¿Qué hacer en Fin de Año en Madrid? Planes para el primer fin de semana de 2022

La Comunidad de Madrid es de las pocas autonomías que, pese a la elevada incidencia acumulada, no ha impuesto ninguna restricción especial de cara a las fiestas navideñas. Aunque la presidenta Isabel Díaz Ayuso sí ha confirmado que, finalmente quedan prohibidas las macrofiestas, puesto que ninguna de ellas cumplía con un plan de contingencia contra el coronavirus. Sin embargo, la líder regional se muestra como una firme defensora de la tradición de las uvas frente a la Puerta del Sol, alegando que esta celebración es diferente porque es al aire libre. Lo que significa que este año se recuperan las uvas y las preuvas en este espacio, aunque con medidas.

La prohibición a estas fiestas por parte del Ejecutivo ha provocado que muchos madrileños y madrileñas se queden sin planes en Nochevieja o tengas cierto miedo de cara a esta noche. Por ello, desde El Confidencial proponemos una serie de actividades alternativas para poder despedir el año de forma segura o comenzar el 2022 de una manera diferente, como los dos últimos años que ya dejamos atrás.

Karaoke privado para los vergonzosos

Si hay algo que impida que los karaokes se llenen de gente es la vergüenza, ese miedo a hacer el ridículo delante de la gente. Al menos así era hasta la llegada de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, que hizo que el temor al contagio pesara más que la preocupación por cantar mal. Pero si por algo se ha caracterizado el sector del ocio, además de por ser de los más castigados por la pandemia, es por saber adaptarse a la 'nueva normalidad'. En este grupo se encuentra Bam Karaoke (Recoletos, 23), una sala especialmente dedicada para los vergonzosos o temerosos a los espacios cerrados con desconocidos.

Se trata de un nuevo concepto de karaoke en el que, al fin, el escenario no será compartido por cientos de ojos que miran intrigados a quien se sube al escenario. En este espacio son los clientes quienes deciden cuántas personas van a ser, puesto que disponen de salas privadas para grupos de cuatro, seis, ocho, diez y doce personas. Además, cada una de estas 'boxes' cuenta con una cámara con la que poder grabar esos divertidos momentos cantando y hacer fotos.

No solo eso, sino que también se pueden realizar pedidos a través de una pantalla desde la sala sin tener que salir de la misma, ya sea para refrescarse con una bebida o para saciarse con alguna tapa. No creas que hablamos solo de refrescos o cervezas, sino que cuenta con toda una selecta carta de cócteles de autor que también se sirven en una barra, fuera de las salas. Bam Karaoke abre de miércoles a viernes, de 18:00 a 3:00 horas, y sábados, de 15:00 a 3:00 horas. El precio varía dependiendo del 'box' seleccionado, pero parten de 6 euros por persona a la hora.

Uvas (o preuvas) en Puerta del Sol con medidas

Para los ansiosos, o los que prefieran alejarse un poco de una aglomeración aún mayor, existe la tradición de asistir a las preuvas en la histórica Puerta del Sol. Aunque era una noticia que venía coleando desde el mes pasado, finalmente el Gobierno regional ha decidido mantener esta tradición con las mínimas medidas de protección. Según la Consejería de Salud, la probabilidad de transmisión del coronavirus “queda francamente reducida” si se respetan el uso obligatorio de mascarilla, la distancia de seguridad (entre grupos no convivientes) y, lo más importante, no superar el aforo máximo permitido. Este año, el número de asistentes se ha reducido en un 60% con respecto a las últimas uvas celebradas en 2019, por lo que este jueves (30 de diciembre) y el viernes (31 de diciembre), el límite del público está en las 7.000 personas.

El único momento en el que los asistentes podrán retirarse la mascarilla, según ha indicado la consejera Elena Andradas, es cuando estén tomando las uvas. Asimismo, ha recordado que la gente tendrá que agruparse en núcleos de convivencia, al tiempo que ha resaltado que se va a reforzar la vigilancia del cumplimiento del protocolo vigente, con agentes de la Policía y el uso de drones.

