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El PP compara la piñata de Sánchez con la quema de fotos del Rey: "Eso al PSOE no le parece mal"
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ALTERCADO EN FERRAZ

El PP compara la piñata de Sánchez con la quema de fotos del Rey: "Eso al PSOE no le parece mal"

Génova condena el apaleamiento de un muñeco con la cara del jefe del Ejecutivo y recuerda que en el mismo acto se "insultó gravemente" a Almeida. Patxi López exige a Feijóo que rechace la "violencia fascista"

Foto: Decenas de personas celebran la entrada del año nuevo en la calle Ferraz ante la piñata de un Sánchez ahorcado. (Europa Press/Diego Radamés)
Decenas de personas celebran la entrada del año nuevo en la calle Ferraz ante la piñata de un Sánchez ahorcado. (Europa Press/Diego Radamés)

El primer incendio político del año se produjo solo unos minutos después de que finalizasen las 12 campanadas. Una piñata con la imagen de Pedro Sánchez centró los focos en la céntrica calle de Ferraz, donde decenas de personas volvieron a reunirse la noche del 31 de diciembre para mantener las protestas contra el Ejecutivo al tiempo que se comían las uvas. El muñeco terminó ahorcado y apaleado, un acto de "violencia fascista", según denunció este martes en TVE el portavoz de los socialistas en el Congreso, Patxi López. El dirigente exigió, además, al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, un "rechazo" verbal de lo que ha calificado como un posible "delito de odio". "No les justifiquemos", apelaba. "Lo que decimos los políticos en una tribuna no es gratis, y algunos pueden coger nuestras palabras como justificante de sus acciones".

Tanto la dirección del PP como su líder dieron el silencio como respuesta a las apelaciones de ministros como María Jesús Montero, que pidió también a Feijóo que condenase los insultos de "un grupo de energúmenos" a las puertas de Ferraz. "Cuando se da aire a la extrema derecha, pasa esto", alegó. Génova ha roto finalmente su silencio este martes. Fuentes del PP muestran su "condena" a "todo lo que no entra en los límites del respeto", pero comparan lo sucedido en fin de año en la sede de los socialistas con la quema de las fotos del Rey. "El mismo PSOE que acaba de decir que no le parece mal a nivel penal que se quemen fotos del monarca o la bandera de España se muestra indignado por una piñata con la cara de Pedro Sánchez", denuncian.

Génova censura así un doble rasero por parte del PSOE, que el pasado mes de diciembre dio luz verde a la despenalización del enaltecimiento del terrorismo o de las injurias a la Corona. Y critica lo sucedido en Ferraz, aunque con peros. Recuerdan en este punto que en la misma manifestación en que se apaleó una piñata de Sánchez también "se insultó de extrema gravedad a cargos del PP". Uno de los presentadores de las campanadas de Ferraz, el youtuber conocido como Infovlogger, se refirió a José Luis Martínez-Almeida como "puto enano" o "hijo de perra".

"¿Qué opina el PSOE de los insultos a Almeida por parte de los mismos que golpearon la piñata? ¿Y de la quema de muñecos con la imagen de Feijóo en Galicia? ¿Y de la quema de imágenes del presidente del PP en la Diada?", lamentan en la dirección de los populares, que reiteran que su posición de rechazo ante este tipo de ataques es "la misma en todos los casos", pero censuran que no sucede lo mismo con el PSOE. Los socialistas tampoco se han pronunciado sobre los insultos al regidor popular.

Otros dirigentes del PP, como el candidato popular en las elecciones gallegas, Alfonso Rueda, se han expresado en el mismo sentido. "Son imágenes que no deberían producirse en ningún caso", lamentaba el también presidente de la Xunta en una entrevista para RNE, en la que criticaba, no obstante, que el PSOE no se manifestase "con la misma contundencia" cuando ese tipo de "actitudes" afecta al PP. "Nosotros no tenemos ningún problema en decir que estamos en contra de que se utilice la imagen de una persona o de un político con esos fines. Espero que la misma contundencia se manifieste también cuando se utiliza la imagen de otros dirigentes políticos, como la de Isabel Díaz Ayuso", añadía también el consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel García.

La acción, que volvió a reunir a decenas de personas en Nochevieja ante la sede de Ferraz, donde se apaleó a la piñata del presidente del Gobierno, estuvo de nuevo convocada por Revuelta, la organización juvenil vinculada a Vox. El partido de Santiago Abascal tampoco ha condenado lo sucedido ante la sede de los socialistas, y, de hecho, su líder llamó a perseverar en el rechazo al "Gobierno ilegal" y a la "liquidación del Estado de derecho" frente al "ataque feroz y coordinado del bipartidismo contra Vox".

Foto: Unas 300 personas celebran la entrada del año nuevo en la calle Ferraz. (Europa Press/Diego Radamés) Opinión
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La Policía Nacional ha citado a declarar a la organización convocante de la protesta de Nochevieja para tomar declaración como responsable del acto en que se colgó y se golpeó con saña a un muñeco que representaba a Pedro Sánchez. Revuelta justificó en redes sociales lo sucedido y alegó que la piñata gigante del "golpista" había pasado los controles policiales habituales en las entradas de la calle Ferraz y se colgó para golpearla porque estaba "rellena de turrones". El PSOE, por su parte, se prepara para llevar ante la Fiscalía lo ocurrido como un delito de odio. "Queremos que los responsables de ese acto violento comparezcan ante la Justicia", exigió por su parte Patxi López. "¿Hasta dónde están dispuestos a llegar?", cuestionó.

El primer incendio político del año se produjo solo unos minutos después de que finalizasen las 12 campanadas. Una piñata con la imagen de Pedro Sánchez centró los focos en la céntrica calle de Ferraz, donde decenas de personas volvieron a reunirse la noche del 31 de diciembre para mantener las protestas contra el Ejecutivo al tiempo que se comían las uvas. El muñeco terminó ahorcado y apaleado, un acto de "violencia fascista", según denunció este martes en TVE el portavoz de los socialistas en el Congreso, Patxi López. El dirigente exigió, además, al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, un "rechazo" verbal de lo que ha calificado como un posible "delito de odio". "No les justifiquemos", apelaba. "Lo que decimos los políticos en una tribuna no es gratis, y algunos pueden coger nuestras palabras como justificante de sus acciones".

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