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Tango y Vilma: los perros policía de Melilla que 'cazan' droga y rescatan inmigrantes
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OPERACIÓN FERIANTE EN LA CIUDAD AUTÓNOMA

Tango y Vilma: los perros policía de Melilla que 'cazan' droga y rescatan inmigrantes

Uno se jubila tras 11 años de servicio en la Guardia Civil de la ciudad autónoma y después de salvar la vida de 30 personas. La pequeña se entrena para continuar el legado de su compañero

Foto: Tango, en uno de sus trabajos con la Guardia Civil de Melilla.
Tango, en uno de sus trabajos con la Guardia Civil de Melilla.

Era muy rebelde, “muy malo”, apunta su dueño. Más bien, travieso. Juguetón. Cuando el guardia civil Gerardo lo conoció, Tango tenía cinco meses y ni siquiera tenía chip de identificación. Tango (un perro de raza Teckel) tenía bastante con convivir con Syrito, un labrador en Valdemorillo (Madrid).

Enseguida Tango se mostró con unas cualidades innatas para trabajar y contaba con gran capacidad para saber lo que se le pedía en cada momento. Tango acaba de ‘jubilarse’ tras 11 años de trabajo en la ‘Operación Feriante’ de Melilla. Las fiestas de la comunidad autónoma acabaron hace una semana.

placeholder Gerardo Rodríguez, junto a Tango y Vilma.
Gerardo Rodríguez, junto a Tango y Vilma.

Este perro se ha convertido en un consumado especialista en detectar droga y en descubrir a inmigrantes (no solo menores), sino hasta una persona de 60 años, como ocurrió una vez, dentro de dobles fondos, neveras de 1,80 de alto x 1,50 de ancho y en los bajos de los camiones.

“No quiero que Tango se arrastre. Se lo merece todo. Es como un hijo para mí”. Gerardo Rodríguez, del Servicio Cinológico de la Guardia Civil, explica que la jubilación de su perro favorito era inevitable y valora el servicio que ha hecho al Instituto Armado en el último año y medio con la nueva alegría de la casa ‘verde’ melillense: la perra Vilma, nombre que homenajea al personaje femenino de la mítica serie ‘Los picapiedra’.

Tango es un perro “muy querido” en toda la comunidad de la Guardia Civil de Melilla. Hace casi un año el coronel de la Comandancia de la ciudad autónoma le preguntó a Gerardo cuántos años le quedaban para jubilarse. “Tres años, señor”. “¿Por qué no buscamos a otro Teckel?”, le animó el jefe. Consultaron con varios criadores y les donaron un cachorro en Asturias.

El nombre elegido era Cash en homenaje a la pareja de policías de la película ‘Tango y Cash ‘(1989), pero como era perra y no perro, como Tango, pensó en Vilma como la mejor opción para entrenarla como perra de rescate. “Ahora mismo es como un muñeco, como un cachorro que de un día para otro se rompe. Yo confío mucho en Vilma y en la Comandancia, puntera en los perros que capturan droga”.

Gerardo entrena a Vilma en la playa. La mete entre piedras y camiones. Se trata de ofrecerle todas las experiencias posibles, las dinámicas habituales de trabajo hasta que Tango no la pueda acompañar. “Me da mucha pena que Tango no pueda seguir. Su trabajo ha sido importante: ha salvado de la muerte a más de 30 personas”.

En la pasada ‘Operación Feriante’ la Policía Nacional ha interceptado a 65 personas y la Guardia Civil, mientras tanto, ha logrado encontrar a 10 personas

En la pasada ‘Operación Feriante’ la Policía Nacional interceptó a 65 personas (12 menores y 53 mayores de edad); la Guardia Civil, mientras tanto, ha logrado encontrar a 10 personas (9 mayores y un menor). Este año se ha producido un ligero aumento: frente a las 75 de este año, en 2018 fueron 69 las personas interceptadas y en 2017 fueron 81.

placeholder Tango, en la 'Operación Feriante'.
Tango, en la 'Operación Feriante'.

El perfil suele ser varón y de procedencia diversa: del Sáhara, Mauritania o Egipto. Una vez, recuerda el guardia civil que entrena a Tango y Vilma, detectó a una mujer de 25 años que se asustó tanto que le temblaban las piernas hasta que la perra, llamada Fyona, “tan cariñosa” estuvo a su lado y dejó de estar intranquila.

“Una vez detecté a un hombre con 64 años. Me quedé impactado. Nadie quiere verse así. Le tratamos con mucho cariño y con dignidad”, narra Gerardo. Unas 80 personas han sido recogidas en las hormigoneras o de sacos de ceniza cancerígenos de dos metros. Y también camuflados debajo de los motores.

"Lloran y se nos abrazan"

El 80% del trabajo se concentra en los embarques desde Melilla a Málaga, Motril y Almería y el 20% en la ‘Operación Feriante’, apenas tres días con avalanchas de personas que intentan acceder a los barcos hacia la Península. “Lloran, se nos abrazan y sentimos una rabia interior grande”, explica el guardia civil.

Tras interceptarlos están en las dependencias de la frontera. Les dan de comer, avisan a la ambulancia. Después del atestado, les leen sus derechos y se les traslada al CETI (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes). “Algunos nos dicen que son sorianos. ¿Sorianos? En realidad quieren decir que son sirios, de Siria. Tenemos que adaptarnos a su lenguaje para entenderlos lo antes posible”, remata Gerardo, el padre adoptivo de Tango y Vilma. Su vida.

Era muy rebelde, “muy malo”, apunta su dueño. Más bien, travieso. Juguetón. Cuando el guardia civil Gerardo lo conoció, Tango tenía cinco meses y ni siquiera tenía chip de identificación. Tango (un perro de raza Teckel) tenía bastante con convivir con Syrito, un labrador en Valdemorillo (Madrid).

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