Es noticia
Duro Felguera lanza un nuevo SOS a la banca tras quemar el rescate de 120 M de la SEPI
  1. Empresas
MÁS DINERO Y APLAZAMIENTO

Duro Felguera lanza un nuevo SOS a la banca tras quemar el rescate de 120 M de la SEPI

El consejero delegado de la compañía asturiana pide una nueva ayuda a los acreedores al quedarse sin caja por el impacto de la guerra de Ucrania y el conflicto diplomático con Argel

Foto: Las oficinas de Duro Felguera en Gijón. (EFE/J.L.Cereijido)
Las oficinas de Duro Felguera en Gijón. (EFE/J.L.Cereijido)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Duro Felguera vuelve a estar al borde del abismo apenas nueve meses después de que obtuviese un rescate de 120 millones de euros por parte de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y una reestructuración de la deuda con la banca por 85 millones más. Jaime Argüelles, el consejero delegado nombrado por el Estado para sacar a la compañía del preconcurso, ha solicitado a los principales acreedores una nueva ayuda urgente al asegurar que la empresa asturiana de ingeniería solo dispone de dinero hasta finales de año y que no puede atender sus próximas obligaciones.

Argüelles explica en una carta enviada a Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Banco Cooperativo y Liberbank que “circunstancias de fuerza mayor ajenas a la compañía” están provocando una ralentización en el ritmo de consecución de determinados objetivos contemplados en el plan de viabilidad para 2022. Un plan que sirvió para que Duro Felguera obtuviese el pasado mes de noviembre el segundo tramo —80 millones— del rescate aprobado por la SEPI en marzo, momento en que le concedió los primeros 40 millones. El ente público abrió el grifo después de que el plazo para darle la ayuda venciese en hasta tres ocasiones sin que la empresa consiguiera la entrada de un accionista, como se había comprometido.

placeholder Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)
Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)

Pero el consejero delegado del grupo con sede en Gijón esgrime la prolongación del efecto del covid en 2021 y en 2022, la subida de la inflación, la guerra de Ucrania y el conflicto de España con Argelia como cuatro factores que han deteriorado “mes a mes” la situación financiera de Duro Felguera. La empresa asturiana dispone en la actualidad de apenas 44 millones, sin contar el potencial pago de 10 millones por el litigio en el proyecto Hamon/Credendo, que estaba incluido en el plan de viabilidad.

“Bajo estas circunstancias y realizando las mejores estimaciones, la compañía dispondría de caja operativa hasta finales del presente año 2022, y ello sin contar con el impacto de los costes del proceso de reestructuración operativa de la entidad”, reconoce Argüelles en la carta enviada a los acreedores, a los que pide una nueva línea de liquidez. En concreto, 36 millones de euros, cuyo riesgo estaría respaldado al 70% por el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Es decir, el Estado. Además, el primer ejecutivo de Duro Felguera les solicita una carencia de un año de los intereses de la nueva línea de financiación y, sobre todo, el aplazamiento hasta octubre de 2023 de la amortización de cinco millones del préstamo participativo que vence a la vuelta del verano.

placeholder Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)
Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)

La nueva petición ha sorprendido a la banca, que no contaba con un nuevo incumplimiento por parte de Duro Felguera, a la que solo accedieron a refinanciar cuando la SEPI accedió a soltar los 120 millones del rescate. Por ello, han remitido a la empresa al ente público, para que sea el Ministerio de Hacienda quien conceda la nueva ayuda, lo que técnicamente es imposible con el fondo aprobado por el Gobierno para hacer frente a los efectos de la pandemia, puesto que vence el próximo 30 de junio.

El golpe de Argelia

Para Duro Felguera, la prolongación del covid ha provocado una ralentización de la cartera de nuevos pedidos, con la consecuente generación de ventas y de márgenes. Una coyuntura que se ha visto perjudicada por la subida de la inflación, que ha impactado en el “sector de la construcción industrial y de bienes de equipo, muy expuesto al precio de las materias primas (entre ellas, el acero), el transporte y la energía”. Lo que se traduce en “dificultades y retrasos en las entregas de los proyectos”.

La compañía reconoce que los contratos firmados con sus clientes “no contemplan cláusulas de revisión de precios para paliar estas contingencias, lo que conlleva en la actualidad a negociaciones con cada uno de ellos para tratar de reequilibrar los impactos negativos sobrevenidos por estas circunstancias adversas”. Un escenario que la guerra contra Ucrania no ha hecho más que agravar por el aumento de los costes de producción, lo que ha generado que muchos proyectos se hayan suspendido o se hayan retrasado “sin fecha cierta de inicio”.

placeholder Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)
Pinche aquí para verlo en detalle. (EC)

En lo que hace hincapié Argüelles es en el impacto del conflicto diplomático entre España y Argelia, donde Duro Felguera tiene dos obras muy relevantes. Una de ellas se denomina Bellara, prácticamente finalizada, pero con cuyo cliente privado está negociando un “importe económico importante afectado por esta situación. A fecha de hoy, no se podrán materializar las transacciones financieras”, explica el consejero delegado.

El segundo proyecto —Djelfa— es la construcción de una central de ciclo combinado para la Société Algérienne de l´Electricité et du Gaz, la empresa estatal de distribución de electricidad y gas, que está ejecutada al 70% y que tiene un impacto de 150 millones, la mitad de la cartera de obra de Duro Felguera. La compañía española, que había logrado un acuerdo con las autoridades argelinas para retirar los litigios judiciales previos y acabar los trabajos, admite que, tras el choque entre ambos países, percibe una ralentizaciones de las negociaciones, “así como incumplimientos en los acuerdos de pago”.

Duro Felguera vuelve a estar al borde del abismo apenas nueve meses después de que obtuviese un rescate de 120 millones de euros por parte de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y una reestructuración de la deuda con la banca por 85 millones más. Jaime Argüelles, el consejero delegado nombrado por el Estado para sacar a la compañía del preconcurso, ha solicitado a los principales acreedores una nueva ayuda urgente al asegurar que la empresa asturiana de ingeniería solo dispone de dinero hasta finales de año y que no puede atender sus próximas obligaciones.

Duro Felguera SEPI Argelia Rescate
El redactor recomienda