Es noticia
"No doy por hecho el pacto PNV-PSE. Con Sánchez es como Santo Tomás, ver para creer"
  1. España
  2. País Vasco
ENTREVISTA A IMANOL PRADALES (PNV)

"No doy por hecho el pacto PNV-PSE. Con Sánchez es como Santo Tomás, ver para creer"

El candidato a lehendakari del PNV denuncia la "agenda oculta" de Bildu, que aspira a ganarle el 21-A, y alimenta la tesis de una traición del PSE. Sobre la independencia, apunta: "Tenemos paciencia histórica, ahora estamos en clave de autogobierno"

Foto:  El candidato del PNV al lehendakari, Imanol Pradales, posa para El Confidencial. (J. G. O.)
El candidato del PNV al lehendakari, Imanol Pradales, posa para El Confidencial. (J. G. O.)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Imanol Pradales Gil (Santurce, Vizcaya. 1978) aspira a convertirse en el primer lehendakari del PNV con ocho apellidos castellanos. Descendiente de la emigración burgalesa, convencido nacionalista y euskaldún, representa una revolución para el partido de Sabino Arana, que ve amenazado por primera vez su liderazgo político en el País Vasco. Las encuestas otorgan a Bildu una ventaja de partida, con un voto directo fidelísimo, frente a un PNV a la baja y sin signos, de momento, de remontada. Para movilizar el voto de afines y ajenos, Pradales avisa del riesgo de que Bildu imponga su "agenda oculta" si gobierna —"su cultura política y democrática me preocupa: es control, intervención, imposicion—. Y alimenta la idea de que puede haber a última hora un giro del timón del PSE en la política de pactos: "Sánchez cambia de opinión constantemente". Si es lehendakari, trabajará para conseguir del Gobierno central mayores cotas de soberanía: "El PNV tiene paciencia histórica, ahora estamos en clave de autogobierno".

PREGUNTA. ¿El PNV se ha vuelto un partido mortal, como dicen sus rivales? Bildu desafía por primera vez su hegemonía en el País Vasco.

RESPUESTA. ¿Un partido mortal? (Ríe) El PNV va a cumplir 129 años. Y al PNV lo han matado en muchas ocasiones. El año 77, antes de las primeras elecciones democráticas, había en Euskadi decenas de partidos que eran mucho más sexis. Estaba mucho más de moda la izquierda revolucionaria. Y decían que el PNV era un partido carca, burgués y viejuno. Me recuerda mucho a lo de aquella época. El año 77 ya le habían matado al PNV. Muchos. El PNV ganó las elecciones en Euskadi, luego ganó las autonómicas del año 1980 y Carlos Garaikoetxea fue lehendakari. Por lo tanto, el PNV tiene una larga trayectoria, una gran capacidad de adaptación a la sociedad y a sus demandas. Ha sabido leer en todo momento la pulsión de la sociedad. El PNV todavía no ha perdido ninguna elección en clave vasca en este país. El año pasado fueron municipales y forales y ganamos las elecciones. Parece que las ha ganado Bildu, y no. Y vamos a ver lo que pasa el 21 de abril, que yo estoy convencido de que vamos a volver a ganar.

P. ¿Qué aporta Imanol Pradales que no tuviera el lehendakari Iñigo Urkullu?

R. Aporto una generación distinta, juventud. Aporto un conocimiento de más de 12 años en la gestión de las políticas públicas. Aporto una manera distinta de mirar, generacionalmente, a las demandas sociales. Yo tengo una hija pequeña. Estoy muy preocupado con los temas ligados a la sanidad pública, los temas ligados a la educación de mi hija. Tienes una cuadrilla de amigos en la que hablas de temas de los de 40, que no son los mismos de los de 60 y por lo tanto tenemos miradas un poco distintas.

P. ¿Da por hecho un pacto de gobierno con los socialistas?

R. Yo no doy por hecho un pacto con el PSOE. Porque, es verdad que tenemos un acuerdo de gobernabilidad en el ámbito municipal y foral, y el propio Gobierno vasco es de coalición y hay un acuerdo de investidura (en el Congreso)... Pero con Sánchez, como Santo Tomás, ver para creer. Ahora que estamos en Semana Santa.

