Ordenan arrestar a dos banqueros suizos por un fraude millonario a la Hacienda española

La Audiencia Nacional ha dictado sendas órdenes de busca y captura internacional contra dos banqueros suizos por su papel en una trama acusada de defraudar más de 40 millones de euros a la Hacienda española en apenas un año. La medida se adoptó el pasado martes después del intento fallido de notificarles su procesamiento en un caso en el que ya hay decenas de personas a la espera de sentarse en el banquillo de los acusados para ser juzgadas. Los dos buscados son Manuel Andreas Marco Brandenberg y Nathan Rothschild. La Fiscalía pidió para ellos cuatro años y medio de cárcel por falsedad, blanqueo de capitales y asociación ilícita.

La investigación tiene su origen en la compra de hidrocarburos y el fraude en torno al IVA de las operaciones en este sector. El epicentro fue una empresa llamada Lexin Corporación 21 SL, creada en 2010 con sede en Madrid. En apenas unos meses, experimentó dos ampliaciones de capital hasta contar con un capital social de tres millones, el mínimo que exige el Gobierno en España para poder operar en el sector de los hidrocarburos. Las autoridades creen que lo hizo usando empresas pantalla, facturas falsas y sin depositar realmente el dinero exigido.

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Lexin fijó su sede en Pamplona y estuvo activa en el mercado de los carburantes en España desde abril de 2011 hasta el 11 de abril de 2012, cuando fue intervenida judicialmente. "La suma total defraudada por Lexin Corporación 21 SL asciende finalmente a 42.782.507 euros", concluye un informe, elaborado por la Hacienda Tributaria de Navarra, que obra en la causa a la que ha tenido acceso El Confidencial. Al mismo dato llega la Fiscalía tras una investigación en la que intervino la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.

La operativa tiene ramificaciones internacionales, ya que el dinero luego era sacado de España o reinvertido en bienes inmuebles para ser introducido en el circuito legal. "Nathan Rothschild y Manuel Brandenberg participan en la transferencia de fondos que formarían parte de la operativa desarrollada por la organización, siendo transferidos desde Rothinvest Capital Inc a mercantiles que son tituladas de nuevo por los verdaderos responsables de la trama", dice la Audiencia Nacional en un auto de 2020 en el que mandó a juicio a medio centenar de personas y sociedades. A lo largo de 68 páginas, recoge las acusaciones de la Hacienda Tributaria de Navarra, la Abogacía del Estado y la Fiscalía. Rothschild es un nombre muy conocido en los ámbitos de la banca, pero esta persona no guarda relación con Nathaniel Philip Victor James Rothschild, hijo del cuarto Barón Rothschild, ajeno a esros hechos, según informan fuentes cercanas a la familia.

Un tercer banquero ha aparecido

Han pasado algo más de dos años desde el auto apertura de juicio oral y la Audiencia Nacional todavía no había logrado notificar su procesamiento a tres personas, para lo que dictó una primera orden de arresto en noviembre. El tercero, otro banquero con residencia en Suiza, ha logrado la semana pasada que se le retire esa petición tras presentarse voluntariamente a declarar. Defendido por el despacho Ospina Abogados, penalistas expertos en extradición, llegó a un acuerdo tanto con la Fiscalía como con las autoridades suizas para desplazarse a España sin ser arrestado.

En cambio, los otros dos no han comparecido en el Juzgado Central de Instrucción número 4, que dirige el magistrado José Luis Calama. Tampoco lo han hecho ante un notario en su país, alternativa que les propuso la Justicia para no tener que desplazarse a España. La Fiscalía denuncia que esto "genera un inaceptable retraso en la tramitación de la causa". "El intento de notificación del mencionado auto y de los escritos de acusación, a través de una comisión rogatoria a Suiza, no ha dado, por diversas razones, el fruto esperado, esto es, una notificación pronta que contribuya o al menos no dificulte el derecho del resto de acusados y demás partes a que el procedimiento se solvente en un plazo razonable", dice el ministerio público.

"Es palmario —concluye la Audiencia Nacional— que frente a esta última alternativa, ofrecida a los acusados a fin de cumplir con trámite procesal en cuestión, no cabe oponer obstáculo alguno, salvo, claro está, una absoluta y demostrada mala fe procesal, cuyo fin último es dilatar, aún más, el curso del procedimiento, evitando a toda costa su enjuiciamiento (...) la férrea contumacia de los acusados representa ya el riesgo de fuga exigido, al constituir una manifestación expresa de su voluntad de quedarse al margen de la Justicia española".

Respuesta de los buscados

Este periódico ha tenido acceso al recurso presentado por Nathan Rothschild en diciembre. Niega tratar de dilatar el proceso y culpa a los errores formales de la comisión rogatoria remitida por España para notificarle. Una de las cuestiones que alega es que todavía no le ha sido traducida al alemán, que es su lengua. Rechaza también que esté tratando de evadirse de la Justicia española y para ello destaca que ya declaró como investigado en la causa y que lleva seis años sin cambiar de domicilio en Zúrich. Por su parte, el 22 de diciembre, Manuel Andreas Marco Brandenberg también presentó un escrito en el que se adhería a los mismos argumentos esgrimidos por Nathan Rothschild.

Sus argumentos no han dado resultado. El pasado 23 de enero, el juez ha dictado un auto en el que confirma su decisión de noviembre, cuando acordó la prisión provisional, así como emitir "requisitorias de búsqueda, detención e ingreso en prisión, y órdenes europeas e internacionales de detención". Todo ello para notificarles auto de apertura de juicio oral y hacerles entrega de los escritos de acusación del Ministerio Fiscal, abogado del Estado y Hacienda Tributaria de Navarra. El juez Calama retira esa petición para el tercer banquero, "manteniéndose todos y cada uno de los pronunciamientos acordados respecto de Manuel Andreas Marco Brandenberg y Nathan Rothschild".