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Urbas pierde un recurso clave y se queda al borde de un embargo de 4 millones
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Urbas pierde un recurso clave y se queda al borde de un embargo de 4 millones

Una jueza de Almería tumba los argumentos de la inmobiliaria frente a un fondo oportunista. La inmobiliaria va a recurrir y explica que no le quiere pagar por principios, no por solvencia

Foto: Sede de Urbas.
Sede de Urbas.
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A Urbas se le atraganta un pleito millonario contra un fondo oportunista. La inmobiliaria cotizada ha perdido recientemente un recurso clave contra el embargo de cuatro millones que decretó un juzgado de Vera (Almería) y se expone a una ejecución de la sentencia. Aun así, esta compañía ultima un nuevo intento de anular el último auto judicial, que ve "plagado de irregularidades".

Según Urbas, el juicio tuvo lugar sin la presencia de su abogado, que tenía "una dolencia aguda" y "no podía desplazarse". "Los motivos de fondo que fueron esgrimidos por Urbas en su oposición a la reclamación judicial (...) no pudieron ser objeto de prueba, toda vez que la vista se celebró indebidamente", añaden desde la compañía. Desde la otra parte, argumentan que la empresa podía haber enviado a otro abogado y que este tipo de juicios puede celebrarse sin la presencia del demandado.

Foto: El presidente de Urbas, Juan Antonio Acedo. (EFE/Sergio Cueto)

La batalla legal es frente a la sociedad Debt Resolution, representada por la gestora de recuperaciones Hispania Asset Management. Este fondo compró hace años deuda de Caja Murcia (BMN, actualmente parte de CaixaBank), que en 2019 acabó con una ejecución hipotecaria por la que se recuperaron 1,68 millones. Posteriormente, el inversor reclamó tres millones a Urbas como garante en 2020. La inmobiliaria alega que el contrato había caducado ya y que no aplica, al no haber sido informada del proceso de ejecución de 2019, donde no pudo defender sus derechos.

En febrero de 2022, el tribunal de Vera dio la razón a Debt Resolution y decretó el embargo de casi cuatro millones. Urbas lo recurrió y el resultado se conoció el pasado 8 de mayo, con resultado de nuevo negativo para la inmobiliaria. Entre otros puntos, la jueza señalaba que la garantía no estaba prescrita por un burofax que envió el fondo en 2020.

Participadas

Ante ello, el fondo ha presentado un nuevo escrito ante el juzgado reclamando la ejecución del embargo, que tendría que haberse llevado a cabo ya en febrero de 2022 a pesar del recurso, ya que no debería ser suspensivo. "Corresponde ahora acordar lo necesario para que mi mandante pueda proceder al cobro efectivo de las cantidades por las que legítimamente se ha despachado ejecución", señala la defensa de Debt Resolution. Y añade que, ante los obstáculos de la inmobiliaria —en su opinión—, se dé traslado para su análisis a la Fiscalía y se valore la posibilidad de embargar algunas de las participadas de la cotizada, algunas compradas en los últimos años: Urbas Energy Developments, Icadi, DesarroIlos Renovables Zimmerman y Nalmar Estate.

Este litigio no figuraba en las últimas cuentas de la inmobiliaria, de 2022, registradas ante la CNMV. Tan solo se reconoce uno en Marruecos en el que ha sido condenada a pagar casi 18 millones.

placeholder El presidente de Urbas, Juan Antonio Acedo. (EFE/Sergio Cueto)
El presidente de Urbas, Juan Antonio Acedo. (EFE/Sergio Cueto)

Pese a las últimas resoluciones, desde Urbas son optimistas sobre este proceso: "El auto de 8 de mayo de 2023, por el que se desestima la oposición de Urbas y la continuación de la misma, está plagado de irregularidades, que hacen considerar que se revocará por la Audiencia Provincial ante el recurso de apelación que Urbas se propone interponer en los próximos días".

Junto a ello, creen que Debt Resolution está tratando de dañar su imagen y chantajear a la compañía, y alegan que "la disputa (...) no se debe a un problema económico, sino de discrepancias con la demanda. La compañía ha registrado en 2022 los mejores resultados hasta la fecha, que son también la culminación de tres años de expansión mediante la adquisición de empresas con proyección dentro del grupo". Y recuerdan que desde 2021, la deuda del grupo se ha reducido en casi 200 millones, hasta los casi 50 millones actuales.

"Urbas no puede pagar deudas que no tienen una base fundamentada y legítima, y menos aún a un fondo buitre que difícilmente podrá reintegrar los fondos que Urbas le pudiera anticipar, velando por sus intereses y por los intereses de sus trabajadores, clientes, inversores y accionistas", concluyen. Su misión es convencer de ello a unos tribunales que, de momento, le han sido contrarios en dos ocasiones.

A Urbas se le atraganta un pleito millonario contra un fondo oportunista. La inmobiliaria cotizada ha perdido recientemente un recurso clave contra el embargo de cuatro millones que decretó un juzgado de Vera (Almería) y se expone a una ejecución de la sentencia. Aun así, esta compañía ultima un nuevo intento de anular el último auto judicial, que ve "plagado de irregularidades".

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