La Audiencia de Madrid condena en firme a Amazon por retener producto a un proveedor

La Audiencia Provincial Civil de Madrid ha condenado a Amazon a abonar a un proveedor de productos electrónicos 461.587,07 euros más los intereses legales por no pagar ni proceder a la devolución de material entregado a la plataforma tras un pedido previo. El tribunal ha desestimado el recurso de apelación del gigante fundado por Jeff Bezos contra un fallo anterior dictado por el Juzgado 44 de Primera Instancia en febrero de 2021 por una reclamación de un mayorista murciano llamado Bubblefire contra la filial española de Amazon EU SARL, con la que venía trabajando desde hacía varios años como suministrador de material electrónico como procesadores informáticos, cámaras GoPro o cepillos de dientes eléctricos.

En ese primer procedimiento, el tribunal censuró que todas las unidades remitidas fueron aceptadas por Amazon sin que constase devolución alguna. "Lo que no es dable es que ni devuelva los productos, ni proceda al abono de los mismos, enriqueciéndose injustamente", insiste. Amazon apeló la resolución argumentando que no se había tenido en cuenta una demanda de reconvención en la que aseguraba que no se había acreditado la entrega de la mercancía cuyo importe se reclamaba, algo que fue rebatido en la primera fase del procedimiento.

El fallo ha puesto de relieve un problema que no fue único con Bubblefire: las discrepancias de Amazon con algunos de sus proveedores de productos a la hora de proceder a su custodia logística. Otro mayorista de Granada llamado Megasur está pendiente de juicio por una reclamación similar a la de Bubblefire, presuntos impagos de productos entregados, pero que Amazon no reconoce, devoluciones de referencias que la proveedora no reconoce, discrepancias en los gastos de envío o el no desembolso de cánones digitales.

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La sentencia de la Audiencia madrileña fue declarada firme en un escrito del letrado de la Administración de Justicia, después de que Amazon optase por no recurrir en casación ante el Tribunal Supremo. El fallo obliga a Amazon a pagar las costas del procedimiento.

El responsable de Bubblefire, Miguel Torres, asegura que hay otros casos como el suyo y el de Megasur, y que el gigante americano de la distribución está generando problemas a muchos proveedores por situaciones como la que ha sufrido su empresa, con la que ya no trabaja. "Todo este tiempo hemos estado sin ese dinero. Los vendedores no tienen por qué soportar esto. Están hundiendo a algunos vendedores", se queja. Es algo que la compañía niega, asegurando que las pymes que emplean la plataforma incrementan sus ventas, hasta en un 25% en la mitad de los casos.

Su caso comenzó en 2018, cuando empezaron a producirse discrepancias entre Amazon y su proveedor español. Según ha quedado acreditado en la sentencia, la plataforma no estaba abonando la totalidad de los pedidos efectuados que habían sido "debidamente entregados y facturados". Bubblefire identificó dos tipos de discrepancia. Una primera con pago "aprobado" por la propia Amazon por importe de 78.054 euros que incluía "material electrónico entregado, facturado y reclamado el pago" que, según la denuncia, la propia plataforma reconocía, pero del que no constaba su abono. Y un segundo conflicto de mayor cuantía, que se correspondía con otro segundo tipo de facturas por valor de 383.532,63 euros. Estas entregas habían sido eliminadas del sistema de Amazon, cuyos comprobantes de entrega no reconocían a los transportistas. En este caso, la demandante aportó al procedimiento documentación acreditativa como material entregado, factura efectuada o correos cruzados como facturas aprobadas pero no pagadas.