Andersen pacta la salida de su oficina en Barcelona, que se integra en Broseta

La oficina de Andersen en Barcelona anunciará en las próximas horas su integración en Broseta. Según confirman a El Confidencial fuentes del sector, la ruptura de la dirección de Andersen en España con los dirigentes de la sede del despacho la Ciudad Condal es definitiva, por lo que ambas partes han decidido emprender caminos por separado.

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Con este divorcio de mutuo acuerdo se pone fin a un tira y afloja que se prolonga prácticamente desde la reentrada de Andersen en España en 2017, a través de su acuerdo con Global Abogados (Barcelona) y Olleros Abogados (Madrid y Valencia). De hecho, a pesar de operar bajo la misma marca, ambos despachos han mantenido en todo momento su propia estructura societaria, sin que desde la oficina de la capital catalana se avinieran a las directrices que marcaba, no ya de la dirección en España, sino la firma a nivel global.

De hecho, como explican las mismas fuentes, que la presencia de Andersen en España se articulara a través de un único 'partnership' era uno de los mandatos que había impuesto la firma a nivel global. Sin embargo, y a pesar de los diversos intentos de negociación entre las partes, el acuerdo ha sido imposible por los impedimentos y retrasos que llegaban desde la dirección de la Ciudad Condal, bajo la batuta de Carlos Salinas, José María Rebollo, Álvaro Gámez y Toni de Weest.

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A la vista de estas dificultades y una vez el acuerdo se asumió como imposible, la cúpula del despacho a nivel nacional, encabezada por José Vicente Morote e Íñigo Rodríguez-Sastre, cerraron hace unas semanas la integración de la firma barcelonesa CHR Legal. Una unión que ha contado con el beneplácito de Andersen, firme en su propósito de mantener una presencia permanente en la Ciudad Condal y seguir creciendo en ella.