El concejal de Carmena que insultó a policías insiste en llamarles “fascistas”

El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, ha insistido esta mañana en llamar “fascistas” a “algunos” de los policías que le abordaron en grupo el pasado 16 de febrero para protestar contra sus últimas decisiones políticas, según han informado fuentes jurídicas de la acusación presentes en la vista. En declaraciones ante el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, el edil ha reiterado lo que dijo poco después del altercado, aunque ha explicado que no se refiere a todo el cuerpo, sino a algunos de los que participaron en el escrache. "Hubo comportamientos fascistas por parte de los convocantes que le recordaban a maniobras fascistas", han dicho las mismas fuentes.

El juez, Adolfo Carretero Sánchez, por su parte, le ha dado la oportunidad a Barbero de retractarse de sus palabras y pedir perdón a las personas aludidas, gesto que -según el magistrado- permitiría que finalizara la instrucción y se archivara el caso. En el supuesto de que el concejal decidiera no hacerlo, la causa continuaría y el edil iría previsiblemente a juicio.

Durante la vista celebrada hoy, el concejal ha optado por insistir en sus declaraciones, que han tenido lugar después de que el sindicato Colectivo Profesional de Policía Municipal (CPPM) interpusiera una denuncia, primero, y una querella, después.

A la salida de su comparecencia, sin embargo, Barbero ha negado que hiciera calificaciones o descalificaciones contra los policías. "Me he limitado a describir una situación", ha indicado el concejal, que ha añadido que en el altercado, que se produjo en la plaza de la Villa, hubo insultos e incluso una agresión. "Yo nunca he hablado de personas concretas", ha puntualizado el edil, que ha asegurado haberse enterado esta mañana de la nueva querella que ha puesto contra él el sindicato CPPM.

El concejal se ha presentado en el juzgado amparado por el director general de la Policía Municipal, Andrés Serrano, que ha acompañado al edil muy de cerca desde la entrada hasta la salida. Por parte del sindicato, sin embargo, únicamente ha acudido el abogado. La cúpula de CPPM ha preferido mantenerse al margen por respeto a la autoridad judicial, según fuentes de la organización.

Barbero, que ha evitado nombrar la palabra 'fascista' ante los medios, también ha anunciado su intención de solicitar el archivo de la causa y ha subrayado que él tiene "muy buena relación" con el cuerpo de Policía Municipal, que las diferencias surgieron con un "grupo muy pequeño" que tuvo "determinados comportamientos".

El juez investiga un posible delito de injurias graves a las fuerzas de seguridad por parte del concejal por llamar fascistas a los policías durante los mencionados hechos del 16 de febrero, que obligaron a Barbero a refugiarse en una cafetería ante el supuesto acoso que estaba sufriendo por parte de los funcionarios.

En rueda de prensa posterior a los altercados, el edil ya pronunció unas palabras similares a las que ha dicho hoy a la salida del juzgado y en la propia sala. "A mí a lo que más se me asociaba, básicamente, es a esos grupos de fascistas que hemos visto en algunas ocasiones, pero insisto que es un grupo pequeño el que ha hecho ese tipo de expresiones tan deleznables, a mi entender", declaró entonces el delegado del Gobierno municipal.