El avión medicalizado partirá de Liberia a medianoche con el enfermo de ébola

El avión medicalizado que aterrizó en Liberia sobre las 19.00 horas de España para iniciar las labores de repratiación del religioso Miguel Pajares, infectado por el virus del ébola, tiene previsto aterrizar de madrugada en Madrid con él y con la monja Juliana, que dio negativo en las pruebas.

El aparato, que había despegado de la base aérea del Torrejón de Ardoz (Madrid) a las 13.20 horas de hoy, está preparado con todas las medidas médicas y de seguridad para evitar contagios entre la tripulación y el personal médico que ha viajado al país africano.

El sacerdote permanece aislado en el hospital San José de Monrovia, en Liberia, junto a otras cinco personas de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD) tras confirmarse que tiene ébola. La repatriación, según señalaron fuentes del Ministerio de Sanidad -que explicaron que los riesgos de un posible contagio son "muy bajos"- se hará de acuerdo con los protocolos de máxima seguridad estipulados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Tras conocer ayer el diagnóstico, la Orden religiosa del español solicitó la repatriación, que se decidió en una reunión en la que han participado los ministerios de Sanidad, Defensa e Interior, y en la que han participado también representantes de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

Pajares, toledano y de 75 años, permanece aislado desde el pasado viernes en el citado centro hospitalario, cerrado después de la muerte de su director, el hermano Patrick Nshamdzea, a quien el religioso español cuidó. La organización Juan Ciudad ONGD, que está informando de la situación de los religiosos afectados, informó de que también han dado positivo en el test del virus de ébola las hermanas misioneras de la Inmaculada Concepción Chantal Pascaline Mutwamene (congoleña) y Paciencia Melgar (guineana) y que la situación de las seis personas aisladas es "grave".

Por el contrario, se ha descartado que la hermana Juliana Bohi, de origen guineano y con pasaporte español, presente los síntomas característicos del ébola y su estado ha mejorado.