"Llevamos así 11 años": el culebrón sin fin para proteger la antigua presa que quería unir Madrid con el mar

"Es el sitio ideal para ir con niños y perros", dicen los usuarios en la red sobre la famosa y monumental presa del Gasco, una construcción inacabada del siglo XVIII entre Torrelodones, Las Rozas y Galapagar, ahora rodeada de naturaleza y frondosa vegetación. No obstante, de tanto en cuanto se produce algún que otro altercado al que tienen que acudir Protección Civil incluso con un helicóptero. "¡No hay ni una sola valla!", señala Guillermo Martín, diputado del PSOE en la Asamblea de Madrid. Diferentes grupos políticos llevan años preguntándose por qué el proceso para proteger este lugar emblemático está siendo tan largo y engorroso. "Llevamos así 11 años", explica Martín.

La realidad es que este espacio, que antaño se pronosticó como una posible vía de comunicación entre Madrid y el Atlántico, –se fantaseaba con que el río Guadarrama fuese navegable hasta Sevilla, desde donde el Guadalquivir desembocaría en el océano–, es ahora el refugio de madrileños en busca de algo de monte. Poco queda ya del proyecto inicial de aquel ingeniero militar de origen francés, Carlos Lemaur, quien arrancó la construcción a finales del siglo XVIII. Hoy día perduran las ruinas de la infraestructura, con una longitud de 251 metros y anchura de 72. El problema es que lleva más de una década intentando proclamarse Bien de Interés Cultural (BIC), lo que implicaría aumentar la seguridad e información al respecto en las inmediaciones. Cuando en septiembre de 2021 la Comunidad consiguió dar el visto bueno a esta protección, parecía que por fin se cerraría el ciclo. Pero este verano surgió nuevo inconveniente.

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El pasado mes de julio, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid falló a favor de una empresa que recurría a las intenciones del Ejecutivo autonómico. El tribunal concluyó que el expediente redactado por la Comunidad –donde declaró oficialmente BIC a la presa- estaba caducado. Era la segunda vez que se intentaba proteger este monumento.

"Debemos estimar y estimamos el recurso contencioso-administrativo [...], contra el Decreto 206/2021, de 1 de septiembre, del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, por el que se declara bien de interés cultural de la CAM, en la categoría de paisaje cultural, la Presa del Gasco y el Canal de Guadarrama en los municipios de Galapagar, Torrelodones y Las Rozas de Madrid (Madrid); declarando la caducidad del expediente de declaración de bien de interés cultural", versa el fallo.

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Pero hay otros procesos abiertos. De hecho, y a la espera de un juicio, otra familia propietaria de dos parcelas también presentó un recurso contra la puesta en marcha de la protección. Según el testimonio de su letrado, los dueños consideran que en sus propiedades no hay nada que deba ser protegido. Las demandas de los propietarios son la principal piedra que limita los trámites hace más de una década. Por ello, el primero intento de protección de la administración no llegó a nada, el segundo está pendiente de una sentencia... y de tumbarse, se tendría que empezar un tercero.

Desde la Comunidad de Madrid presentaron recurso de casación y están a la espera de que una sentencia firme. El Ejecutivo asegura que el espacio continúa siendo Bien de Interés Cultural y pelearán para que así se siga manteniendo. Básicamente, los propietarios de los terrenos alegaron que la administración no les había comunicado a tiempo su intención de proteger el espacio, algo que desde la consejería de Cultura niegan tajantemente y defienden que esa información se compartió "en tiempo y forma".

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Lo que temen el resto de grupos parlamentarios, como PSOE y Más Madrid, es que con la decisión del tribunal pendiente, se tenga que empezar el proceso desde el principio. Otra vez. La Asamblea aprobó a principios de este mes una PNL presentada por el Partido Socialista para asegurar su protección. Y desde Más Madrid preguntaron directamente al consejero en la última comisión de Cultura. La diputada Alicia Torija teme que el expediente no se va a resolver a favor de la administración y denuncia que el equipo de Gobierno no ha hecho el procedimiento acorde a los tiempos.

Pero la Comunidad de Madrid tiene un as bajo la manga. En caso de que se denegara el último recurso presentado por la administración, y según la directriz de Patrimonio, habría que esperar dos años para iniciar de nuevo el trámite. No obstante, se puede hacer una excepción a esta norma pidiendo una autorización al Consejo Regional, que se estima que daría el visto bueno. Si finalmente se cumple esta hipótesis, sería la tercera vez que la Comunidad de Madrid intenta dar luz verde a la protección de la presa del Gasco.

La construcción de esta edificación, ahora en ruinas, fue considerada uno de los proyectos de ingeniería más relevantes del siglo de la Ilustración de Madrid. El levantamiento comenzó con el reinado de Carlos III para tratar de conectar las aguas fluviales de la capital con Sevilla, siguiendo el canal de Guadalquivir y llegando a Sanlúcar de Barrameda. Una puerta hasta el Atlántico que no salió según lo esperado: las obras se quedaron a medias, igual que su protección.