Gómez Reino, el íntimo amigo de Yolanda Díaz y Pablo Iglesias que renuncia a ir en listas de Sumar

Antón Gómez-Reino Varela da “un paso al lado” pero seguirá ‘sumando’ desde la base. Así lo anunció a través de un extenso comunicado en sus redes con el que el diputado morado quiere ahorrar nuevas polémicas y pone fin a un ciclo de 8 años en la primera línea del Congreso para trabajar “desde la calle” enfocado a tareas europeas e internacionales. Sin destino fijo, pero sin cerrar las puertas a Europa y con la voluntad, expone, de dedicar más tiempo a sus dos hijas.

No habrá, pues, disputas por encabezar la lista de Sumar por A Coruña y cede el primer puesto -más que probablemente- a Marta Lois (Vigo, 1969), doctora en Ciencias Políticas, amiga y colaboradora a la que Yolanda Díaz acaba de aupar como presidenta de su nuevo movimiento político. El todavía diputado de Podemos manifestó en sus redes que participará activamente de la campaña gallega de Sumar para “hacer a Yolanda Díaz presidenta”. Al tiempo, reivindica la esencia de la creación de Podemos como ‘la fuerza que irrumpió y lo cambió todo’ y los avances sociales logrados desde el Gobierno de coalición.

Detrás de Antón Gómez-Reino Varela (A Coruña, 1980) hay un extenso bagaje político, una vocación de confluencia y una red de lazos personales y contactos que no siempre trascendió a la Corte madrileña, pero siempre estuvo en la cocina de los proyectos rupturistas, -tuvo su parte en la creación de Podemos-, que descarrilaron el bipartidismo en los últimos años y obligaron a reinventar la política de pactos.

Su impronta política y personal fue nuclear en el germen de AGE (Alternativa Galega de Esquerdas) con Xosé Manuel Beiras y Yolanda Díaz formando un matrimonio de conveniencia muy mal avenido. También lo fue en la explosión de las mareas municipalistas que llegaron al poder en Galicia en 2015 para gobernar A Coruña, Santiago y Ferrol, tomando el ejemplo de la Marea Atlántica que él mismo amasó.

Una larga amistad con Iglesias

Estrechos y antiguos lazos de amistad lo unían a Pablo Iglesias, a quien conoció en las manifestaciones antiglobalización de Bolonia allá por el 2000 y junto el que viajó a Chiapas y a otros destinos de América Latina y Europa. Con él compartía la fascinación por la historia política italiana y por la resistencia partisana, en particular. Iglesias dejó patente su amistad con Gómez Reino al respaldarlo como candidato a la Presidencia de la Xunta de Galicia en julio del 2020 y lo mantuvo como diputado en el Congreso cuando el resultado electoral no fue el esperado y la marca no obtuvo representación frente a un Feijóo imbatible en su tierra.

La relación con Pablo Iglesias saltó por los aires en marzo cuando se declaró la guerra fría entre Podemos y Sumar durante el proceso de escucha de Díaz para conformar un nuevo movimiento y el que fuera vicepresidente del Gobierno arrampló contra Gómez-Reino en una tertulia y lo señaló como ‘un culo que necesita un sillón’.

También hay un estrecho e íntimo lazo que lo une a Yolanda Díaz, con quien compartió escaño y proyecto durante dos legislaturas (XIII y XIV, de 2015 a la actualidad) hasta forjar una íntima amistad que mantienen y cultivan, y como quedó patente en el respaldo de la vicepresidenta a la candidatura de Por Coruña en las municipales del 28-M que ideó Gómez Reino y que cerraba su propio padre, Suso Díaz. Desde febrero del 2020, Antón Gómez-Reino fue la mano izquierda de la vicepresidenta en el Congreso desde la presidencia de la Comisión de Trabajo y en la interlocución política con Galicia, aunque mantuvo en paralelo una agenda muy ligada a Asuntos Exteriores.

‘Tone’, como conocen a Gómez Reino y Yolanda Díaz aterrizaron juntos en el Congreso hace ocho años al frente del En Marea, un grupo de cinco diputados gallegos de confluencia amasada con la siglas de Podemos, Izquierda Unida y Anova (nacido de una escisión del Bloque Nacionalista Galego) que supuso el desembarco en Madrid de Yolanda Díaz, entonces una política desconocida fuera de Galicia que venía de curtirse como concejal de gobierno y oposición en el Concello de Ferrol primero, y en el Parlamento gallego después.

Del mismo grupo provenía Ángela Rodríguez Pam, escudera de Irene Montero, que se mantiene fiel a la ministra vetada ​

Del mismo grupo provenía Ángela Rodríguez Pam, Secretaria de Estado de Igualdad y escudera de Irene Montero, que se mantiene fiel a la ministra vetada y declaró la guerra a sus excompañeros y que tampoco ha logrado un sitio en las listas para el 23-J. El resto de la historia ya es historia y muchas viejas amistades han quedado por el camino de conformación del nuevo espacio político que encabeza la vicepresidenta, en un avance implacable y sin concesiones hacia el primer intento de asalto a la presidencia del Gobierno.