El Ayuntamiento no desalojó anoche Sol porque ya es un problema de "orden público"

El Ayuntamiento de Madrid no solicitó anoche a la Delegación de Gobierno que se procediera al desalojo de las 4.000 personas que ocuparon la Puerta del Sol para acampar y pasar la noche. Entiende que al tratarse de tanta gente ya es un problema de "orden público" y quien debe intervenir, en  este caso, es la Policía Nacional.

Fuentes municipales han precisado que a "la vista de toda la gente que se reunió en Sol y previendo que hoy se concentre el mismo número o más gente, el problema ha trascendido de ser ocupación de espacio público a ser problema de orden público". Quien tiene que intervenir ahora es la Policía Nacional, por lo que el Ayuntamiento de Madrid, a partir de ahora, asegura que se pone a disposición de la Delegación de Gobierno en Madrid para actuar en cualquier intervención el caso de que así se decida.

Los manifestantes, convocados espontáneamente a través de la red social Twitter, intentaron en la noche del pasado lunes acampar en la madrileña plaza de la Puerta del Sol, pero fueron desalojados por la Delegación por ser una ocupación ilegal de la vía pública.

Esta pasada noche, sin embargo, los manifestantes han podido acampar de forma pacífica. y han amanecido con sus reivindicaciones de mostrar a la clase política su rechazo en la gestión del país.

La Puerta del Sol, la Plaza 'Solución'

Reconvertida en la ‘Plaza Solución’, unos doscientos jóvenes se resistían a las 11.00 de la mañana a abandonar el Kilómetro Cero. Su objetivo es no moverse de allí hasta el 22-M, pero después de la Asamblea que terminó a las 5 de la mañana, todavía no se habían puesto de acuerdo en casi nada. Reclaman un mundo mejor, pero nadie aporta propuestas para el cambio.

En mitad de la plaza, un grupo de una veintena de personas se encargaba de las comisiones. Ya se había levantado la lona que cubría el botiquín, objetos perdidos, coordinación interna y un área de comunicación. Otros pintaban con rotuladores cartones que levantarían los nuevos mensajes que quieren vitorear esta tarde a las 8, hora en la que está programada la siguiente manifestación. Nadie, sin embargo, se atreve a hablar en nombre de todos. Un portavoz insiste en que se han organizado de manera espontánea, rehuye del nombre de cualquier plataforma y remarca que ni él ni nadie son líderes. “Somos los que estamos, cada uno a título personal, y punto”.

No disponer de una cabecera clara distorsiona el mensaje que quieren hacer llegar. ¿Abstención para el 22-M? “Yo voy a ir a votar. Todos tenemos derecho de ejercer nuestro voto”. ¿Pero no votar ni al PP ni al PSOE? “Cada uno que vote a quien crea más oportuno. O que se abstenga”. Algunos han reclamado esta noche llegar hasta el Congreso de los Diputados y entregarles un papel con sus propuestas. Otros, sin embargo, exigían que sus súplicas debían cumplirse y punto.

El mensaje, sin embargo, sigue siendo demasiado utópico y no hay propuestas de cambio. “Estamos aquí porque queremos una sociedad nueva que dé prioridad a la vida por encima de los intereses económicos y políticos”. Abogan un cambio en la sociedad y la conciencia social, pero tampoco tienen claro todavía cuál es el camino de ese cambio.