¿El Grand Prix de la mejor Semana Santa de España? Ferrol y Sevilla polemizan por el primer puesto

Esta vez ha sido un artículo de National Geographic el que ha abierto la espita con un ranking sobre cuál es la mejor Semana Santa de España. La revista situaba las procesiones de Ferrol (A Coruña) como "las más espectaculares de España" por delante de Sevilla, Zamora, Tarragona, Granada, Balmaseda (Euskadi), Málaga, San Cristóbal de la Laguna, Valladolid, Calanda (Teruel) y Cuenca. Como en toda clasificación subjetiva, el podio rasgó vestiduras a pocos días de que empiecen a retumbar tambores y desfilar los pasos, palios o tronos, capuchones o capirotes y a entonarse o cantarse las saetas al paso de nazarenos y cofrades. Cada una tiene su argot.

El artículo se publicó a finales de febrero, pero la polémica entre cofrades coleó esta semana con batalla entre cabeceras de medios locales —Diario de Sevilla y Diario de Ferrol— y sus derivadas y respectivas aficiones en redes sociales calentando motores entre el pregón oficial y el Domingo de Ramos. "En Ferrol, la hermandad de Agua será la mejor", ironizaba uno, mientras que otros sevillanos aprovechaban la coyuntura para pedir que a Sevilla no vaya nadie más. "No cabemos, qué jartura de guiris!", lamentaban. Los precios de los balcones y palcos en la capital hispalense ya son un negocio a precio de escándalo y las propias cofradías advierten contra la reventa de sillas y de acuerdo a Booking —conocido portal de reservas en Internet— el 91% de las plazas hoteleras del centro de Sevilla ya están ocupadas del Jueves Santo al Domingo por encima de los 150 euros noche en los establecimientos más sencillos frente a costes más moderado en la ciudad coruñesa.

La Junta de Cofradías de Ferrol lanzaba la noche del sábado su pregón en el Teatro Jofre, a cargo de la periodista Marta Corral. Tanto el regidor ferrolano, José Manuel Rey Varela, como la vicepresidenta de la Xunta, Ángeles Vázquez, sacaban pecho de una fiesta que atrae a miles de personas a Galicia en estas fechas frente a una Sevilla en la que usualmente coge ni un alfiler más. Es "la mejor Semana Santa del planeta", proclamaron emulando al alcalde de Vigo, Abel Caballero y sus archifamosas luces de Navidad.

El Consejo General de Hernández y Cofradías de la Ciudad de Sevilla descubría su pregón este domingo 17 por boca de Juan Miguel Vega desde el Teatro de la Maestranza y se preparan para arrancar este Viernes de Dolores con los primeros pasos procesionales desde Pino Montano. "Es una intensidad, tanto estética como espiritual, única en su estilo; religiosa y artística, seria y jubilosa", sostiene la Junta andaluza.

Es la cuenta atrás por la que Sevilla y Ferrol esperan y trabajan todo el año. Ambas son Fiesta de Interés Turístico Internacional y epicentro de la religiosidad en sus respectivas comunidades, que Sevilla comparte con Málaga y Granada y Ferrol con Viveiro (Lugo).

Entre algunos sevillanos no ha caído bien ver relegada su Semana Santa y su intensa Madrugá al segundo puesto mientras que los ferrolanos reivindican algo que entienden que les corresponde por derecho ya que hunde sus raíces en 1616. "La de Ferrol es una de las más bellas y longevas de España", destaca National Geographic, que lejos de hacer dividir destaca lo mejor de cada una. En Sevilla, se aproxima "la semana más larga e intensa del año", describe, con especial atención al paso del Jesús del Gran Poder, la Esperanza de Triana, la Macarena o el Cristo de los Gitanos.

Hay diferencias en números y dimensiones. La Semana Santa ferrolana dura ocho días con cinco cofradías, 25 procesiones y 3.000 penitentes

En realidad, Sevilla y Ferrol son dos modelos diferentes de un mismo tronco común —procesión litúrgica— que son reflejo de la historia, el carácter, e incluso de la climatología de dos ciudades que distan mil kilómetros y muchos vecinos: Ferrol, —66.799 habitantes— y Sevilla, con diez veces más población (688.711).

La gran primera diferencia está en los números y en las dimensiones. La Semana Santa ferrolana dura ocho días (del 24 al 31 de marzo) con cinco cofradías, 25 procesiones, 3.000 penitentes y especial devoción por el Cristo de los Navegantes —en un puerto de mar y base de la Armada—, la Virgen de Dolores, la Amargura o la Esperanza, con un tercio verde y exclusivamente femenino.

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Carlos Rocha. Sevilla

La de Sevilla es más larga (9), dura dos días más al sumar el Viernes de Dolores (22 de marzo) y el Sábado de Pasión (23) con más 70 hermandades y 76 procesiones. Casi 4 millones de personas se dejaron caer por la capital hispalense en la Pascua del 2019, el año más concurrido antes del frenazo de la pandemia. Las hermandades sevillanas sacaron a la calle en 2023 a más de 57.000 nazarenos que van por barrios donde ser costalero es un privilegio todavía —e inexplicablemente— reservado a los hombres. Tan solo la Hermandad de La Macarena ya tiene más cofrades que todo Ferrol junto.

Lo que ninguna de las dos ciudades discute es el retorno económico de su Semana más intensa. La Asociación de Hosteleros de Sevilla estimaba unos 400 millones de euros hace dos años, frente a los 4 millones que calcularon en Ferrol.

"Es absurdo comparar. Tienen dimensiones diferentes y formas de vivirla también diferentes", explica María Luisa, sevillana de La Macarena afincada en Ferrol. "En la capital, quedamos para verla en un punto concreto. Es un acto social, pero en cuanto asoma el paso, hay un respeto máximo, seas creyente o no. En Ferrol se vive de otro modo, también hermoso y solemne".

Sevilla: otro año sin costaleras

Si hay una diferencia palmaria entre las Semanas Santas de Sevilla y Ferrol —además de las dimensiones— es el rol femenino. Sevilla no es la única ciudad que llora cuando la lluvia aparca a la Virgen. Las portadoras ferrolanas también derraman lágrimas de tristeza y frustrado fervor. Es el Tercio de la Esperanza de la Cofradía de Dolores "que en 1984 inició la integración de la mujer como cofrade de pleno o derecho". La noche del martes 26 es su procesión y su día grande.

Rompieron un techo de cristal y fueron pioneras, en 1986, al lograr ser las primeras mujeres cofrades en cargar a hombros un trono de 2.300 kilos repartidos entre 73 y 75 hombros. En el Norte no hay igualá como en Sevilla —la medición de alturas para organizar costaleros bajo la trabajaderas como en el Sur— y las más altas caminan delante como un batallón entrenado para caminar al unísono y bailar los tronos a una sola mano. Entre las portadoras ferrolanas hay madres e hijas, pies descalzos y el rostro cubierto bajo un capuz para una penitencia anónima.

En Sevilla, las mujeres aún pelean por la oportunidad de ser costaleras. Lo han conseguido en otras provincias y localidades andaluzas, pero todavía no procesionan bajo las trabajaderas de los pasos en la capital, donde la Semana Santa es un fenómeno sociocultural que va mucho más allá de la religión y la espiritualidad. Legalmente, no es posible el veto femenino, pero en la práctica se traduce en "no hay vacantes". Este 2024, y van varios siglos, no habrá mujeres entre las 120 cuadrillas que llegarán a la Catedral sevillana.