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Marlaska arroja ahora sospechas sobre Pérez de los Cobos por el uso de los fondos reservados
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Le vincula con el caso Kitchen

Marlaska arroja ahora sospechas sobre Pérez de los Cobos por el uso de los fondos reservados

“¿Usted tendría confianza en aquellas personas que gestionaban los fondos reservados sin el debido control?”, dice el ministro en alusión al coronel, exresponsable del departamento

Foto: El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. (EFE/Mariscal)
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. (EFE/Mariscal)

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dado un paso más en su pulso con el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos. Un día después de que el Tribunal Supremo anulase su cese dictado en 2020 por no informar a sus jefes políticos de una investigación judicializada, el ministro ha sembrado sobre el mando la sospecha a cuenta del caso Kitchen y el mal uso de los fondos reservados. Esas partidas económicas eran competencia del Gabinete de Coordinación y Estudios que Diego Pérez de los Cobos dirigió con varios ministros, incluido el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, coincidiendo con los últimos años del terrorismo de ETA.

Marlaska ha hecho estas insinuaciones en el Congreso de los Diputados, donde ha contestado a las críticas del PP, que ha exigido su dimisión tras el revés judicial en el Tribunal Supremo. El ministro ha insistido en que se mantienen las razones que llevaron a destituir a Pérez de los Cobos por “falta de confianza” y en sus argumentos ha introducido la gestión del dinero que desde Interior se destinaba a las unidades investigadoras de la Policía y la Guardia Civil. “¿Usted tendría confianza en aquellas personas que gestionaban los fondos reservados y que gestionaban los fondos sin el debido control?”, le ha espetado a la diputada del PP Ana Vázquez.

Foto: Marlaska y Pérez de los Cobos. (EFE)

Se refería en concreto al caso Kitchen, en el que está procesada la cúpula del Ministerio del Interior del PP entre 2012 y 2016, y varios mandos policiales por los seguimientos al extesorero popular Luis Bárcenas para arrebatarle pruebas que incriminasen al partido en casos de corrupción. En el marco de esta causa que se instruye en la Audiencia Nacional se investigó el uso de fondos reservados para pagar, por ejemplo, un sueldo mensual al chófer de Bárcenas por sus servicios. En este caso, no ha estado nunca investigado el coronel Diego Pérez de los Cobos.

Según ha dicho Grande-Marlaska desde su escaño, los fondos reservados “tuvieron que ser desclasificados a petición de la autoridad judicial y están en un expediente y permitieron con ese no control que se utilizaran para destruir pruebas para que el PP pudiera ocultar su responsabilidad”. “¿Usted tendría confianza en ese tipo de personas? Pues ese tipo de personas es en las que este ministro del Interior no tiene, no ha tenido y no tendrá confianza”, ha zanjado.

"Elementos conocidos con posterioridad"

Este halo de sospecha sobre el coronel se une al críptico mensaje que el departamento de comunicación del Ministerio del Interior difundió ayer a los medios tras conocerse el fallo del Tribunal Supremo que suponía un varapalo para Grande-Marlaska: “El Ministerio del Interior reitera que las razones de fondo que decidieron el cese persisten y se han visto confirmadas y consolidadas con los elementos conocidos con posterioridad”. El Confidencial se puso en contacto con Interior para conocer a qué se refería con esos elementos conocidos con posterioridad, pero se remitieron a las palabras que el ministro daría en el Senado, donde no desarrolló esta idea.

placeholder El entonces coordinador del dispositivo policial del 1-O, Diego Pérez de los Cobos, durante el juicio. (EFE/Mariscal)
El entonces coordinador del dispositivo policial del 1-O, Diego Pérez de los Cobos, durante el juicio. (EFE/Mariscal)

Ha sido un día después, en el Congreso, donde el ministro ha introducido el empleo de los fondos reservados como motivo de la desconfianza hacia Pérez de los Cobos. Estas partidas económicas ya fueron motivo de disputa entre Interior cuando Grande-Marlaska llegó al cargo en 2018. Ordenó congelarlas a la espera de estudiar el uso que se había hecho de ellas. Eso provocó que el dinero no llegase a las unidades investigadoras y el responsable de la Unidad Central Operativa (UCO), Manuel Sánchez Corbí, remitió un correo interno a sus subordinados en el que les indicaba que frenaran sus actuaciones hasta la remisión de los fondos. La publicación de esa comunicación en la prensa provocó que el ministro optara por cesarle.

Antes de eso, Grande-Marlaska ya había generado malestar en la Guardia Civil al alterar el statu quo arraigado en el ministerio con la decisión de apartar al Cuerpo del Gabinete de Coordinación y Estudios —puesto clave en el diseño de las estrategias de seguridad a largo plazo—. Históricamente en manos de un miembro del Instituto Armado, Grande-Marlaska optó por ponerlo en manos de un comisario de la Policía Nacional.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dado un paso más en su pulso con el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos. Un día después de que el Tribunal Supremo anulase su cese dictado en 2020 por no informar a sus jefes políticos de una investigación judicializada, el ministro ha sembrado sobre el mando la sospecha a cuenta del caso Kitchen y el mal uso de los fondos reservados. Esas partidas económicas eran competencia del Gabinete de Coordinación y Estudios que Diego Pérez de los Cobos dirigió con varios ministros, incluido el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, coincidiendo con los últimos años del terrorismo de ETA.

Fernando Grande-Marlaska
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