Ibercaja negocia con el BCE y el BdE una vía para ampliar el plazo de la salida a bolsa

Ibercaja Banco activa el plan B a su salida a bolsa ante la volatilidad de los mercados. La entidad aragonesa ha comenzado a negociar con el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de España la constitución de un fondo de reserva de 300 millones, con la idea de ganar plazo para su OPV (oferta pública de venta), según distintas fuentes consultadas por este medio.

Se trata de una vía alternativa pero complementaria: el fondo de reserva tiene regulatoriamente dos años más de plazo, con lo que Ibercaja Banco se quitaría el 'corsé' de tener que acelerar su salida a bolsa antes de que acabe 2022, en plena crisis por la inflación y Ucrania. Mientras, puede volver al plan A de intentar la OPV cuando lo permita el mercado durante los próximos dos años y medio.

Las mismas fuentes explican que el diálogo con el BCE y el Banco de España está muy avanzado y con buenas perspectivas. Los supervisores han pedido en las últimas semanas que el banco aragonés explique con todo lujo de detalles cómo llegaría a conseguir que su principal accionista, la Fundación Ibercaja —con un 88% del capital—, reúna 300 millones del fondo de reserva de aquí a 2024. Se ha tratado casi de un test de estrés en el que se ponía a prueba la capacidad del banco de dar un dividendo cada año que permitiera a la fundación lograr este presupuesto.

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J. Zuloaga A. Marco

La entidad liderada por Víctor Iglesias ha defendido con números que podría llegar a hacerlo en las condiciones actuales sin tener en cuenta la actual revalorización del euríbor que está descontando el mercado para los próximos meses. La tasa a la que se ligan la mayor parte de las hipotecas ha pasado este año del -0,5% al 0,08% y los inversores esperan que llegue a cerca del 2% durante 2023. Este escenario dispararía los márgenes de entidades con mayor exposición al negocio hipotecario, como Ibercaja.

La ventana de junio

Estas negociaciones con el BCE y el Banco de España se producen en paralelo con los trabajos de Ibercaja Banco para salir a bolsa. La entidad tiene casi descartado acudir a la ventana que se abrió en abril y dura hasta mediado de mayo, por consejo de sus asesores, como adelantó este medio.

La siguiente ventana de mercado se abrirá a finales de mayo hasta principios de julio y la entidad no descarta ejecutarla si se dan las condiciones de mercado: que mejoren las valoraciones de los bancos en bolsa y que se reduzca la actual volatilidad derivada de todo lo que está ocurriendo a nivel internacional.

Los dos principales bancos comparables a Ibercaja cotizan a niveles similares a los que estaban cuando la entidad estuvo a punto de dar el salto al mercado, en febrero. Entonces, CaixaBank tenía una valoración de mercado de un 65% de su valor en libros, frente al 69% actual, y Unicaja Banco estaba en un 40% de su valor en libros, un nivel idéntico. El sondeo que hicieron entonces los asesores del grupo aragonés apuntó a una valoración entre la de Unicaja y el 50% de sus libros, lo que unido a la volatilidad por la inestabilidad en Ucrania llevó al banco a frenar la operación.

Uno de los problemas a los que se enfrenta desde entonces Ibercaja Banco es el del menor plazo, que hará que los inversores exijan cada vez un mayor descuento para comprar sus acciones. Con las negociaciones con el BCE y el Banco de España quiere romper este círculo vicioso, y poder debutar en bolsa en el momento más idóneo.

Las entidades contratadas para vender la OPV son JP Morgan, Morgan Stanley, Bank of America, UBS, Alantra, Stifel y Société Générale. El resto de asesores son Rothschild, Linklaters, Uría Menéndez y Davis Polk.