El PP plantea una ayuda fiscal de 750 euros para hipotecas de rentas de hasta 40.000 euros

El PP ha desgranado este lunes su propuesta para aminorar el impacto de la subida de los tipos de interés en las hipotecas. La medida estrella de los populares, que anunció Alberto Núñez Feijóo hace unos días, pasa por recuperar la deducción en el IRPF por compra de vivienda habitual para hipotecas ya firmadas, una iniciativa que eliminó Mariano Rajoy en 2012. Según ha detallado el vicesecretario económico del PP, Juan Bravo, la figura tendría un carácter temporal -sólo se aplicaría, en principio, durante 2023 y 2024- y permitiría descontarse de la declaración de la renta un máximo de 750 euros, según los cálculos de los populares.

Génova quiere que puedan beneficiarse de esta propuesta las rentas de hasta 40.000 euros, aunque no descartaría ampliar la propuesta a los núcleos familiares que ingresen hasta 60.000 euros. Para aminorar el impacto del incremento del precio de la vivienda, el PP propone también alargar la vida de las hipotecas para bajar la cuota y facilitar el pago a aquellas familias con mayores problemas de liquidez. El partido plantea también que, en los casos más extremos, se estudie una quita de la deuda de las familias o implementar la dación en pago para que el deudor no deba aportar más del valor de la vivienda tras la entrega de la misma. En suma, el PP plantea recuperar y "mejorar" el Código de Buenas Prácticas que implementó Mariano Rajoy en 2012, con el objetio de "ayudar a las rentas más vulnerables".

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Ana Belén Ramos

Bravo ha insistido en la creación de un fondo con participación del Gobierno y de la banca para desarrollar todas estas propuestas, de modo que las entidades financieras canalicen sus beneficios extraordinarios para ayudar a los más afectados por la emergencia económica y energética. El vicesecretario económico de los populares ha asegurado que Génova ha contactado con algunas entidades financieras para asentar la viabilidad de su propuesta, si bien apunta que esos contactos debería realizarlos el Ejecutivo.

En este punto, Bravo ha instado al Gobierno a buscar "consensos" con la banca, y no "culpables" por la situación económica, en alusión al impuesto a la banca que el Ejecutivo prevé aprobar antes de fin de año pese a las advertencias del Banco Central Europeo. "El coche que avanza en la dirección contraria es el de Sánchez, no todos los demás", se despachaba.

A diferencia de otras ocasiones, el PP ha decidido que no remitirá su propuesta por escrito a la Moncloa, como sí ha hecho Feijóo en otras ocasiones con el plan económico o el judicial. El partido asegura que se ha cansado de que el Gobierno no mande "ninguna respuesta" a los sucesivos documentos que ha ido enviando Génova, de modo que las propuestas que se anuncien a partir de ahora tendrán un carácter exclusivamente verbal. El PP enfriará, así, los intentos de interlocución con el Ejecutivo, una circunstancia que llega después de la ruptura flagrante de negociaciones para renovar el Poder Judicial.