P. Pues para no fiarse llevan gobernando juntos muchos años...

R. Sólo me fío del Partido Nacionalista Vasco.

P. ¿Entonces usted contempla que el PSE se vaya con Bildu?

R. Sánchez cambia de opinión constantemente. El día 21 a la noche veremos la foto que hay y por eso es muy importante que el PNV tenga un gran resultado. Lo recordaba Aitor Esteban el otro día: Patxi López juró y perjuró que nunca pactaría con el Partido Popular y fue lehendakari gracias al Partido Popular. Pamplona está ahí y solo me fío del PNV. Con Sánchez, como Santo Tomás, ver para creer.

P. ¿Y es posible un frente nacionalista? Ya pactaron en Lizarra (1998) y para el Plan Ibarretxe. Y el candidato de Bildu, Pello Otxandiano, ya se lo ha ofrecido.

R. A ver, el PNV tiene capacidad de interlocución y de acuerdo con todos los partidos políticos en Euskadi, lo ha demostrado históricamente. Lo hemos dicho, nosotros estamos en clave de un acuerdo con el Partido Socialista, estamos satisfechos con los resultados de la coalición con el PSE. EH Bildu habla de acuerdos de país. Pero lo cierto es que cuando ha tenido la oportunidad de llegar al pacto educativo, le temblaron las piernas. Y se salió en el último minuto.

"Bildu es incertidumbre. Existe una agenda oculta que no sabemos cuál es. Su cultura política me preocupa: control, intervención"

P. Usted es sociólogo. ¿Cómo explica el avance fulgurante de Bildu? ¿Hay una amnesia voluntaria en la sociedad vasca?

R. Yo, que sí he vivido la fase de la violencia y el terrorismo de ETA, creo que este país estaba muy tensionado política y socialmente. Fueron años tan duros, tan dramáticos, tan horrorosos, que había una cierta necesidad de pasar página. Y una cosa es pasar página y otra cosa es tener amnesia y no tener memoria de lo que ha ocurrido. Nosotros, desde luego, tenemos memoria y sabemos lo que ha pasado en este país y sabemos dónde ha estado cada cual y dónde está Sortu, que son los herederos de Batasuna. Estos no han condenado nunca el terrorismo de ETA, tampoco fueron capaces de desmarcarse. Por lo tanto, tienen una asignatura pendiente con la sociedad vasca y con las víctimas.

P. ¿Defendería la concesión de indultos individuales para los presos de ETA? Parece que caminamos hacia ese escenario.

R. ¿Indultos individuales? Hay una legislación, que es la que toca aplicar y punto. La legislación está para cumplirse.

P. ¿Por qué no debería gobernar Bildu en el País Vasco? ¿Qué riesgos ve?

R. Lo primero que tenemos que poner encima de la mesa es cuál es el modelo que defiende el PNV para gobernar este país y cuál es el modelo que tiene Bildu. Yo lo desconozco. Para mí el modelo Bildu es incertidumbre en estos momentos. De hecho, creo que existe una agenda oculta que no sabemos cuál es.

Foto: Ortuzar y Pradales en un acto en Madrid. (EFE) Opinión
TE PUEDE INTERESAR
El PNV y la resurrección de Cristo
José Antonio Zarzalejos

P. ¿Qué quiere decir con eso de agenda oculta?

R. Yo no he escuchado todavía cuál es el modelo de política económica industrial, más allá de la necesidad de intervenir en el ámbito privado. El intervencionismo a mí me pone los pelos de punta. Me recuerda a modelos del otro lado del charco, Venezuela. ¿Cuál es el modelo de política de vivienda? Única y exclusivamente el fomento del alquiler. ¿Por qué hay que coartarle la libertad a una persona que quiere optar por comprar una vivienda? ¿Solo desde el ámbito público se debe favorecer el alquiler? Nosotros defendemos que cada persona decida libremente, que nadie le imponga, ni le controle lo que tiene que hacer.

P. ¿Pero ve alguna razón aparte de la económica por la que Bildu no deba gobernar? Yo le he escuchado a usted hablar de populismo, también de imposición.

