Es noticia
Archivan el caso Oikos sobre el amaño de partidos en Primera: "No hay bastantes indicios"
  1. España
INVESTIGABA A RAÚL BRAVO Y CARLOS ARANDA

Archivan el caso Oikos sobre el amaño de partidos en Primera: "No hay bastantes indicios"

La jueza concluye que las conversaciones en las que los presuntos implicados hablaban de pagos a los futbolistas resultan insuficientes y acuerda el sobreseimiento provisional

Foto: Los exfutbolistas Carlos Aranda (primer plano) y Raúl Bravo (detrás) al abandonar en 2019 la prisión de Zuera, en Zaragoza. (EFE)
Los exfutbolistas Carlos Aranda (primer plano) y Raúl Bravo (detrás) al abandonar en 2019 la prisión de Zuera, en Zaragoza. (EFE)

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 5 de Huesca ha archivado el conocido como caso Oikos, en el que se investigaba una supuesta trama liderada por los exfutbolistas Raúl Bravo y Carlos Aranda que se dedicaba al amaño de partidos para beneficiarse de apuestas deportivas. "No existen indicios bastantes para considerar que se haya cometido el principal ilícito objeto de esta causa, eso es, la corrupción deportiva", concluye la jueza en un auto del 25 de marzo, al que ha tenido acceso El Confidencial. "Solo cabe concluir que no resulta debidamente justificada la perpetración de los delitos objeto de este procedimiento".

En el caso Oikos se investigaban dos partidos de Primera División, ambos disputados el 18 de mayo de 2019: el del Getafe-Villarreal (con resultado de empate a dos) y el del Valladolid-Valencia (con resultado de cero a dos). El primero de ellos se incluyó en el procedimiento tras intervenirse una conversación entre Bravo y el también futbolista Francisco Esteban Granados, manifestando este último que se llevaba muy bien con el jugador del Getafe Jorge Molina y "que les habrían ofrecido dos millones a siete jugadores del Villarreal para perder el partido".

En lo que se refiere al segundo encuentro, los investigadores apuntaban a otra conversación en la que Aranda preguntaba a Esteban Granados "por el capitán del Valladolid" y este le informaba sobre "una presunta compra del partido por unos terceros desconocidos". El entonces segundo capitán del Valladolid, Borja Fernández, reconoció a los investigadores que durante aquella época había quedado con Raúl Bravo "porque se conocen" y este quería preguntarle "sobre opciones laborales en el equipo", pero negó que le ofreciera dinero para manipular el resultado del partido.

Tras más de cuatro años de investigación, la jueza considera que estas conversaciones y encuentros no son suficientes para probar la corrupción deportiva: "Estos partidos dieron lugar a una apuesta combinada en la que Carlos Aranda perdió dinero al no ganar el Getafe", explica. "No existen indicios bastantes de que existiese una actuación tendente a pagar por alterar el resultado del partido y, en caso de que así hubiese sido, lo hubiese sido por ganar, lo cual excluiría la tipicidad de la conducta".

Foto: El delantero Jorge Molina en una imagen de archivo de 2020. (EFE)

El caso Oikos incluía a su vez otros tres partidos de categorías más bajas: el Sariñena-Cariñena de 13 de abril de 2017; el SD Huesca- Gimnastic de Tarragona de 27 de mayo de 2018, y el Reus-Valladolid de 4 de junio de 2017. Según la Policía Nacional, la manipulación se realizaba en varias fases. En la primera se seleccionaban los partidos, bien del inicio de la liga o de su final. Después, se intentaban pactar apuestas combinadas —resultados parcial y final, resultado final y córneres, por ejemplo—, lo que les permitía incrementar los márgenes de ganancia. Todo ello mientras se llevaba a cabo un proceso de captación, con una primera aproximación a algún miembro de la plantilla, preferiblemente uno de los capitanes.

La jueza también investigaba por estos hechos al exfutbolista Samuel Saiz, al que representaba la abogada Beatriz Uriarte, como supuesto intermediario que se encargaba de "contactar con los equipos". Esta misma sospecha se extendía a la antigua directiva del Huesca y a los exjugadores Íñigo López Montaña y Carlos Caballero Pérez, pero su auto concluye finalmente que "solo procede decretar el sobreseimiento provisional y archivo de estos hechos" ante la falta de indicios determinantes.

Al no haber quedado acreditada la corrupción deportiva, la jueza apunta a que los delitos de organización criminal, blanqueo de capitales y defraudación a casas de apuestas ya no se sostienen: "No cabría hablar de la existencia de un engaño, en el sentido propio de la estafa, al no poderse conocer el resultado del encuentro". Su auto sigue el mismo criterio que la Fiscalía, que en un reciente escrito sostenía que la investigación había logrado arrojar “conjeturas, hipótesis y razonamientos convincentes", pero en ningún caso había probado "la comisión del delito de corrupción deportiva”.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 5 de Huesca ha archivado el conocido como caso Oikos, en el que se investigaba una supuesta trama liderada por los exfutbolistas Raúl Bravo y Carlos Aranda que se dedicaba al amaño de partidos para beneficiarse de apuestas deportivas. "No existen indicios bastantes para considerar que se haya cometido el principal ilícito objeto de esta causa, eso es, la corrupción deportiva", concluye la jueza en un auto del 25 de marzo, al que ha tenido acceso El Confidencial. "Solo cabe concluir que no resulta debidamente justificada la perpetración de los delitos objeto de este procedimiento".

Policía Nacional
El redactor recomienda