Unas primarias del PSOE salpicadas de irregularidades dan la victoria en Melilla a la candidata de Ferraz

Sabrina Moh Abdelkader (Melilla,1984) resultó elegida este sábado candidata a la secretaría general del PSOE en su ciudad al término de unas primarias plagadas de irregularidades, según su contrincante derrotado, Manuel Vázquez Neira (Bilbao, 1979), y parte de la militancia del partido. "Hasta Nicolás Maduro hubiese guardado más las formas a la hora de organizar elecciones", comentó un veterano militante melillense. Ella obtuvo 137 votos y su rival 41. Hubo 5 abstenciones y un voto nulo. El 66,43% de los 277 afiliados inscritos en el censo participaron en la votación.

La vencedora de las primarias es, desde 2018, delegada del Gobierno en la ciudad, una responsabilidad que compaginará con la dirección del partido. Aunque hay algunos, muy pocos, precedentes en la historia del PSOE, es la primera vez que una misma persona ostentará en Melilla ambos cargos. Sabrina Moh es diplomada en magisterio con especialidad en educación musical por la Universidad de Granada.

El derrotado es un licenciado en máquinas navales por la Universidad de A Coruña que tiene a sus espaldas largos años de militancia en el partido en varias ciudades de España. "Soy el candidato independiente, frente a la aspirante del aparato", explicaba al teléfono antes de conocer el escrutinio. "Soy David contra Goliat", insistía aún ilusionado.

El PSOE es en la ciudad autónoma un partido que va cosechando fracasos electorales. El último tuvo lugar en mayo de 2023 cuando tan solo logró el 10,6% de los sufragios y quedó casi empatado con Vox. Obtuvo tres de los 25 escaños de diputados de la Asamblea de Melilla, una ciudad de 85.600 habitantes, pero con un presupuesto similar al de Granada (233.000 habitantes). Desde el verano la gobierna el Partido Popular.

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Pese a ser el PSOE un partido liliputiense, sus primarias han tenido gran eco porque se han caracterizado por una bronca interna permanente, alimentada por las denuncias del candidato Manuel Vázquez sobre irregularidades. La campaña ha estado además salpicada de revelaciones sobre las componendas que hizo el PSOE desde el Gobierno, en 2020, invitando al PP a compartir el poder.

En el debate, el jueves 14, entre los dos candidatos, celebrado a puerta cerrada porque Sabrina Moh rehusó que fuese retransmitido, Manuel Vázquez, le dijo que "no estaba legitimada" para ser secretaria general porque hace cuatro años, cuando era secretaria de organización, actuó a espaldas de la Comisión Ejecutiva del partido y además mintió a la militancia. La costumbre ahora, en el PSOE, es transmitir en directo los debates de las primarias, como sucedió en Extremadura en febrero, pero en Melilla "se prefiere la opacidad a la transparencia", se lamentó Vázquez.

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A ojos de Manuel Vázquez hubo durante las primarias varias irregularidades que él denunció o impugnó en Melilla y hasta en la sede madrileña del PSOE sin obtener respuesta, "ni siquiera un acuse de recibo". La primera es que se convocaron en febrero las primarias sin que Gloria Rojas (Melilla, 1968), la actual secretaria general, haya dimitido. Se violaron así los estatutos. El mandato de Rojas expira en 2025, aunque se supone que renunciará dentro de un mes cuando se celebre el congreso de los socialistas melillenses que designe a su sustituta.

Otra anomalía es que Sabrina Moh ha sido además la coordinadora del comité organizador de las primarias, a la vez que candidata a la secretaria general. Los otros cuatro miembros del comité eran todos trabajadores del partido contratados por Sabrina Moh que era secretaria de organización hasta que formalizó su candidatura. Entonces se apartó del cargo. En la Comisión de Ética y Garantías del PSOE, que debe velar por la pulcritud y transparencia del proceso electoral, figura, por último, un hermano de Sabrina Moh.

Durante el debate electoral del jueves Manuel Vázquez se refirió ampliamente a los dos largos chats de WhatsApp mantenidos entre responsables socialistas en 2020 y 2021, cuando el PSOE gobernaba la ciudad asociado con Coalición por Melilla (CpM), un partido con un cierto referente islámico, y con Eduardo de Castro, el único diputado de Ciudadanos al que hicieron presidente.

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En las conversaciones, desveladas por tres medios locales audiovisuales, los socialistas hablan en tono despectivo de sus colegas de Gobierno. Se refieren al presidente de la ciudad como "el tonto" o "el mongo" y a sus interlocutores de CpM como "los psicópatas" aunque también escriben que se están “llenando los bolsillos”. De sí mismos reconocen que están "jodidos y desesperados" y que conforman un "des-gobierno".

De la lectura de los chats queda claro que tan solo nueve meses después de haber formado en 2019 esa coalición heterogénea, los socialistas tantearon al PP para que sustituyera a CpM como socio de Gobierno, pero con la condición de que Gloria Rojas, la secretaria general, presidiese el Ejecutivo. El PSOE no tenía ni siquiera la mitad de escaños que los populares.

Estos se negaron y los socialistas barajaron entonces aupar a Gloria Rojas a la presidencia en sustitución de Eduardo de Castro, pero por otra vía. Para mantener la mayoría en la Asamblea de Melilla no dudaron en buscar el apoyo del diputado Jesús Delgado, expresidente de Vox investigado por apropiación indebida cuando presidía el Colegio de Médicos de la ciudad. Estaban dispuestos a ofrecerle la consejería de Seguridad Ciudadana, pero CpM se negó y la operación no cuajó. El Gobierno de coalición se mantuvo con los mismos socios.

Aunque les han restado importancia, Sabrina Moh y Gloria Rojas no han desmentido el contenido de los chats. "Creo que la clase política no está preparada para que dos mujeres ocupen dos cargos importantes", declaró Rojas refiriéndose a sí misma y a la candidata a secretaria general.

Frases como se "están llenando los bolsillos", extraídas de los chats, hacen además sospechar que los consejeros socialistas se olían ya entonces que sus colegas del CpM podían cometer presuntos delitos. A principios de este mes, la operación policial Santiago-Rusair ha desvelado la existencia de una trama que, mediante fraude en la contratación y malversación pública, financió la compra de votos. Hay 33 personas investigadas y tres exconsejeros de CpM así como el líder del partido, Mustafa Aberchán, han sido enviados a prisión sin fianza por la jueza instructora.