R. Existe una cultura política en Sortu, que es quien manda en Bildu, donde hay algunos valores preestablecidos que desde el punto de vista de la cultura democrática me preocupan. El control, la intervención, la imposición. Son elementos que tienen que ver con un mundo que durante muchos años ha estado a otra cosa y no a construir un país. Y a mí eso me preocupa.

"Quizá en la España profunda es complicado de entender pero el PNV, más allá de Sabino Arana, es integrador"

P. Mañana (por ayer domingo) celebran el el Aberri Eguna pero ni PNV ni Bildu hablan de independencia, ahora el autogobierno es la panacea. El otro día me recordaba un viejo dirigente lo que decía Jesús Insausti Uzturre, presidente de su partido cuando la escisión de Garaikoetxea: había que reivindicar la independencia por lo menos una vez al año, el resto, a trabajar. ¿Seguirá esa máxima si es lehendakari?

R. Yo a lo que me voy a dedicar es a trabajar por más y mejor autogobierno para este país, porque es sinónimo de bienestar todos los días. Planteo a la sociedad vasca un compromiso con una triple agenda. Una nueva agenda del bienestar, ligada a la mejora y a la modernización de las políticas públicas para mantener la calidad de vida que tenemos en este país: Osakidetza (sanidad), ámbito educativo, seguridad ciudadana, protección social. Una segunda agenda global. Euskadi tiene que dar un salto político y estar en foros y organismos de carácter multilateral o europeo, en donde se toman decisiones que acaban afectándonos a nosotros. Y pongo un ejemplo muy chiquitín, pero que es relevante. Tenemos que tener presencia en el Ecofin, en donde los ministros de Hacienda y Finanzas de Europa toman decisiones. Tenemos el Concierto Económico que es bilateral con el Estado. Tenemos que jugar la baza de las redes internacionales como país, porque necesitamos atraer talento y seguir atrayendo inversión. Tenemos que poner en valor de alguna forma una Euskadi en paz también desde el punto de vista del desarrollo económico. Y desarrollar una estrategia vasca de atracción de talento, porque tenemos un problema de profesionales que van más allá de las fronteras estatales. Creo que tenemos que trascender un poco el ámbito y el terreno de juego estatal desde el punto de vista de Euskadi. Y por último, la agenda humanista para combatir las nuevas injusticias sociales. No me refiero solo a el problema de la brecha de género, la desigualdad entre hombres y mujeres, que es más clásica. Sino a una desigualdad creciente en el mercado de trabajo, entre los que tienen un buen empleo y un mal empleo, entre la esfera pública y la privada. En el mundo rural, en el mundo urbano. Hay un nuevo mundo de injusticias.

placeholder Pradales durante un mitin del PNV en Elgeta, Gipuzkoa. (J. G. O.)
Pradales durante un mitin del PNV en Elgeta, Gipuzkoa. (J. G. O.)

P. Su exigencia de bilateralidad con el Estado y de ganar soberanía ante Europa está plasmada en su acuerdo con Sánchez. ¿Cree que el PSOE aceptará el modelo de una España plurinacional y confederal?

R. Si necesita los votos del PNV tendrá que ver cómo acuerda con el PNV. Está en un documento acordado entre las dos formaciones políticas, hemos establecido ya un marco de negociación claro.

P. La reforma del estatuto vasco está varada desde hace tres legislaturas en el Parlamento de Vitoria, sin acuerdo. Le insisto, ¿se reconocerá la nación?

R. Ya lo hizo el PSC en Cataluña y el propio Zapatero lo admitió en el Congreso de los Diputados como presidente de Gobierno, con el preámbulo del Estatut que luego cepilló el Tribunal Constitucional y que fue un poco el origen del llamado procés catalán. El preámbulo de aquel Estatut hablaba de Cataluña como nación y eso pasó el filtro del Parlament catalán, del Congreso de los Diputados con un apoyo explícito del PSOE y del presidente de la época, Zapatero. Y lo cepilló, en expresión de Alfonso Guerra, el Tribunal Constitucional. O sea, el árbitro comprado.

P. Siguiendo con el futuro estatuto vasco. ¿Usted defenderá esa distinción que estableció Ibarretxe, y que asumió Urkullu, entre ciudadanos residentes vascos y nacionales vascos?

