El PSOE pide a Cs la abstención y le acusa de tener una relación "sadomaso" con el PP

La dirección del PSOE tiene claro que ni la crisis en Madrid ha terminado tras la dimisión de Cristina Cifuentes ni por supuesto va a soltar la presa y va a pasar a otro capítulo. Entiende que el episodio ha marcado un punto de inflexión definitivo y puede ayudarle a acotar el terreno respecto a Ciudadanos, a quien acusa de actuar de flotador del PP, de "legitimar" su corrupción, de tener incluso una relación "sadomasoquista" con él, de querer ser a la vez socio de gobierno y oposición. La estrategia pasa por intentar mantener el pie en el cuello de Albert Rivera, recordándole a la vez que tiene una oportunidad de oro de tomar distancia con los populares, absteniéndose simplemente en la investidura de Ángel Gabilondo.

No por el portazo de Rivera a Pedro Sánchez de ayer el PSOE va a dejar de martillear con su mensaje, a degüello contra Cs. Todo lo contrario. Como dijo este jueves el secretario de Organización, José Luis Ábalos, el escenario ha cambiado, puesto que al renunciar Cifuentes a la presidencia de la Comunidad de Madrid, decae la moción de censura y se abre un proceso de investidura de un nuevo jefe del Ejecutivo autonómico, en el que de nuevo los naranjas habrán de retratarse. De hecho, Gabilondo se ofreció formalmente este jueves como candidato, tal y como ya había avanzado Sánchez ayer.

"No ha terminado nada, el escándalo sigue [...]. Vamos a una investidura y la manejamos en los mismos parámetros, la necesidad de regenerar la vida democrática en Madrid y que haya un partido que oxigene y abra un nuevo tiempo", sostuvo Ábalos. Y como hay un "candidato limpio" sobre la mesa, el de Gabilondo, que además cuenta con el apoyo de 64 diputados de partida (los 37 del PSOE y los 27 de Podemos), lo que debería hacer Ciudadanos, a juicio de Ferraz, es abstenerse. "No tiene por qué optar por un proyecto podrido y en descomposición. No hace falta salvo que quiera ser lo mismo y formar parte de lo mismo. Tampoco hace falta que nos apoye, si es que le revuelve hacer eso". Así que "lo que tiene que hacer es no apoyar a nadie, reservarse" hasta las elecciones de 2019. Por tanto, habría tres opciones: o apoyar a los populares, y en ese caso tendrá "muy difícil distanciarse" de la corrupción del PP, apoyar la de Gabilondo o no apoyar ninguna. Es decir, abstenerse. Con eso bastaría para que la designación del exministro como presidente regional prosperase en segunda vuelta.

Ábalos le dice a Cs que no tiene por qué apoyar un PP "podrido y en descomposición", ni votar a Gabilondo... basta con que se "reserve" para 2019

El responsable de Organización condenó el argumento utilizado por Cs para rechazar siquiera una conversación con Sánchez: alegó que para 2019 los madrileños podrán optar por un proyecto "nuevo, limpio e ilusionante", el suyo. Y para el PSOE eso es tanto como reconocer que ahora no habrá "limpieza", que se dice a los ciudadanos que han de "sufrir la suciedad" hasta los próximos comicios, y todo por mantener intactas sus "expectativas electorales". Pero apoyar ahora a un diputado regional del PP como presidente es "legitimar lo que ha ocurrido", "todos los escándalos que han jalonado la Comunidad de Madrid todos estos años". En resumen, se trata de "dar por bueno todo lo ocurrido o dar una oportunidad a la democracia", elegir "entre el fatalismo y la esperanza".

TE PUEDE INTERESAR

Ferraz cree haber logrado "retratar" a Rivera tras su negativa a apoyar a Gabilondo

Juanma Romero

El momento es "ahora"

Para Ferraz, el intento de conversación entre Sánchez y Rivera no llegó "tarde". "Ahora es el momento", subrayó Ábalos, porque es cuando se abre la ronda de contactos para propiciar una nueva investidura y porque se ha cubierto una etapa, la de la moción de censura a la que nunca se llegó a poner fecha porque antes se precipitó la caída de Cifuentes. El número tres aprovechó entonces para reclamar el escaño a la ya expresidenta regional, porque lo que "es impresentable, es impresentable", al margen del cargo público que se ejerza. Otra cosa es que el PP le permita seguir al frente del partido en Madrid: "Es cosa de ellos", de si consideran que la exjefa del Ejecutivo autonómico puede seguir "interlocutando" con la sociedad.

Ferraz reprocha a Cs que pretenda ser a la vez "socio de gobierno y oposición", que queda "muy bonito para el espectáculo", pero "no es coherente"

Cs intenta "no acabar arrastrado" tras el lodo del PP, siguió Ábalos, pero "son muy incoherentes". El número tres puso el ejemplo de lo ocurrido este mismo jueves en el Congreso: Rivera criticó duramente a Hacienda por los Presupuestos de 2018, pero finalmente votó con el Gobierno para rechazar las enmiendas de totalidad. Tiene una especie de "relación sadomasoquista", dijo, ya que pretende ser al mismo tiempo "socio y oposición". Eso condena al resto de la población "a pagar el coste de esa relación". "Queda muy bonito para el espectáculo, pero no es coherente: o se apoya o no se apoya". "Cuando se establecen acuerdos, hay una cosa que es la lealtad, y no es lo que más cultiva Cs".

A juicio de los socialistas, lo que buscan siempre los naranjas es colgarse "medallas". Pero con la caída de Cifuentes, apuntó, no pueden adjudicarse "ninguna", puesto que la verdadera presión la puso el PSOE al presentar una moción de censura que tenía un marco temporal: había de debatirse antes del 7 de mayo. Y ahora "los que quisieron ponerse la medalla" de la revalorización de las pensiones, "se han quedado cortitos", porque finalmente eso se lo arrancó el PNV al Gobierno.