Multan a una mujer tras averiguar por el ADN que no recogió del suelo la caca de su perro

Una vecina de Paterna (Valencia) ha sido multada por el Ayuntamiento de Benalmádena (Málaga) después de descubrir que su perro, de raza bull terrier, defecó en una calle de este municipio malagueño el pasado mes de agosto y no recogió el excremento.

Este curioso procedimiento se debe a que ambos ayuntamientos han cruzado sus bases de datos de ADN canino lo que permite conocer la identidad de los propietarios de los mascotas que hacen sus necesidades en la calle y no son recogidas.

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La mujer ha sido notificada por una infracción a las ordenanzas locales por la que se le impondrá una multa de entre 75 y 500 euros, según informa la empresa encargada de este tipo de análisis.

Combatir el abandono y el maltrato

"El censo genético canino complementa al necesario registro mediante microchip y permite mantener un mejor control de los perros en el ámbito nacional, independientemente de la localidad, provincia o comunidad autónoma de la que proceda el animal", aseguró en declaraciones a EFE Enrique Perigüell, responsable de la empresa ADN Canino, encargada de suministrar el servicio a más de 20 ciudades españolas.

Más allá de su carácter disuasorio, con el que se intenta "reducir las cacas de perro en las calles", este sistema de registro genético canino sirve para "combatir el abandono o el maltrato animal".

Se trata de un sistema disuasorio, con el que se intenta “reducir las cacas de perro en las calles”

El municipio valenciano de Paterna implantó este sistema el pasado mes de septiembre y la propietaria del bull terrier dio de alta a su perro el 30 del mismo mes. Algo curioso ya que los hechos ocurrieron el pasado 26 de agosto en la calle Navarra de Benalmádena, a 640 kilómetros de Paterna. Por su parte, el ayuntamiento de Benalmádena lleva utilizando el sistema del ADN canino desde hace 5 años.