R. El debate del nuevo estatuto político que propuso el lehendakari Ibarretxe se superó con la nueva ponencia que se abrió en el seno del Parlamento Vasco, en donde se ha trabajado, como tú misma decías, durante varias legislaturas, y se ha avanzado mucho, incluso con una serie de bases de lo que puede ser un nuevo estatuto y su articulado. Yo creo que hay que tomar como base esos trabajos parlamentarios y buscar un acuerdo.

P. Pero no me ha contestado. ¿Hay que distinguir entre ciudadanos residentes y nacionales vascos?

R. Yo defiendo el trabajo que aparece en estos momentos en el seno de la ponencia que se estableció en el Parlamento Vasco. Creo que esa es la base desde la que tenemos que construir el nuevo estatuto.

"En el 77 decían que el PNV era un partido burgués y viejuno. Y ganó a la izquierda revolucionaria sexy. Me recuerda mucho a hoy"

P. ¿Tiene en mente una fecha para convocar la consulta o referéndum del nuevo estatuto?

R. Primero se debe cumplir íntegro el Estatuto de Guernica y está tasado. Son dos años desde que en noviembre de 2023 acordamos la investidura de Sánchez. A partir de ahí, hemos acordado con el PSOE la hoja de ruta y deberíamos llegar a un acuerdo, al menos con ellos, en un año y medio, para buscar un acuerdo con el resto de las fuerzas políticas vascas. Hay que ir más allá del consenso estatutario de Guernica del 79, es decir, intentando incorporar a quienes se quedaron fuera, que fueron Herri Batasuna y Alianza Popular fundamentalmente. Cuando tengamos un acuerdo en Euskadi tenemos que buscar el acuerdo en el Congreso de los Diputados. Porque luego esto exige un refrendo por parte del Congreso de los Diputados, el nuevo estatuto tiene que aprobarse también en Madrid. Y después, hechas esas dos cuestiones, acuerdo político en Euskadi y acuerdo político y votación en el Congreso en Madrid, volver a Euskadi para ir a una consulta a un refrendo popular. Acuerdo en Euskadi. Acuerdo con Madrid. Vuelta a Euskadi para el referéndum popular.

P. No me da una fecha.

R. Ojalá.

P. ¿El PNV es un partido de izquierdas o de derechas?

R. El PNV es un partido que siempre ha puesto en el centro a la persona y que eso le ha permitido desarrollar políticas que han sido de vanguardia en el ámbito de la protección social. Fuimos el partido que puso en marcha la llamada RGI (renta de garantía de ingresos) por primera vez en el Estado, la primera comunidad autónoma que lo puso en marcha y lo puso el PNV con un consejero del PNV. Hemos tenido siempre clara que una sociedad avanza en la medida que hay creación de riqueza y redistribución de la misma y por lo tanto, para nosotros todo es uno. Son las dos caras de la misma moneda. Y eso implica que hay que apoyar a quien crea riqueza. Porque desde la generación de riqueza podemos hacer políticas de redistribución y de cohesión social. Y esa ha sido la máxima del PNV, en la que yo, además, me siento muy cómodo. Fíjate que soy hijo de una familia trabajadora en un barrio obrero, de una zona obrera y soy el candidato del PNV.

P. Ustedes echaron a Rajoy del Gobierno por la Gürtel. ¿Por qué son tan tibios con los casos de corrupción que rodean al PSOE de Sánchez?

R. Con la corrupción, tolerancia cero, depuración de responsabilidades y exigencia ética y política máxima. Pero no es lo mismo una condena por corrupción a un partido político, que lo que está saliendo, que no sabemos hasta dónde puede llegar, del caso Koldo. El Partido Socialista lo que tiene que hacer es eso, tolerancia cero, depuración de responsabilidades políticas, si las hubiera, y ser exigente al máximo en términos éticos y políticos. Vamos a ver lo que da de sí ese caso. Pero no se ha condenado, no se ha juzgado ni se ha condenado a un partido político, que fue el caso de la Gürtel con el PP.

