Fiasco absoluto de Yolanda Díaz: Colau se estrella y caen Compromís y Más Madrid

Las grandes apuestas de Yolanda Díaz para el 28-M se han estrellado en las urnas. Ada Colau y los candidatos de Más Madrid y Compromís verían frustrados sus objetivos, hasta el punto de ver menguada su representación (Más Madrid), de perder el Gobierno de la Generalitat y la capital valenciana (Compromís), y hasta de perder el Ayuntamiento de Barcelona. Ada Colau fracasa ante Xavier Trías y Jaume Collboni. Todas las encuestas vaticinaban un resultado muy ajustado en el consistorio, con el partido de Colau, Catalunya en Común, compitiendo con Junts y el PSC. Con casi el 99% del voto escrutado, la actual alcaldesa de Barcelona era la tercera en ese ranking, a apenas un par de centenares de votos de Collboni, logrando nueve concelajes frente a los 10 del PSC y los 11 de Trías.

Hay solo otros dos candidatos que hayan sido ungidos por la vicepresidenta segunda, hasta el punto de que pidió el voto para ambos: Héctor Illueca (Unidas Podemos) en la Comunidad Valenciana y Joan Ribó (Compromís) en el ayuntamiento de la capital. Illueca no ha logrado superar la barrera del 5% de los votos, y Ribó se queda con nueve concejales, frente a un PP que ha sumado cinco puestos, convirtiéndose en la fuerza más votada del ayuntamiento de la capital del Turia. Ninguno de estos resultados favorece a Díaz, en una noche negra para la izquierda, con Podemos firmando su acta de defunción en varios parlamentos.

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Y eso, únicamente, en lo referido a los candidatos bendecidos personalmente por la vicepresidenta, ya que sus aliados para construir Sumar también decrecen. La izquierda no logra revalidar el pacto del Botànic, perdiendo el Gobierno regional y la ciudad que, hasta ahora, gobernaba Ribó. Ni siquiera Más Madrid logró dar la vuelta al marco de derrota general: Mónica García logró revalidar su puesto como segunda fuerza en la Asamblea, pero perdió 14.000 votos con respecto a los últimos comicios. Y apenas ha ganado tres diputados autonómicos (27), los mismos que el PSOE, que volvía a igualar a García en el número de escaños logrados.

Rita Maestre, la cabeza de lista de su partido al ayuntamiento, sufría directamente el golpe electoral, perdiendo siete concejales con respecto a los resultados de Manuela Carmena hace cuatro años, y quedándose con 12 ediles, apenas uno más que el PSOE, que ha sumado tres representantes en el consistorio. El PP de José Luis Martínez-Almeida duplicaba sus resultados, hasta lograr 29 concejales, mayoría absoluta.

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Los resultados son demoledores, pero el de Colau toca particularmente a Díaz. La vicepresidenta segunda avaló a la líder de Catalunya en Común, y adelantó que asumiría como propio el resultado de Colau, uno de sus principales apoyos de cara a la construcción de su proyecto político, Sumar. Frente a los gestos aislados —más o menos evidentes— en otras comunidades en las que no había candidaturas de unidad entre la izquierda a la izquierda del PSOE, Díaz ha visitado Barcelona hasta en tres ocasiones en estas dos semanas (sin contar sus dos visitas en las semanas anteriores), visibilizando su sintonía política y personal con la que fuera su alcaldesa durante ocho años.

Colau perdió 20.000 votos entre 2015 y 2019, pasando de un 25,21% de los votos a quedarse con el 20,71%, ya como segunda fuerza, si bien logró revalidar el consistorio al pactar con el PSC, con el aval del candidato de Ciudadanos, Manuel Valls. Es un fracaso sin paliativos para la izquierda, tanto para Podemos como para las fuerzas claramente alineadas con el proyecto de la vicepresidenta segunda.

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Al filo de las dos de la mañana, el silencio de Díaz, incluso en sus perfiles en redes sociales, era atronador. Siguió la noche electoral desde su casa, tras volver de un viaje oficial a Oporto. Su agenda oficial como vicepresidenta, como ocurre con las de Pedro Sánchez y las ministras moradas, permanecía despejada, sin comparecencias ni entrevistas en las que pueda exponerse a preguntas sobre los resultados del 28-M.