Iglesias asume que la investidura se retrase a enero para respetar los tiempos de ERC

El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ya no descarta que la investidura de Pedro Sánchez se pueda ir a enero, en lugar de celebrarse antes de que finalice el año como deseaban tanto morados como socialistas. Optimista, pero "prudente" e introduciendo matices, Iglesias ha reconocido que los tiempos no dependen ni de Podemos ni de PSOE. "Somos conscientes de lo que implica una negociación con diferentes actores políticos y no podemos decidir unilateralmente los tiempos", ha explicado Iglesias en comparecencia ante los medios en el Congreso tras entrevistarse con el Felipe VI dentro de la ronda de consultas para la investidura.

Para Iglesias tanto socialistas como republicanos tienen voluntad de llegar a un acuerdo y ha destacado que tiene la sensación de que están esforzándose y trabajando en la buena dirección. Si bien entiende que todas las posibilidades están abiertas, ha subrayado que "lo importante es que haya acuerdo" y "si tiene que ser en enero pues que sea en enero". En esta línea ha añadido que si el acuerdo "no llega cuando nosotros querríamos, deberíamos ser pacientes" y que "hay que respetar los tiempos" marcados por las formaciones implicadas en las negociaciones, en referencia a ERC.

Alberto Garzón, líder de Izquierda Unida, se mostraba esta mañana un tanto más optimista al asegurar que solo faltaba por cerrar "algunos flecos" en las negociaciones. Asimismo, indicaba que "no concebimos que fracase ninguna negociación", al tiempo que hacía un llamamiento a la población catalana independentista a que tengan en cuenta que lo que le ofrecen es un "terreno de juego favorable para el diálogo". El portavoz de los comuns, Jaume Asens, lazaba por su parte alguna señal de alerta al advertir que "el tiempo corre en contra" del acuerdo.

En lo que respecta al acuerdo programático entre PSOE y Unidas Podemos, el documento estaría ya prácticamente perfilado, a la espera de cerrar solo algunos detalles menores. Un documento sobre el que se basaría la acción del próximo Ejecutivo, de salir adelante, y que sus protagonistas tienen pensado hacer público antes de que se celebre la investidura. La composición del próximo Gobierno, con todo su organigrama, no se hará público en cambio hasta después de la investidura. De este falta por determinar si finalmente serán tres o cuatro las carteras que corresponderán a Unidas Podemos, además de la vicepresidencia social que estará bajo la batuta de Pablo Iglesias.

"Somos conscientes de lo que implica una negociación con diferentes actores políticos y no podemos decidir unilateralmente los tiempos"

El pasado jueves, el líder de Unidas Podemos acudió al Palacio de la Moncloa para reunirse con Sánchez y dar un empujón a las negociaciones, ya muy avanzadas. Durante los últimos días habían sido sus respectivos equipos, encabezados por la socialista María Jesús Montero y el dirigente morado Pablo Echenique, quienes habían intercambiado diferentes documentos para definir el programa de Gobierno. Para ello han partido de la base del pacto presupuestario que Sánchez e Iglesias ya firmaron en octubre del pasado año.

De salir adelante la legislatura, Iglesias ha apostado, y así se lo ha trasladado a Felipe VI, por una legislatura de "constitucionalismo democrático". Esto es, que se apliquen los artículos sociales de la Constitución "que no se apliquen para proteger a las mayorías sociales". Otro de los retos que ha señalado es el "diálogo". En un contexto si mayorías absolutas y un Congreso fragmentado, Iglesias ha incidido en la necesidad de buscar entiendimientos con otras fuerzas políticas.