Para poder asistir a ambos eventos, antes hay que pasar por cuatro filtros de control, tal y como ha informado el Ayuntamiento de Madrid. Estos cuatro bloques estarán distribuidos en los diferentes puntos de la plaza, controlados por la Policía Nacional y la Municipal. También habrá una contabilización por parte de Protección Civil y unos carteles que se colocarán cuando la Puerta del Sol haya alcanzado los 7.000 ocupantes. La delegada de Portavoz, Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, ha asegurado que se cortará el acceso a las estaciones de metro a partir de las 21:00 horas en ambos días.

El atracón típico en Año Nuevo

Para quienes hayan decidido no celebrar la noche de fin de año pero sí dar la bienvenida al nuevo año, no hay mejor opción que empezar por los tradicionales churros con chocolate de San Ginés (Pasadizo San Ginés, 5). Eso sí, hay que acudir desde primera hora de la mañana del 1 de enero. Su local es tan conocido que las colas de gente a la entrada ya se han vuelto más que habituales, especialmente en estas fechas. Es por ello que la chocolatería más famosa de la capital no admite reservas entre el 15 de noviembre y el 10 de enero; el resto de días, recomiendan llamar para preguntar si hay sitios. San Ginés está abierto todos los días de la semana desde las 8:00 hasta las 23:30 horas, aunque aclaran que no reciben más clientes a partir de las 23:00.

Pero, ¿qué pasa si hay mucha gente o la pereza (y la resaca) vencen a las ganas de salir a la calle? Ellos ya han pensado en eso y, por ello, se han adaptado a la nueva situación. De tal forma que, accediendo a su 'tienda online' se pueden seleccionar los productos más típicos de San Ginés: lenguas de gato, bolsas y tabletas de chocolate, 'orangettes' o turrón.

Nueva tradición navideña: el 'mulled wine'

Si eres un amante del buen vino pero no de tomar bebidas con hielo en pleno invierno y enfrentarse al frío de la calle o si eres más de tomarte tu infusión mientras ves Netflix al calor de la manta, existe una opción intermedia. Hablamos del 'mulled wine', una bebida a base de vino, naranja, azúcar y especias que forma parte de la tradición inglesa, especialmente por los meses de noviembre y diciembre, pero también se sirve en países como Noruega, Dinamarca o Alemania. Y ahora también en Madrid.

Esta costumbre podría convertirse en tradición para todas las navidades con iniciativas como la de Casa Suecia (C. del Marqués de Casa Riera, 4; Metro Sevilla o Banco de España), donde hasta el 10 de enero su Roof Top ofrece el 'mulled wine' con la receta especial del 'bartender' Pablo Orellanos y disfrutando de una de las mejores vistas de la ciudad. El precio para degustar este vino caliente (o vino especiado) es de 6 euros y si se quiere acompañar de un surtido de dulces o quesos y frutos secos, está por 12 euros.

No es el único local de Madrid que da a probar esta tradición. Ubicado en plena Plaza de España, perfecto para poder observar el resultado de las obras de este emblemático lugar, se encuentra Cambridge Soho Club (Plaza de España, 2; Planta 2ª), una de las opciones más populares para cenar, tomar algo o asistir al concierto de un grupo en directo. Ahora también aparece en su carta el vino caliente, una oferta por 4 euros que asciende a 10 euros en caso de querer probar esta singular bebida con unas tapas.

El legado de Kubrick

Los fanáticos de Stanley Kubrick verán en esta exposición su sueño cumplido. El Círculo de Bellas Artes (Calle Alcalá, 42) alberga entre sus paredes 'Stanley Kubrick. The Exhibition', un espacio de aproximadamente una hora de duración que hace un recorrido por la vida artística de este genio cineasta. La exposición muestra 600 obras del artista; hablamos de guiones, 'atrezzo' usado en las películas, fotos, maquetas, cartas e incluso parte del vestuario. Entre ellos, destaca el traje de los protagonistas de 'La Naranja mecánica' o la icónica mesa del Korova Milk Bar; así como los vestidos de las inquietantes gemelas de 'El resplandor' o poder disfrutar de la secuencia censurada de las ostras y caracoles de 'Espartaco'.

Además, los visitantes podrán descubrir algunos trabajos de Kubrick que nunca vieron la luz o de una recreación de algunas escenas de sus filmes más famosos, creando una experiencia inmersiva. El horario de la exposición es de martes a domingo de 10:00 a 21:00 horas y su precio parte de los 14 euros para la entrada general y de 6 euros para los menores de entre 3 y 12 años de edad.