Interior blinda con 1.600 policías las uvas y la Cabalgata para evitar atentados

El Ministerio del Interior pondrá toda la carne en el asador en Madrid durante los días clave de la Navidad. Por orden del departamento dirigido por Juan Ignacio Zoido, la Delegación del Gobierno reforzará la presencia policial en los momentos y lugares donde se producirá más concentración de personas durante las próximas jornadas, como la Nochevieja en la Puerta del Sol, carrera popular San Silvestre Vallecana y la Cabalgata de Reyes por todo su recorrido.

En concreto, 800 efectivos -400 de la Policía Nacional y 400 de la Policía Municipal de Madrid- velarán por la seguridad durante la celebración de las campanadas en la Puerta del Sol, cuyo aforo volverá a estar limitado como el año pasado a 25.000 personas, lo que significa 2,6 individuos por metro cuadrado. A este número de agentes se sumarán los miembros de Protección Civil y Bomberos que estarán desplegados en la zona con el fin de complementar las labores de seguridad.

La Delegación del Gobierno coordinará un ensayo de las campanadas un día antes de Nochevieja con el fin de poner a prueba a los diferentes cuerpos y engrasar la maquinaria de seguridad que se desplegará durante las uvas. El 31, la plaza será desalojada a las 21.30 horas y únicamente se podrá acceder a la Puerta del Sol a través de las calles Mayor, Arenal, Carrera de San Jerónimo y Alcalá, entradas que estarán controladas por la Policía Nacional. Las calles Preciados, Carmen y Montera no podrán ser utilizadas para acceder debido a que las fuerzas de seguridad las mantendrán como vías de evacuación en caso de necesidad.

En la San Silvestre Vallecana, por otro lado, que tendrá lugar esa misma noche, un dispositivo de 300 agentes pondrá orden en el recorrido de la carrera popular más importante de España. Un centenar de funcionarios de la Policía Nacional y 200 efectivos de la Policía Municipal se distribuirán en la salida, la llegada y durante todo el trayecto apoyados por 50 miembros del Samur con el fin de atender a los corredores y velar por la seguridad.

El despligue policial para la noche de Reyes será el más complejo, dada la enorme afluencia de público, el largo recorrido y la gran cantidad de cabalgatas que se desarrollan en la capital de España. Además de la principal, que pasará por el paseo de la Castellana, otras 11 comitivas de magos de oriente transitarán por otros tantos distritos madrileños. Todas ellas serán protegidas por 800 efectivos (400 de Policía Nacional y 400 de Policía Municipal), entre los que habrá guías caninos, caballería, agentes que controlan el subsuelo y funcionarios que vigilarán desde helicópteros. Además, 300 miembros del Samur atenderán a posibles heridos.

Todo este refuerzo de personal policial para estos días de Navidad es consecuencia del nivel 4 de alerta antiterrorista reforzado que ha sido establecido por el Ministerio del Interior, que se ratificó en el mismo después del atentado de Berlín del pasado 19 de personas, cuando un camionero atropelló a una multitud de personas en un mercadillo y mató a una docena de ciudadanos.

"Estoy convencida de que entre todos lograremos que los últimos atentados no condicionen nuestra forma de vivir estas fiestas y que las recomendaciones que los agentes nos transmitan serán bien recibidas por la ciudadanía", ha dicho esta mañana la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, durante la reunión de coordinación del dispositivo de seguridad. "Tras el último atentado de Berlín, las medidas de prevención son fundamentales (...), aunque no hay ninguna amenaza concreta en este momento que nos lleve a modificar los operativos previstos", ha incidido.

Los atentados de Berlín provocaron también que la Comisaría General de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional emitiera una circular a todas las jefaturas de España con el fin de que éstas controlaran las zonas donde se iba a producir una gran acumulación de personas -fundamentalmente las cabalgatas y la celebración de las campanadas de fin de año- y las acotaran con macetones o elementos que impidieran el acceso de vehículos como el que protagonizó el atropello masivo de la capital alemana.