Montilla enreda al Constitucional y fuerza un nuevo aplazamiento de la sentencia del Estatut

De diez a dos. Cuatro horas tardó ayer el pleno del Tribunal Constitucional (TC) en despachar el enésimo desencuentro sobre la sentencia del Estatut. El president José Montilla echó una mano con un escrito en el que reclama que se recupere para las deliberaciones al magistrado progresista Pablo Pérez Tremps, recusado hace tres años por haber trabajado para la Generalitat cuando era catedrático de Derecho Constitucional. Su participación inclinaría el fallo del lado de las tesis progresistas.

La presidenta María Emilia Casas había convocado un pleno monográfico para abordar el séptimo borrador de sentencia, cuya redacción asumió personalmente el pasado 19 de mayo. Casas había anticipado que en caso de que su propuesta no saliera adelante propondría que se votaran uno a uno los 114 artículos recurridos. Una fórmula que el Gobierno catalán aprovechó ayer para presentar un escrito que ha logrado posponer el desenlace del ‘culebrón’ del Estatut. Un portavoz del TC confirmó a este diario que el pleno abordó el citado escrito, no votó nada, y sus miembros no han sido emplazados a una nueva reunión.   

El escrito en cuestión, elaborado por el Gabinete Jurídico de la Generalitat, sostiene que al haber cambiado el procedimiento de resolución del recurso de inconstitucionalidad y “no requerir ahora una decisión única y global del pleno sobre el conjunto del objeto de este proceso, sino únicamente decisiones parciales sobre distintas partes del mismo, ha desaparecido en muy buena parte de ellas la causa de recusación del Excmo. Sr. Don Pablo Pérez Tremps”.

Pérez Tremps fue recusado en mayo de 2007 por haber realizado cuatro años antes para la Generalitat un informe sobre ‘La acción exterior y la participación europea ante una posible reforma del Estatuto de Cataluña’, que el PP entendió le impedía ser imparcial a la hora de resolver sobre la inconstitucionalidad del Estatut. El Gobern sostiene que cómo sólo 11 de los 114 artículos recurridos tienen que ver con la acción exterior de la Generalitat, y el pleno va a votar artículo por artículo y no el texto en su totalidad, Pérez Tremps debe reincorporarse a las deliberaciones e inhibirse tan sólo de aquellas cuestiones que guardan relación con los trabajos que realizó.

Ofensiva de la Generalitat

El escrito es un paso más en la ofensiva que el president Montilla inició el pasado mayo para impedir que el actual tribunal resuelva el recurso de inconstitucionalidad del Estatut. Primero emplazó al Senado a que renueve a cuatro magistrados cuyo mandato venció hace dos años y medio. El día 22 presentó un escrito en el TC instándole a su abstención o inhibición a favor del futuro pleno surgido de su renovación, que el pleno del tribunal rechazó el día 27. La Generalitat contraatacó y el pasado día 6 presentó un recurso de súplica contra dicho decisión, que está pendiente de resolución, y ayer reclamó que la recusación de Pérez Tremp se limite “únicamente a la deliberación, votación y fallo de los preceptos impugnados del Estatuto de Autonomía de Cataluña cuyo contenido dispositivo pueda tener directa relación con la materia que fue objeto de los trabajos científicos que dieron lugar a apreciar en su momento la causa de recusación”.

María Emilia Casas había expresado su convencimiento de que habría sentencia del Estatut antes del verano, meses antes de que se celebren las elecciones autonómicas en Cataluña. Todos los partidos, a excepción del PP, promotor del recurso de inconstitucionalidad, han avisado de que se movilizaran contra un recorte de su contenido. Un nuevo frente para el presidente Rodríguez Zapatero, que tendría que lidiar de nuevo con el díscolo PSC.