Jose Luis Gallego

En este contexto, la ingeniera de agua en el BEI Caroline Ogutu ha defendido la creatividad de este sector en África para aplicar distintos enfoques de modo que las iniciativas sean sostenibles y cubran las necesidades de las poblaciones. Por ejemplo, ha citado otra iniciativa del BEI en Tanzania para garantizar el acceso al agua y a los puntos de lavado de manos. En total, se invertirán 104 millones de euros (45 millones del BEI, 45 millones de la Agencia Francesa del Desarrollo y 14,5 millones del Gobierno de Tanzania.

La cooperación y la financiación hacia los países en desarrollo en esta década es más necesaria que nunca, especialmente en el contexto de los dos grandes retos a medio plazo de la humanidad: detener la emergencia climática y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El Centro de Monitorización de Desplazamiento Interno de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) estimó que más de 17,2 millones de personas en todo el mundo se vieron obligadas a abandonar su hogar a consecuencia de los desastres naturales en 2018. Un extracto filtrado del borrador del próximo informe del Grupo Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU (IPCC, por sus siglas en inglés), que se publicará en 2022, calcula que con un incremento de 1,5 grados centígrados (ºC) en la temperatura global del planeta, más de 350 millones de habitantes sufrirán escasez de agua, una cifra que llega a los 400 millones de euros con un escenario de calentamiento de 2ºC y esto, según datos del Banco Mundial, puede llegar a causar, al menos, 143 millones de migrantes por falta de saneamiento, sequías o inundaciones en los próximos años.

UNICEF Social
El redactor recomienda