Así cambian las prácticas en empresas con el Estatuto del Becario: límites, salario, cotización y sanciones

Tras más de un año de negociaciones, el Ministerio de Trabajo y los sindicatos alcanzaron un acuerdo el lunes, 5 de junio, sobre el Estatuto del Becario (recogido en la última reforma laboral) y que verá la luz de forma “inminente”. El nuevo texto, que ha sido suscrito este jueves, día 15, recoge, entre otras novedades, la definición clara de las prácticas, la compensación de gastos o el establecimiento de un régimen sancionador. En el acto de firma del acuerdo, del que la patronal CEOE se ha descolgado, Díaz ha destacado que se "da luz a zonas en las que se permitían todo tipo de abusos" y se establecen los derechos y obligaciones necesarias para expulsar del sistema las "prácticas fraudulentas", en sintonía con declaraciones de las que se hace eco la agencia EFE.

El acuerdo "permite cerrar el círculo de la formación de calidad y el empleo digno para las personas jóvenes", ha destacado asimismo Díaz. "Se ha acabado el tiempo de usar a los jóvenes como asalariados fantasmas", ha subrayado también la vicepresidenta segunda, que ha lamentado la ausencia de la patronal en el acuerdo. En sintonía con lo que también ha defendido el secretario general de CCOO, Unai Sordo, "las prácticas no deben ser una excusa para el abuso o para cubrir puestos de trabajo". Ahora todos esperan el siguiente paso, es decir, cuándo podrá ir la norma al Consejo de Ministros para ser publicada, para lo que Trabajo todavía no ha dado ninguna fecha, aunque fuentes sindicales confían en que se apruebe de forma urgente y se haga antes de la celebración de las elecciones del próximo 23 de julio.

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Por su parte, la patronal, que no se ha sumado a este acuerdo por diferencias sobre las prácticas extracurriculares, discrepa y afirma que aprobar esta regulación en situación de adelanto electoral “no tiene sentido”, algo a lo que se suma Borja Semper, portavoz del Partido Popular, que asegura que se trata de una norma “sin consenso”. Tampoco cuenta con el apoyo de las universidades.

Claves del Estatuto del Becario

Entre los derechos que las personas que realizan prácticas de formación en empresas u organismos equiparados o prácticas curriculares o extracurriculares previstas en los estudios oficiales, destacan los siguientes puntos:

• Uno de los más importantes es la obligatoriedad de que exista un convenio con la universidad o el centro de formación profesional. De este modo, las tareas asignadas al becario deberán ajustarse al contenido recogido en el plan de formación.
• Se regulará el derecho de los becarios a una “adecuada” tutorización de sus prácticas, teniendo las empresas que designar un tutor para que se haga cargo de la coordinación y el seguimiento del itinerario formativo del estudiante. Cada tutor solo podrá tener, como mucho, a cinco personas en formación práctica a su cargo (tres en el caso de empresas de menos de 30 personas en plantilla).
• Otro punto importante es la compensación económica por gastos mínimos. La empresa cubrirá dietas y, en función del caso, el desplazamiento, el alojamiento o la manutención. Si la remuneración es suficiente o existen otras becas o ayudas que cubran estos gastos, la empresa no tendrá que abonarlos. En ningún caso, las empresas están obligadas a asignar un salario a los becarios.
• Asimismo, los becarios no podrán realizar prácticas en horario nocturno ni a turnos, salvo casos excepcionales, es decir, que la propia naturaleza de la actividad requiera la formación en ese horario.
• Desde el 1 de octubre de 2023, todos los becarios tendrán derecho a cotizar. Esta normativa ya está aprobada, como parte de la reforma de las pensiones. Los rectores piden que no se aplique, ya que argumentan que la mayor parte de la aportación es pública: el Gobierno asume el 97% este año y el 95% a partir de enero. Además, el texto establece que se pueda compatibilizar la prestación por desempleo y las prácticas.
• La norma también reconoce la igualdad de condiciones con el resto de los trabajadores de plantilla en cuanto a acceso a servicios se refiere. Por tanto, el becario tendrá derecho a disfrutan de servicios como la restauración, las áreas de descanso o el aparcamiento, entre otros, siempre que las instalaciones lo permitan.
• El estatuto también aplicará los límites y descansos a la jornada laboral, incluidos días festivos y de vacaciones.
• El estatuto también limitará el número máximo de personas becarias al 20% del total de la plantilla de una empresa, aunque cualquier empresa podrá incorporar a dos becarios.
• Con el objetivo de disuadir el incumplimiento de esta nueva regulación, se establece un régimen sancionador con multas de carácter muy grave que podrían oscilar entre los 7.501 y los 225.018 euros dependiendo de si son de grado mínimo, medio o máximo.