Íñigo Errejón cede a IU el número dos de su lista (Sol Sánchez) obligado por la dirección

La número dos de la lista de Íñigo Errejón para las elecciones a la Comunidad de Madrid será Sol Sánchez, de Izquierda Unida, por lo que se desplazará al tercer puesto a Clara Serra, actual portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid y segunda más votada en las primarias de Podemos, tras un principio de acuerdo alcanzado entre ambas organizaciones, según ha podido saber este diario. La formación liderada por Alberto Garzón también tendría asegurado el 25% de los puestos en la lista electoral considerados de salida (un total de seis de 30, según sus cálculos). Este "principio de preacuerdo", según lo rebajan desde la dirección autonómica de IU, llega después del ultimátum de esta formación de cerrar su propia candidatura para tener previsto un plan B ante la posibilidad de que fracasase la unidad popular, lo cual todavía no está descartado, y este mismo lunes se planteará en la reunión de la dirección colegiada.

Desde el equipo de Errejón, con afines presentes en la reunión, se ha mostrado resistencia a los términos de este principio de preacuerdo y niegan que se haya ratificado a Sánchez como número dos. Confían, sin embargo, en que haya un acuerdo con IU, pero sin que ello signifique desplazar a la actual portavoz parlamentaria de Podemos al número tres para ceder su puesto a IU.

Desde el equipo de Errejón, presente en la reunión, se ha mostrado resistencia a los términos de este preacuerdo y confían en mantener a Serra de dos

La dirección de Izquierda Unida se ha dado un plazo de 72 horas para cerrar todos los flecos pendientes y que este preacuerdo se convierta en un acuerdo, aunque de alcanzarse posteriormente todavía tendría que ser ratificado por las bases. El elemento más importante, y sobre el que se vertebraría la posibilidad del acuerdo, según fuentes de la dirección de IU, es "desatascar la situación en el resto de municipios madrileños". Su objetivo es que en aquellas localidades donde estén bloqueadas las negociaciones o no haya posibilidades de acuerdo entre las correspondientes direcciones se solvente este escenario mediante "primarias proporcionales". "Si los acuerdos en los municipios no se desbloquean, es imposible que se cierre un acuerdo autonómico", añaden estas mismas fuentes.

El compromiso de ambas partes pasa, efectivamente, por buscar "fórmulas de desbloqueo" allí donde todavía no se hayan alcanzado acuerdos para concurrir juntos a las elecciones municipales. Sin embargo, en Podemos se dejan abiertas estas fórmulas a la espera de discutirlas, sin limitarse a unas primarias conjuntas. Eso sí, su voluntad es llevar el acuerdo autonómico para concurrir juntos a las elecciones "hasta el último municipio de Madrid".

Podemos tiene previsto someter este acuerdo a un proceso de doble ratificación. Primero en los órganos de dirección y posteriormente, a nivel de sus bases, cuando se cierren todos los flecos. Una "ratificación popular", sin cerrar la puerta a que sea conjuntamente con IU. El propio acuerdo pretende convertirse en el primer hito de la campaña electoral de Unidos Podemos, a la espera de seguir confeccionando el contenido programático, que se centrará en recoger las medidas que se están debatiendo con otras organizaciones, sindicatos y organizaciones de la sociedad civil en el espacio denominado Hacer Madrid.

Ambas organizaciones han coincidido en reforzar y seguir impulsando este foro programático para hacer lo más participativas posible y seguir afianzando la confluencia y la unidad popular desde ahí, tanto a nivel autonómico como en el resto de municipios madrileños. Una vez cerrado y aprobado el acuerdo definitivo, se formarán los equipos de campaña, para lanzar la candidatura con la que Unidos Podemos concurrirá a los comicios del próximo 26 mayo lo antes posible. Asimismo, se tiene previsto intentar cerrar un acuerdo conjunto en los próximos días con la candidatura liderada en el Ayuntamiento de Madrid por Manuela Carmena, después de que se hayan acercado posturas durante las últimas semanas y todos los actores compartan la máxima de que tienen que concurrir en una lista unitaria.