Almeida alivia la agonía a la Ermita del Santo: vale un 15% menos que en 2020

Los dueños del centro comercial Ermita del Santo, están de enhorabuena. El pleno del Ayuntamiento de Madrid ha dado luz verde este martes a la Modificación Puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOUM) para el área de planeamiento de Ermita del Santo. Un proyecto que ha sido revisado respecto al presentado en 2022, que fue paralizado debido a una fuerte oposición vecinal.

Este nuevo proyecto, de iniciativa privada, como destacan desde el consistorio madrileño, ha visto reducida su edificabilidad -pasa de 600 a 548 viviendas- y su aprobación inicial supone una gran noticia para su propietario, la socimi Desarrollos Ermita del Santo, impulsada por inversores venezolanos, que han visto cómo su activo estrella, el centro comercial, ha ido perdiendo valor en los últimos cuatro años, desde que la sociedad debutó en bolsa en julio de 2020.

Entonces, el centro comercial se valoró en 17,7 millones de euros, por encima de los 15,24 millones de la última valoración comunicada por la socimi al BME Growth, mercado en el que cotiza, hace unos días. Una valoración realizada por la tasadora Gesvalt.

Es decir, en cuatro años, el centro comercial ha perdido casi un 15% de su valor, como ha reconocido la socimi en sus últimos resultados, una pérdida de valor que, al menos durante 2023, la sociedad achaca a la "escasa incorporación de operadores nuevos a la actividad así como al deterioro general del sector del retail tras la pandemia".

¿Pandemia o abandono?

En el informe de gestión de la socimi correspondiente a 2023, la socimi explica que el centro comercial ha mantenido un nivel de ocupación prácticamente idéntico al de 2022, con 17 inquilinos. "Los años de pandemia tuvieron un reflejo en la reducción de horarios con las limitaciones de aperturas en la mayor parte de esos años, limitaciones de horario que quedaron canceladas a partir del levantamiento de las restricciones. En este último sentido, hay determinadas actividades del centro comercial, fundamentalmente todas las relacionadas con el ocio y restauración, que habían padecido directamente estas limitaciones y el consiguiente efecto en sus cuentas de resultados, y que a partir de este año 2023 han ido recuperando lentamente sus niveles de aforos prepandémicos".

No obstante, quienes aún permanecen en el centro comercial como inquilinos denuncian la situación de abandono que viven desde hace años. "Hay goteras, los accesos al centro están tapados, hay mallas por todas partes con letreros de mantenimiento. Ya no se puede entrar ni atravesar el centro comercial", explica el trabajador de una de las empresas que aún siguen funcionando en el centro.

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Algunos negocios echaron el cierre hace meses, otros, hace apenas unos días. "El Foster's Hollywood, uno de los pocos restaurantes que quedaban en el centro, cerró la semana pasada y ya se ha desmantelado. El centro está muy degradado, es todo muy decadente", opina un usuario del centro. De hecho, la ocupación del centro comercial ha pasado del 90% a cierre de 2022, al 80% a cierre de 2023, como reconoce la propia socimi en sus cuentas. Otros negocios como el gimnasio, los karts, la bolera o el Burger King siguen funcionando.

En 2002, la propia socimi señalaba que "las expectativas de futuro para la entrada de nuevos arrendatarios son moderadamente optimistas. Durante el ario 2022 hemos venido observando un creciente interés en operadores para analizar su implantación en nuestro Centro Comercia, así estamos en conversaciones con 5 nuevos operadores interesados en incorporarse al centro".

El primer paso para la desaparición del centro comercial y su sustitución por un nuevo desarrollo ya se ha producido con la aprobación provisional. El siguiente trámite será el visto bueno -o no- de la Comunidad de Madrid, en aproximadamente un mes, para su aprobación definitiva, proceso que aún puede llevar varios meses más y está por ver, además, cómo quedará la valoración de los terrenos con los cambios introducidos. Hay que recordar que en el planeamiento anterior, se otorgaba un valor a los terrenos recalificados de 81,7 millones de euros, muy por encima de los 17,7 millones en los que se valoraba hace un par de años el centro comercial y también muy por encima de los 15,2 millones en los que está valorado a cierre de 2023.

Capital venezolano detrás del proyecto

La socimi Desarrollos Ermita del Santo es propiedad de capital venezolano. A cierre de 2023, entre sus accionistas principales figuraban Ibemetex Spain (25,52%), Ibemetex Investment (24,05%), Starbright Managgemeent (9,5%) y Citation 123 (8,50%), todas ellas empresas vinculadas a Alberto Enrique Finol Galué, uno de los principales impulsores de la socimi, junto a Vicente Armas Bauza, Carlos y David Gutiérrez Swanson. Empresas como la norteamericana Pershing LLC, que hasta diciembre de 2022 ostentaba el 12,7%, ya no figuran en el capital de la socimi, al menos no con un porcentaje superior al 5%.

Como publicó El Confidencial, Alberto Enrique Finol Gaulé es el presidente y consejero delegado de Desarrollos Ermita del Santo. Finol es, a su vez, administrador único de Ibemetex, uno de los principales accionistas de la socimi, y también es dueño de los cines Aqualon en Huelva. Su nombre aparece, asimismo, en la base de datos de los Papeles de Panamá del Consorcio Internacional de Periodistas, donde figuran los nombres de 200.000 compañías, fundaciones y fondos con sede en 21 paraísos fiscales, desde Hong Kong hasta Nevada, en Estados Unidos.

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En concreto, Alberto Finol aparece en los Paradise Papers como managing director de Toplight Corp. N.V. y también en los Pandora Papers como ultimate beneficial owner de la sociedad Fordcliff International Limited, una compañía con sede en Tórtola, la isla de mayor tamaño, más poblada y conocida de las Islas Vírgenes Británicas.

Respecto a las últimas cuentas anuales de la socimi y del informe de auditoría, además de la nueva pérdida de valor de su principal activo, el centro comercial, destaca asimismo la salvedad a sus cuentas realizada por Grant Thorton, que advierte de que el auditor avisa de que el activo Espacio Ermita, sociedad propiedad de la socimi está valorada en 17,3 según su coste de adquisición, si bien, a cierre de 2023, el auditor entiende que está sobrevalorado en 7 millones de euros y entiende, asimismo, que la cifra del epígrafe "Resultados de ejercicios anteriores” se encuentra también sobrevalorado en casi 7 millones de euros.

Una salvedad que la socimi atribuye "exclusivamente en un criterio contable no recogido en las cuentas anuales individuales de los ejercicios sociales anteriores (también auditados, sin salvedad) y que, a priori, el consejo de administración no comparte".

Entiende la socmi, por tanto, que el patrimonio neto de la sociedad "seguiría siendo positivo incluso con el deterioro pretendido por los auditores [...], que el consejo de Administración adoptó la decisión de estudiar en profundidad la salvedad, con abogados y contables, habiendo presentado el 18 de mayo de 2022 una consulta a la Dirección General de Tributos sobre el efecto del criterio contable de la salvedad, en relación a los dividendos obligatorios del régimen de socimi".

Una consulta que aún no ha sido resuelta.