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Los críticos del PSC reniegan del Tripartito y reclaman grupo propio en el Congreso
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"EL PARTIDO NECESITA YA UNA RENOVACIÓN RADICAL Y PROFUNDA"

Los críticos del PSC reniegan del Tripartito y reclaman grupo propio en el Congreso

El Tripartito catalán era intrínsecamente malo. Eso es lo que piensa el ex líder del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y actual eurodiputado, Raimon Obiols.

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Los críticos del PSC reniegan del Tripartito y reclaman grupo propio en el Congreso

El Tripartito catalán era intrínsecamente malo. Eso es lo que piensa el ex líder del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y actual eurodiputado, Raimon Obiols. “Estuve en la firma del Pacto del Tinell (el pacto entre PSC, ERC e ICV con el que diseñaron el primer Gobierno de coalición y se conjuraron para no aliarse nunca con el PP). Al salir, la plaza del Rei estaba llena de gente gritando y aplaudiendo. Pero aquello era una coalición fría, hecha desde arriba hacia abajo, hecha desde la oportunidad de que, si sumaban, los números salían. Todo esto ha quedado atrás. En 2014, queremos una alianza hecha de abajo hacia arriba, una alianza de personas con un mismo proyecto, un mismo programa, una alianza que tenga el calor de la gente. Y eso no es un nuevo Tripartito, sino una cosa nueva”, clamó Obiols el martes ante 400 militantes, simpatizantes y curiosos, al presentar su propuesta de renovación del socialismo catalán.

Entre los presentes, una sorpresa: el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, la estrella mediática de la actualidad, que logró vencer el pulso a la dirección del partido al ganar las primarias por Barcelona. Hereu se sentó en la fila de honor, en la primera. En la puerta, de pie, sin acercarse al estrado de la sala de actos del Colegio de Abogados, se quedó Carles Martí, el líder de la poderosa Federación Socialista de Barcelona, el artífice del efecto Hereu y de la batalla interna para que la ex consejera Montserrat Tura no fuese elegida candidata. Paradojas de la vida, junto al alcalde se sentó Miquel Iceta, portavoz parlamentario socialista y viceprimer secretario del partido. Diseminados entre el público, se encontraban desde el ex secretario de Economía, Martí Carnicer, hasta la ex diputada Anna Balletbó -asidua de todos los saraos, más conocida como la mamá del 23-F, es decir, la diputada embarazada que Antonio Tejero dejó salir del Congreso debido a su avanzado estado de gestación-, el ex secretario de Prisiones Albert Batlle o el díscolo Manel Mas, ex alcalde de Mataró y pepito grillo de la direción socialista.

En el estrado, además de Obiols, estaban la eurodiputada Maria Badia, el diputado en el Parlamento catalán Daniel Font, la candidata del PSC a la alcaldía de Gerona, Pia Bosch, y el candidato a la alcaldía de Vilanova i la Geltrú Joan Ignasi Elena, el elefante blanco de los críticos para sustituir a José Montilla en la cúpula del PSC.

Todos dedicaron sus intervenciones a explicar qué significa el proyecto de Nou Cicle, que es la corriente que encabeza Obiols. Una lista interminable de posicionamientos sobre lo que ha de ser el nuevo PSC después del batacazo de las elecciones autonómicas (en las que bajó de 37 a 29 diputados). ”Hay que impulsar un proyecto de recomposición profunda de la izquierda catalana”, dijo Font. Y Badia subrayó que “tenemos un pasado y lo queremos. Los valores son los mismos, idénticos, pero los tenemos que poner al día, porque la sociedad, la familia, la realidad, han cambiado”.

“La renovación del PSC debe comenzar ya”

Pero fue Obiols quien puso los puntos sobre las íes. Su primera ambición es “una renovación radical y profunda del PSC”. La segunda, que “este proceso comience ya, sin dilación”. En ese proceso se encuentra la intención de propiciar que el partido haga unas primarias para las elecciones autonómicas del 2014. “Somos partidarios de las primarias. Y que éstas impliquen a los ciudadanos que quieran participar, no sólo a los militantes y a los simpatizantes como las que ha habido ahora en Barcelona”, enfatizó. Para suavizar un poco sus declaraciones, añadió que “ésta es una cuestión que tiene que discutirse, que razonarse”. Pero su mensaje era claro y radical: han de realizarse.

El segundo gran eje del discurso fue la renovación del PSC. “Las cosas requieren diálogo. Pero también sacrificios. No será fácil la renovación ni la construcción de una alternativa”, clamó. Para ello, abogó por la apertura del PSC a otros sectores no estrictamente socialistas, de tres segmentos diferentes: apertura a los ecosocialistas en primer lugar; segundo, “a la gente que participa en la altermundialización y la nueva política, gente con gran capacidad de movilización”; y, en tercer lugar, al segmento “que es el cruce del catalanismo, del nacionalismo y del centro izquierda”. Para Obiols, “tenemos que liderar este proceso y este camino se ha de empezar a recorrer sin dilaciones”.

Un documento que Nou Cicle distribuyó entre los asistentes al acto señalaba que “es imprescindible reforzar nítidamente la visibilidad del PSC en la política española, especialmente en el Congreso de los Diputados, donde su grupo quedó anulado después del 23-F. La existencia del grupo propio es un elemento necesario del Pacto de Abril, base de la constitución del PSC y de su relación federativa con el PSOE”. Al margen, establece las bases de la apuesta por el federalismo frente al independentismo y reclama un Estado plurinacional, pluricultural y plurilingüístico y donde se pueda aspirar a un mayor autogobierno y a una “reducción del déficit fiscal de Cataluña”.

Montilla ya tiene ahora quien le haga frente. Una corriente mínimamente organizada que intentará atraer a otros sectores para plantar cara a la dirección actual en el congreso que el próximo otoño celebrará el partido y que cambiará estrategia y caras. Los aspirantes ya están situando sus peones aunque la línea oficialista intenta por todos los medios que los movimientos no comiencen hasta después de las elecciones municipales para evitar desgastes innecesarios.

El Tripartito catalán era intrínsecamente malo. Eso es lo que piensa el ex líder del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y actual eurodiputado, Raimon Obiols. “Estuve en la firma del Pacto del Tinell (el pacto entre PSC, ERC e ICV con el que diseñaron el primer Gobierno de coalición y se conjuraron para no aliarse nunca con el PP). Al salir, la plaza del Rei estaba llena de gente gritando y aplaudiendo. Pero aquello era una coalición fría, hecha desde arriba hacia abajo, hecha desde la oportunidad de que, si sumaban, los números salían. Todo esto ha quedado atrás. En 2014, queremos una alianza hecha de abajo hacia arriba, una alianza de personas con un mismo proyecto, un mismo programa, una alianza que tenga el calor de la gente. Y eso no es un nuevo Tripartito, sino una cosa nueva”, clamó Obiols el martes ante 400 militantes, simpatizantes y curiosos, al presentar su propuesta de renovación del socialismo catalán.

PSC Cataluña José Montilla