Sánchez, sobre las diligencias a su mujer: "A pesar de todo, sigo creyendo en la Justicia de mi país"
El presidente del Gobierno reacciona a la apertura de un procedimiento judicial contra Begoña Gómez por tráfico de influencias. Gabriel Rufián le sitúa como víctima: "Está usted sufriendo en sus carnes la guerra sucia"
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20 minutos. Es el tiempo que ha ocupado Sánchez su asiento en el Congreso de los Diputados durante la sesión de control al Gobierno de este miércoles, la última hasta dentro de tres semanas, que se celebra después de que El Confidencial haya adelantado que un juzgado de Madrid ha abierto diligencias previas contra Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias y corrupción en el sector privado. Ni Feijóo ni Abascal arrancaron una reacción al jefe del Ejecutivo sobre esta cuestión. Pero sí lo hizo Gabriel Rufián, que preguntó al presidente del Gobierno si "cree en la Justicia".
"En un día como hoy y después de las noticias que he conocido, a pesar de todo, sigo creyendo en la Justicia de mi país", zanjó Sánchez. No fue más allá. El portavoz de ERC le situó en su réplica como víctima antes de cuestionar la "persecución" al independentismo por los tribunales, al hilo también de la reapertura del caso Pegasus. "Hoy es un mal día porque está usted sufriendo en sus carnes la guerra sucia", incidía el portavoz independentista.
Como publica este medio, el titular del Juzgado de Instrucción Número 41 de Plaza de Castilla, en manos del magistrado Juan Carlos Peinado, ha iniciado un procedimiento para investigar las relaciones de la mujer de Sánchez con varias empresas privadas que acabaron recibiendo fondos públicos del Ejecutivo. El caso gira en torno a una presunta comisión de delitos de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado. El juez prevé citar, en primera instancia, a varios testigos.
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El PP prevé activar el caso de conflicto de intereses contra Sánchez en cuanto agote la vía administrativa. Y las nuevas pesquisas judiciales contra Begoña Gómez abonan esa ofensiva jurídica del primer partido de la oposición. Génova ya denunció al jefe del Ejecutivo ante la Oficina de Conflictos de Intereses por no inhibirse en el rescate de Air Europa pese a los vínculos del holding con su mujer. Como adelantó El Confidencial, los de Feijóo prevén judicializar el asunto, bien ante el Supremo o ante la Audiencia Nacional. El caso está en manos de los servicios jurídicos del partido.
Pese a ello, Alberto Núñez Feijóo no utilizó el caso de Begoña Gómez para atacar a Sánchez en la sesión de control. El líder del PP se volcó en el arranque de la campaña catalana y en los pactos de Sánchez con el independentismo. Primero le culpó del histórico ascenso de Bildu en País Vasco, y luego situó al PSOE como un partido "menguante" y "subalterno" del nacionalismo. "Usted es al independentismo lo que Koldo es al PSOE: indisociable", zanjó.
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Sánchez, por su parte, replicó al líder del PP con los resultados en Euskadi y sacó pecho de cómo la ciudadanía vasca había apoyado de forma mayoritaria tanto al PSOE como a los partidos que sostienen a su Gobierno, en contraposición con la derecha y "la ultraderecha". "¿Exactamente qué celebra?", respondía Feijóo. "Donde usted gobierna, los independentistas tienen la última palabra", y recordó para finalizar el músculo del PP a nivel territorial en contraposición con el PSOE. "El irrelevante es usted", apuntó.
El portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, cogió el relevo de su jefe de filas para equiparar al Gobierno con ETA enseñando una foto de encapuchados de la banda terrorista y otra de Sánchez con Mertxe Aizpurua, altavoz de los abertzales en el Congreso. "Ahora el PSOE va sin caretas, y Bildu va sin pasamontañas", ahondaba el dirigente popular. Por su parte, Santiago Abascal tampoco usó las diligencias abiertas a Begoña Gómez contra Sánchez, y se centró en su discurso estrella al que fían resistir en Cataluña: la inmigración ilegal y su apuesta por las "deportaciones masivas" para los irregulares. "Usted es un paradigma de la desinformación", replicó Sánchez.
20 minutos. Es el tiempo que ha ocupado Sánchez su asiento en el Congreso de los Diputados durante la sesión de control al Gobierno de este miércoles, la última hasta dentro de tres semanas, que se celebra después de que El Confidencial haya adelantado que un juzgado de Madrid ha abierto diligencias previas contra Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias y corrupción en el sector privado. Ni Feijóo ni Abascal arrancaron una reacción al jefe del Ejecutivo sobre esta cuestión. Pero sí lo hizo Gabriel Rufián, que preguntó al presidente del Gobierno si "cree en la Justicia".