Estos son los proyectos de emprendimiento femenino más destacados de 2021

Quienes tenemos perro hubiéramos agradecido más de una y dos veces saber dónde podemos entrar con él si salimos de tapeo. Esto es posible gracias a 'De tapas con mi perro', un directorio de servicios y locales ‘pet friendly’ para que disfruten dueños y mascotas. Con este proyecto de inclusión canina, su creadora, Helga Figueroa, ha ganado la edición 2021 de Gira Mujeres, un programa de formación y capacitación impulsado por Coca-Cola, dirigido tanto a emprendedoras noveles como a las que buscan reenfocar su negocio.

Este animal es el mejor amigo del hombre, pero muchas veces le toca quedarse a esperar en la puerta. En España, una de cada cuatro familias convive con esta mascota; y cada cuatro minutos se abandona un can sin microchip de identificación, según la Real Sociedad Canina de España (RSCE). “Empecé organizando quedadas para ir de paseo y tapas con grupos de gente con perro. Un día, en un bar, ofrecieron galletas para ellos y así nació la idea de hacerles partícipes del tapeo de una forma sana, con su propia comida, más saludable que unas simples galletitas secas”, explica Helga.

El proyecto no solo pretende facilitar la vida a las familias para poder organizar cualquier plan sin separarse de sus miembros perrunos; también quiere beneficiar al sector de la hostelería, que tanto ha sufrido con la pandemia, darle un valor añadido para fidelizar clientes ofreciendo también tapas caninas. Entre estos manjares encontramos anchoas ahumadas, migas de pollo o dados de vaca o buey y platos combinados para perros, como guisos de carne con verduras o migas de pollo. “Gracias a este reconocimiento, una idea entrañable y utópica se convirtió, además, en una propuesta de valor para la hostelería”, añade. 'De tapas con mi perro' funciona, de momento, en establecimientos de Valencia o Alicante y ya está expandiéndose al resto de España.

466 proyectos presentados, cuatro ganadoras

Además de la iniciativa de Helga, en esta quinta edición se ha premiado a otros tres proyectos más, elegidos entre 466 presentados y 24 finalistas. María Romero ha sido reconocida por 'Turismo de pueblo', una guía virtual multilingüe a través de WhatsApp para poner en valor costumbres, historia y gastronomía de pueblos de menos de 20.000 habitantes; Yla Eunice Zapater, por 'Umami ethical food', quesos vegetales, ecológicos y artesanos elaborados con anacardos y almendras ecológicas del Bajo Aragón, y Enedina González, por 'Ecogranja La Pradera', una granja de producción de huevos ecológicos que combina el bienestar animal con una conciencia ecológica, que también busca hacer la industria alimentaria más justa y sostenible.

El certamen, que cuenta con la colaboración de entidades impulsoras de la igualdad de género y el desarrollo económico de ámbitos urbanos y rurales, como Fundación Mujeres, Dona Activa, AlmaNatura e Impact Hub 2021, nació hace cinco años para cubrir las necesidades de información y formación de las mujeres emprendedoras mediante el refuerzo de las competencias digitales, enfocadas al emprendimiento.

A causa del covid, las mujeres han emprendido menos y también han abandonado más proyectos que estaban en marcha

Su objetivo: reducir las brechas de género, digital y emprendimiento; fomentar el acompañamiento durante dicho proceso, la información sobre financiación y, en el actual contexto tras la pandemia, la ayuda en materia de gestión emocional y empoderamiento personal. El premio para cada una de las cuatro ganadoras ha sido de 5.000 euros en concepto de capital semilla, una mentoría y acompañamiento de cuatro meses de la mano de Bridge for Billions, firma dedicada al emprendimiento, así como un curso 'online' de ESIC valorado en 1.900 euros en un área de negocio a su elección.

En nuestro país, la brecha de emprendimiento por género ha bajado en los últimos tres años. De hecho, antes de la pandemia, las iniciativas lideradas por mujeres suponían un 48% del total, llegando casi a la paridad. Sin embargo, la crisis del covid-19 ha impactado más en la tasa de emprendimiento femenino. Las mujeres han emprendido menos respecto a 2019 y también han abandonado más proyectos que estaban en marcha. Tan solo se ha incrementado levemente la intención femenina de emprender; todos estos datos, según el último Global Entrepreneurship Monitor (GEM), en colaboración con Enisa (empresa pública dedicada al emprendimiento y Coca-Cola, un observatorio internacional que analiza el fenómeno emprendedor.

Hoy, solo 17 de cada 100 'startups' están lideradas o colideradas por mujeres y en 2020 apenas el 28% de emprendedoras percibió nuevas oportunidades de negocio. En el sector TIC, el porcentaje de mujeres emprendedoras se reduce al 12%, por debajo del 19% de la OCDE y muy lejos del 30% de los países europeos, según un estudio de EAE Business School. A la hora de lanzarse a abrir un negocio, lo que más dificulta esta decisión es la menor percepción de oportunidades en su entorno, una cultura emprendedora menos favorable y el miedo al fracaso (un 48% frente al 42 % en ellos). Como factor impulsor para dar a conocer sus proyectos, las mujeres destacan el papel de los medios de comunicación.

El 'foodtruck' que sigue despertando conciencias

Aparecer en los medios fue, precisamente, una de las ventajas que más agradeció Berta Ruiz, una de las ganadoras de la primera edición de GIRA Mujeres. Era 2017, ella tenía apenas 26 años y el sueño de sacar adelante 'AguaViento Water Wind'. Este ‘foodtruck’ o camioneta-restaurante ecológica (usa placas solares para cocinar y envases compostables) y vegana (sin productos de origen animal) que cautivó en su momento al jurado, ahora es el medio de vida de esta gaditana. El sábado que hay 'ecomercado', Berta y su pareja, Philip, se levantan a las seis de la mañana para recorrer 200 kilómetros y servir sus croquetas caseras, sus mini montaditos de 'jack fruit' o sus 'wadas', buñuelos típicos de la India.

Por la tarde, toca recoger y limpiar la furgoneta y volver a casa con su hijo Dylan, de cinco años. Cuando no viajan se quedan en su sitio de siempre, cerca del colegio San Ramón, en Los Barrios (Cádiz), donde los clientes ya son habituales. “No buscamos sitios turísticos, porque no va con nuestra filosofía. Aunque sí es verdad que han venido turistas desde otros puntos del país solo para degustar nuestra cocina”.

El resto de la semana, la pasan cocinando lo que venderán sábado y domingo, así como cultivando plantas medicinales, verduras, frutas y setas en su huerto. Trabajan solo con productos de temporada y locales, cocinan con cariño y esmero cada plato, todo alineado con sus valores. Cuatro años después, "puedo decir que he conseguido vivir de lo que quería, o dicho de otro modo, hacer de mi trabajo mi estilo de vida", concluye Berta.