El PSOE invita a la Internacional Socialista a una "organización pantalla" de la inteligencia marroquí

El PSOE ha abierto la puerta de la Internacional Socialista al Movimiento Saharaui por la Paz (MSP) en un aparente intento de socavar la representatividad del Frente Polisario, el movimiento saharaui que reivindica la autodeterminación de la población de esa antigua colonia española y libra una guerra de baja intensidad contra Marruecos.

Una delegación del MSP, encabezada por su jefe, Hach Ahmed Bericalla, asistió como invitada al Consejo de la Internacional Socialista que se celebró el pasado fin de semana en Madrid y que preside el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, según informaciones y fotografías publicadas en la web de ese movimiento así como en publicaciones afines a Marruecos. Hace ahora un año, Hach Ahmed Bericalla solicitó por carta el ingreso de su grupo como observador en la Internacional Socialista, un estatus que aún no ha obtenido.

El MSP fue descrito como una "organización pantalla" de la Dirección General de Estudios y Documentación (DGED), el servicio secreto exterior de Marruecos, en un informe del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) del 24 de junio de 2021. Hach Ahmed Bericalla ha desmentido estar al servicio de la DGED.

Al margen de esta descripción del CNI, tanto los medios de los que dispone un grupo tan pequeño como sus planteamientos políticos hacen sospechar que recibe un apoyo substancial de Marruecos. En septiembre de 2022 celebró una conferencia en Las Palmas a la que asistieron cientos de participantes, muchos de ellos llegados de Marruecos y del Sáhara Occidental, con todos los gastos pagados. En octubre pasado, repitió el mismo evento en Dakar. Preguntado sobre los recursos de los que dispuso para costear la conferencia de Las Palmas, el MSP no respondió.

Hach Ahmed Bericalla se alegró, además, públicamente del alineamiento, en marzo de 2022, del presidente Pedro Sánchez con la solución que propugna el rey Mohamed VI para resolver el conflicto del Sáhara: conceder una autonomía y sortear el referéndum de autodeterminación. Tachó la carta de Sánchez al monarca de "muy positiva". Arremete también sistemáticamente contra el Frente Polisario y no pide la libertad de los 40 presos de conciencia saharauis en cárceles marroquíes. A principios de febrero criticó, junto con Rabat, a Staffan de Mistura, enviado especial del secretario general de la ONU para el Sáhara, porque viajó a Sudáfrica, un país que apoya al Polisario.

Desde poco después de su fundación, en la primavera de 2020, el MSP ha recibido el apoyo de los socialistas españoles, primero a título individual y, ahora, en la Internacional Socialista, del PSOE en su conjunto. En sus conferencias de Las Palmas y de Dakar, los oradores estrellas fueron, presencial o virtualmente, el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, el expresidente del Congreso, José Bono, y el eurodiputado Juan Fernando López Aguilar. Zapatero y Bono han viajado, además, en diversas ocasiones, al Sáhara Occidental.

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Apoyar al MSP es un intento de deslegitimar al Polisario. A ojos de Naciones Unidas sigue siendo el representante del pueblo saharaui y como tal actúa en los tribunales, como, por ejemplo, el de la Unión Europea en Luxemburgo, donde ha ganado todos los juicios contra Marruecos. Ahora está a la espera de que la máxima instancia judicial europea confirme sendas sentencias de un tribunal inferior, de septiembre de 2021, que anularon los acuerdos de asociación y pesca con Marruecos.

En paralelo a los gestos complacientes hacia el MSP, el Frente Polisario recibió algunos mazazos. Pese a tener el estatus de miembro consultivo de la Internacional Socialista, no logró que en el congreso de esta organización, celebrado en Madrid en diciembre de 2022, se aprobase ninguna moción sobre el Sáhara Occidental, aunque sí salieron adelante otras sobre lugares remotos como Colombia, el pueblo kurdo, etcétera. En ese congreso, Pedro Sánchez fue elegido presidente de la organización socialista.

Los socialistas españoles aprovecharon también la reunión del Consejo de la Internacional Socialista, celebrada el 24 y 25 de febrero en Madrid, para promover a Aicha El Gourgi, diputada de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP), por la circunscripción de Rabat-Salé, en el Parlamento de Marruecos, pero residente en Tarragona. Fue elegida, en realidad se trata más bien de una cooptación, para ser miembro del Comité de Igualdad de la Internacional Socialista que copreside Pedro Sánchez.

Aicha El Gourgi se desgañitó, en las últimas elecciones autonómicas de mayo pasado, enviando correos a españoles de origen marroquí animándolos a votar "al PSOE y sus confluencias territoriales" porque es el partido que "defiende los valores de cooperación, respeto mutuo y buena vecindad" con Marruecos. En otra ocasión, arremetió con dureza en una entrevista contra una de las federaciones musulmanas de España a la que reprochó estar vinculada a Justicia y Caridad, una corriente islamista moderada alegal enfrentada con el régimen marroquí.

Ella misma votó en julio en España, según reconoció en un mensaje enviado a este periodista. Eso significa que es a la vez española y marroquí, pese a que entre ambos países no hay acuerdo sobre doble nacionalidad y se debe renunciar a una cuando se adquiere la otra. Curiosamente, las autoridades españolas permanecen de brazos cruzados ante esta infracción. Está casada con un empresario español.

En otra campaña electoral, la de las legislativas de Marruecos en septiembre de 2021, Aicha El Gourgi apareció en un vídeo recordando que, en el programa de la USFP, su partido, se resalta la necesidad de "completar y fortalecer la integridad territorial de Marruecos" lo que implica "liberar sus ciudades e islas ocupadas: Ceuta y Melilla e islas Canarias".

El Gourgi organizó en abril de 2019 la visita a España de Driss Lachgar, primer secretario de los socialistas marroquíes. Se reunió, entre otros, con José Luis Ábalos, entonces ministro de Transportes. La diputada marroquí alardeó siempre de una amistad con Ábalos, que exhibió durante años con fotos y vídeos en sus redes sociales.

Cuando Ábalos fue destituido como ministro y secretario de organización del PSOE, El Gourgi siguió siendo fiel a su amigo. Le organizó, a finales de julio de 2021, unas vacaciones en Marruecos con su mujer y sus dos hijas. Esa estancia incluyó una cena en casa de Driss Lachgar en Rabat que fue inmortalizada con varias fotografías subidas a las redes sociales.