El juez ordena detener al presidente de Fergo Aisa por negarse a declarar cuatro veces

Se excusó de su primera cita con el titular del juzgado de Instrucción 22 de Barcelona porque se encontraba en Málaga, y el juez pospuso su declaración para dos semanas después. Pero la víspera de la fecha fijada, presentó un nuevo escrito para que se volviera a posponer. El magistrado, comprensivo, volvió a darle otras dos semanas. Llegado el momento, tampoco compareció porque, afirmó, seguía en la capital andaluza. Por tercera vez, el instructor le dio otro plazo de dos semanas para que se presentara el 16 de marzo ante él. Llegado ese día, tampoco si apareció. Y no dio ningún motivo. El magistrado se ha hartado y ha ordenado la detención de Carlos Fernández, el que fuera presidente de la inmobiliaria Fergo Aisa. El mismo que vendió 600.000 acciones de esa sociedad por casi 20.000 euros ocultando a los inversores que se encontraba prácticamente quebrada.

La querella fue presentada por el abogado Felipe Izquierdo a título personal al sentirse engañado por el consejo de administración de la sociedad. Izquierdo adquirió las acciones el 12 de febrero de 2012, "en un momento en el que la sociedad estaba inactiva y en situación de insolvencia", según relató el juez en el auto con el que inició su investigación. En su querella, el letrado relataba que Fergo Aisa presentaba entonces "una imagen económica y patrimonial muy distante a la realidad", es decir, a la suspensión de pagos. Había anunciado la construcción de 20.000 viviendas en Colombia y otras 18.000 en Irak.

"No nos hallamos ante centenares de accionistas que han sufrido la pérdida de su inversión a causa de la crisis mundial y la caída de los mercados, sino ante una estafa monumental orquestada por el presidente dela sociedad y el resto de querellados, como pone de manifiesto el informe de la administración concursal", relataba la querella. Ese documento, según Izquierdo, aseguraba que la empresa estaba prácticamente sin actividad desde 2010, es decir, dos años antes de que el querellante adquiriera los títulos.

Dos meses largos después de esa compra-venta de acciones, el 20 de abril de 2012, la cotización de la inmobiliaria fue suspendida sin que sus accionistas, Izquierdo entre ellos, pudieran vender sus títulos. En julio de 2013, un juzgado de lo mercantil de Barcelona declaró el concurso necesario de la inmobiliaria. En julio de 2015 el administrador concursal de Fergo Aisa solicitó que el concurso fuera declarado culpable y que se reclamara un total de 133 millones de euros a Carlos Fernández y el resto del consejo. El déficit concursal se situó en 221 millones de euros.

La querella se presentó inicialmente en la Audiencia Nacional, que la remitió a los juzgados de Instrucción de Barcelona por falta de competencia. Entre los querellados, además de Fernández, se encuentran el resto de miembros del consejo de administración. El titular del juzgado de Instrucción 22 de esa capital, Juan Emilio Vila Tamayo, la admitió a trámite el pasado 21 de julio. En su auto de ese día, el juez consideró que los hechos denunciados podrían ser constitutivos de delitos de falsedad de la información económico-financiera y advirtió de la incidencia, que esa presunta falsedad pudo tener "en la formación de la base objetiva y subjetiva del negocio jurídico que suscribió el querellante".