"El PNV, más allá de Sabino Arana, es integrador"

P. Escriba su propia carta de presentación. ¿Quién es Imanol Pradales?

R. Bueno, pues es una persona de 48 años (cumplirá 49 el domingo electoral 21 de abril) que nace en Santurtzi (Santurce, Vizcaya), en la margen izquierda muy gris por la crisis industrial de los ochenta. En una familia humilde de clase trabajadora. Soy el mayor de cuatro hermanos. Mi ama (madre) trabajaba en casa. Mi aita (padre) perdió el empleo. Tenía un pequeño taller y con toda la crisis industrial energética se fue por la borda y durante unos años las pasan en casa canutas. Se concatenan varias crisis económicas, las tasas de desempleo se elevaron al veintitantos por cien. Ahí entra el problema de la droga, de la heroína en la juventud. Esa es mi infancia en un lugar duro. Pero yo tuve la fortuna de salir adelante, estudié Ciencias Políticas y Sociología en la Universidad de Deusto. Hice una tesis doctoral, conseguí una beca y acabé trabajando en la Universidad de Deusto como profesor.

P. ¿Y cuándo se afilia al PNV?

R. Mis padres se afilian en 1976 al PNV y participan en los movimientos de clandestinidad siendo unos chavales de veintitantos años. Pero yo me afilio con 30 años, en 2005, el día siguiente de tener un contrato estable en la Universidad de Deusto y siendo ya doctor.

P. En la efervescencia del Plan Ibarretxe y la consulta... Ha cambiado mucho el PNV desde entonces y la sociedad vasca también. Ya no hay pulsión soberanista.

R. Yo era simpatizante y votante del PNV. Lo que pasa es que me quería afiliar cuando de alguna forma yo tuviera ya una situación estable desde el punto de vista profesional.

¿Independencia? "El PNV tiene paciencia histórica para ir avanzando en clave de autogobierno y es en lo que estamos"

P. Nieto de burgaleses, de ocho apellidos castellanos, pero convencido abertzale o nacionalista euskaldún. ¿Cómo se explica eso en la España profunda de la que procede su familia?

R. Es un proceso bastante natural. Mis padres son nacidos en Euskadi, y se afilian al PNV en pleno franquismo convencidos de que el nacionalismo vasco que escuchaban en aquellos momentos era la mejor respuesta para construir país. Y además era un nacionalismo integrador. Y fuimos a una ikastola porque ni mi madre ni mi padre sabían euskera, pero querían que sus hijos lo hablaran. Quizás en la España profunda es complicado de que se pueda entender, pero yo creo que el nacionalismo vasco ha tenido una gran capacidad de integrar al diferente, independientemente de cuál fuera su origen. A veces se hacen mitologías del nacionalismo inicial de Sabino Arana y no sé qué cosas pero, claro, Sabino Arana es de finales del siglo XIX. Pertenecía a otra época. Yo creo que el nacionalismo vasco tiene una gran evolución con Aguirre (José Antonio Aguirre, primer lehendakari en 1937) ...

placeholder Foto: J. G. O.
Foto: J. G. O.

P. Perdone que le corte, pero volviendo al presente, ¿cómo defiende ante sus primos y sus tíos de Burgos la independencia del País Vasco?

R. A ver, yo tengo una ideología, la del Partido Nacionalista Vasco. Y la comparto plenamente. Euskadi es la patria de los vascos. Es el lema fundamental del PNV. Por lo tanto, eso es así. Lo que ocurre es que el PNV nace en 1895. Obviamente esto es un proceso en el que tenemos paciencia histórica para ir avanzando en clave de autogobierno y es en lo que estamos. El PNV sí tomó una decisión estratégica en 1977 que tuvo mucha relevancia política, que no es la que tomó Herri Batasuna, que fue recuperar la vía estatutaria de Aguirre en la segunda República española y no decide convertirse en un partido antisistema ni de rupturas, sino de construir país. Poco a poco, día a día, vía autogobierno.

P. Hasta ahora se acusaba al PNV de etnicismo porque había un dominio absoluto de los apellidos vascos de sus líderes. Su elección rompe esa cultura de linajes. ¿Alguna broma le habrán hecho en los batzokis sobre sus apellidos? "Un tal Blázquez", decía Arzalluz del obispo de Bilbao.

