Atienden en Barajas a varios pasajeros de un avión que sufrió una caída de 100 metros
La aeronave perdió altura tras atravesar una turbulencia de 15 segundos que provocó contusiones en el cuello y en la espalda a 11 pasajeros y tres tripulantes de cabina
Un total de 16 personas fueron atendidas este martes en el aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez, de las cuales 14 fueron trasladadas a hospitales de la zona tras sufrir contusiones y leves traumatismos —principalmente, en el cuello y la espalda— a raíz de que un avión procedente de Port Louis (Isla Mauricio) perdiera altura repentinamente durante un tramo de turbulencias de aproximadamente 15 segundos. En el momento del incidente, los pasajeros no tenían abrochados los cinturones de seguridad, pese a que "el protocolo que se activa en estos casos (luces de cinturones encendidas y aviso por megafonía del piloto) estaba en marcha", de acuerdo a la versión de la aerolínea española Evelop.
La aeronave, un Airbus A330-343, cayó 100 metros al atravesar "una turbulencia severa de aire claro" cuando rondaba las cinco horas de viaje, provocando que varios pasajeros sufrieran golpes en la cabeza y las extremidades, pero "en ningún momento dicha turbulencia puso en peligro la seguridad del avión", según la compañía. El comandante del vuelo EVE838 comunicó a los servicios de control aéreo la necesidad de tener prevenidos a los servicios de atención médica antes de su aterrizaje y tomó tierra en torno a las 19:15 en una posición en remoto para "facilitar las tareas de atención y no interferir en el operativo normal" de la terminal T4, tal y como ha explicado Aena.
Barajas activó su protocolo de emergencia para atender a los heridos, entre los cuales se incluían tres tripulantes de cabina, y alertó al Samur-Protección Civil sobre las 20:30. Después de ese momento, el servicio madrileño de urgencias trasladó a los pacientes heridos a los centros hospitalarios de Zarzuela, Ramón y Cajal, Gregorio Marañón y Campo de las Naciones, al comprobar que presentaban "contusiones y golpes" pero no "cortes", apunta un portavoz a este periódico, matizando que, en cualquier caso, el diagnóstico definitivo depende de la observación desempeñada por el personal clínico encargado de darles el relevo.
"Desde la compañía Evelop, lamentamos profundamente los daños personales causados a todas las personas que hayan resultado afectadas", ha manifestado a través de un comunicado la empresa, que insiste en que se trata de "un caso aislado producido por una inclemencia meteorológica" y aclara que todos los hospitalizados "fueron dados de alta el mismo día". "Tanto el resto del vuelo como el aterrizaje se desarrollaron con absoluta normalidad", zanja.
Un total de 16 personas fueron atendidas este martes en el aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez, de las cuales 14 fueron trasladadas a hospitales de la zona tras sufrir contusiones y leves traumatismos —principalmente, en el cuello y la espalda— a raíz de que un avión procedente de Port Louis (Isla Mauricio) perdiera altura repentinamente durante un tramo de turbulencias de aproximadamente 15 segundos. En el momento del incidente, los pasajeros no tenían abrochados los cinturones de seguridad, pese a que "el protocolo que se activa en estos casos (luces de cinturones encendidas y aviso por megafonía del piloto) estaba en marcha", de acuerdo a la versión de la aerolínea española Evelop.