R. No (sonríe). Un Imanol Pradales en Santurtzi es como un Josu Aguirre en Ataun, es una cosa muy normal. Lo que sí tenemos es que estar atentos a la nueva Euskadi que se que se va a construir con los nuevos vascos y las nuevas vascas que están llegando de otros países, de otros continentes, de América Latina, de África. Tenemos un gran reto de integración. Porque ahí el choque cultural es todavía más relevante que el que se pudo producir con las dos oleadas de la industrialización vasca que trajeron a mucha gente de otras partes del Estado. Ahí hay un choque incluso lingüístico.

"Tenemos un problema de falta de profesionales de todo tipo, pero el euskera no es una barrera para la atracción de talento"

P. Le iba a preguntar por el euskera, el muro invisible. ¿Las exigencias lingüísticas en la escuela, en la administración, no son una barrera para la atracción de profesionales, de talento y de inversiones en una sociedad menguante en la demografía y en su desarrollo económico?

R. El euskera no es una barrera para la atracción de talento. Llevo en esto muchos años y me tocó poner en marcha Bizkaia Talent, una iniciativa de atracción y retención de talento que promovió la Diputación con las universidades vascas y con un conjunto de empresas vascas que sigue existiendo. Me ha tocado a mí atraer a investigadores a profesionales de todas las partes del mundo. Y nunca estaba el problema del idioma.

P. Se lo pregunto de otra manera. Euskadi, como todas las CCAA, tiene un problema de falta de médicos y compite por que vengan.

R. Tenemos un problema de falta de profesionales de todo tipo. En estos momentos la capacidad que tenemos de creación de empleo en este país se está enfrentando a un problema de atracción de profesionales, cualificados y poco cualificados. O sea, nos faltan camareros, nos faltan encofradores, nos faltan ceramistas. En el mundo de la construcción nos faltan ingenieros especializados en el ámbito industrial, en el ámbito aeronáutico...

P. Pero usted mantiene que el euskera no es un freno. Que un médico o enfermero que sale de la facultad de Madrid o Valencia no siente el inconveniente del euskera para asentarse aquí.

R. Siempre intentamos mezclar cosas que creo que son ideológicas, pero que no obedecen a la realidad. Te voy a poner el contraejemplo: cuando en Londres hubo una famosa llamada porque hacían falta enfermeras, ¿el no conocimiento de inglés era una barrera de entrada? No, ¿verdad? Porque se entendía que esas personas luego irían aprendiendo la lengua. Pues aquí es lo mismo, no es ninguna barrera de entrada, porque luego hay mecanismos para que las personas que vienen de otras partes del mundo se puedan ir euskaldunizando poco a poco. En Osakidetza hoy en día ya trabajan médicos de otros continentes. Lo que tengo claro es que en la administración pública vasca a cualquier persona de este país se le tiene que atender en cualesquiera de las dos lenguas oficiales que existen en Euskadi.

P. Por curiosidad, ¿no es un poco raro que el lema electoral del PNV sea "Indar Berria", o sea, "Fuerza Nueva"?

R. (Sonríe) Es el lema de precampaña y se puede traducir por "Fuerza Renovada"... Lo que queríamos visibilizar es que somos la nueva generación con nuevas fuerzas renovadas.

Imanol Pradales Gil (Santurce, Vizcaya. 1978) aspira a convertirse en el primer lehendakari del PNV con ocho apellidos castellanos. Descendiente de la emigración burgalesa, convencido nacionalista y euskaldún, representa una revolución para el partido de Sabino Arana, que ve amenazado por primera vez su liderazgo político en el País Vasco. Las encuestas otorgan a Bildu una ventaja de partida, con un voto directo fidelísimo, frente a un PNV a la baja y sin signos, de momento, de remontada. Para movilizar el voto de afines y ajenos, Pradales avisa del riesgo de que Bildu imponga su "agenda oculta" si gobierna —"su cultura política y democrática me preocupa: es control, intervención, imposicion—. Y alimenta la idea de que puede haber a última hora un giro del timón del PSE en la política de pactos: "Sánchez cambia de opinión constantemente". Si es lehendakari, trabajará para conseguir del Gobierno central mayores cotas de soberanía: "El PNV tiene paciencia histórica, ahora estamos en clave de autogobierno".

PNV Elecciones País Vasco
El redactor recomienda